Comunicado «sobre el comportamiento de la Policía Nacional en el desahucio de ayer en el barrio del Zaidín»

El día de ayer, casi 200 personas, muchas de ellas vecinos del barrio del Zaidín, acudimos a la convocatoria de Stop Desahucios del 15M de Granada para frenar pacíficamente el segundo intento de desahucio de Teresa. Desde una hora muy temprana, la Policía Nacional realizó un fuerte despliegue de cinco furgonetas y más de 50 agentes, impidiendo el acceso a la calle Bernarda Alba, donde se encuentra la vivienda. En un primer momento se logró detener el desalojo, pero una vez disuelta la concentración, la comitiva judicial, junto a la Policía y el cerrajero, volvió al inmueble y ejecutó el lanzamiento, impidiendo además el paso a los medios de comunicación allí presentes. Ya se denunció ayer la manera irregular en la que se llevó a cabo este desahucio, puesto que el acto se realizó tres horas después de la hora inicialmente prevista, sin que se comunicara a la persona afectada, dejándola en una situación de total indefensión.

Con este comunicado queremos resaltar la gravedad de las formas en las que se llevó a cabo la actuación policial, así como la irresponsabilidad de los mandos de la Unidad de Intervención Policial (UIP) implicados en la misma. Manifestamos en particular los siguientes hechos:

– Desde el principio la Policía Nacional respondió al comportamiento pacífico de las personas concentradas con un claro nerviosismo y una actitud verbal agresiva.

– Más tarde, cuando se intentó impedir también pacíficamente el acceso de la comisión judicial a la vivienda de Teresa, lo que en principio era una actitud, se convirtió en un comportamiento totalmente desproporcionado. Los agentes no tuvieron ningún reparo en dar empujones, patadas y puñetazos a las personas que se encontraban fuera del cordón policial. Incluso llegaron a zarandear violentamente a personas mayores, rompiendo las gafas a una de ella. Así, propinaron un golpe en la nariz a uno de los concentrados y arrastraron por el suelo a otra persona, agarrándola por el cuello. En un momento dado, uno de los agentes tuvo que pedir a otro policía que soltara a la persona con la que se ensañaba, a la que perseguía mientras la agarraba hasta varios metros fuera del cordón policial.

– Finalmente, se produjo la detención de un joven de 19 años, que tal y como puede verse en documentos gráficos fue reducido con brutalidad. Mientras sufría este trato injusto y para amederentar al resto de personas, el arrestado fue llevado expresamente frente a la cristalera del portal donde permanecían unos 20 manifestantes. El compañero fue puesto en libertad ayer por la tarde, con el cargo de atentado a la autoridad, acusado de haber herido a dos agentes. Denunciamos la falsedad de esta acusación, puesto que en ningún momento hubo actitud agresiva por parte del detenido y a pesar de la vesión policial que se basa en dos policías heridos, tampoco por parte del resto de los manifestantes se dio violencia alguna. Queremos destacar que no es la primera vez que se producen dinámicas de este tipo en Granada, con un victimismo por parte de la Policía que no se corresponde con la realidad, para así justificar las continuas detenciones arbitrarias e injustas que pretenden acabar con la protesta social. En menos de dos años del movimiento en la provincia, son ya cinco los detenidos de esta forma en acciones del 15M y que han terminado siendo absueltos por el juez, con una reprimenda por parte de éste a la Policía y con las consecuentes depuraciones internas de los agentes, sin que trascienda a la luz pública. En cuanto a los heridos, queremos recordar como ya, en otra ocasión, los heridos que argumentan los antidisturbios en Granada, fueron luego desmentidos por el propio subdelegado del gobierno. Todo apunta a que por enésima vez nos encontramos ante un abuso de autoridad y un montaje policial.

Por lo tanto, a la luz de los hechos anteriormente expuestos, manifestamos toda nuestra solidaridad al compañero detenido y exigimos que se retiren sus cargos. Al mismo tiempo, insistimos en la dimisión del Subdelegado del Gobierno en Granada, Santiago Pérez López, como máximo responsable de la actuación policial. Desde su llegada a este cargo político, Pérez López no ha dejado de perseguir cualquier tipo de movilización ciudadana a través de la represión, las detenciones, las multas y las listas negras de activistas de movimientos sociales.