El Gobierno admite que las denuncias por acoso se han duplicado en las Fuerzas Armadas
La información responde a una solicitud de informes realizada en el realizó en el Congreso de los diputados por el diputado y portavoz de Defensa de Izquierda Unida, Miguel Ángel Bustamante. El Ejecutivo indica ahora que ‘a partir de 2016 cuando se pueden facilitar datos de acoso desagregados en sus distintas modalidades’ se pasó de 20 denuncias en ese año, de las que 16 son del ámbito penal y 4 del disciplinario, a 42 casos en 2017, de ellos 16 penales y 26 en el ámbito disciplinario. Estas cifras suponen también triplicar la media de casos registrada en el periodo que va entre 2004 y 2015, del que no hay cifras desagregadas por años. Bustamante afirma que “además del notable aunque explicable crecimiento en las denuncias a IU nos preocupa especialmente -con la salvedad de que la mayoría de procedimientos de 2016 y 2017 están sin concluir- el bajo porcentaje de ellos que acaba con una decisión condenatoria, tanto penal como disciplinaria”.
El número de denuncias por acoso se ha duplicado en las Fuerzas Armadas en los dos últimos años desde que pasó a considerarse un delito específico o una falta disciplinaria muy grave en el ámbito castrense a raíz de diversos cambios legales que entraron plenamente en vigor en 2016. Los casos contabilizados suponen, además, el triple de la media de acosos en los tres ejércitos contabilizada entre los años 2004 y 2015, un periodo en el que existen cifras generales pero no desagregadas por años.
El Gobierno responde así a una solicitud de informes y documentación registrada el pasado mes de febrero por el diputado y portavoz parlamentario de Defensa de Izquierda Unida, Miguel Ángel Bustamante. En concreto, el informe del Ejecutivo señala que ‘a partir de 2016 cuando se pueden facilitar datos de acoso desagregados en sus distintas modalidades’ se pasó de 20 denuncias en ese año, de las que 16 son del ámbito penal y 4 del disciplinario, a 42 casos en 2017, de ellos 16 penales y 26 en el ámbito disciplinario.
El anterior Ejecutivo del PP respondió en abril a otra iniciativa parlamentaria de IU con cifras menos actualizadas. En este caso señalaba que, según datos del Tribunal Militar Central, entre 2004 y 2015 hubo en las Fuerzas Armadas “174 denuncias relacionadas con acoso”, lo que supone una media de 14,5 casos por año, frente a los 20 ya mencionados de 2016 o prácticamente el triple de 2017, con 42 casos.
Las cifras contendidas en el último informe entregado a IU son las más actuales puestas sobre la mesa desde que poco antes de concluir 2015 entrara en vigor el nuevo protocolo de actuación frente al acoso sexual y por razón de sexo en las Fuerzas Armadas. Izquierda Unida confirma así la preocupación que mantiene desde hace tiempo frente a este grave asunto a raíz de las informaciones no oficiales que manejaba hasta ahora y que a lo largo de los últimos meses le han llevado a poner en marcha distintas iniciativas parlamentarias en el Congreso.
En el texto que el Ejecutivo remite a IU se puntualiza que ‘en relación con la información interesada, se señala que el acoso sexual, por razón de sexo y profesional no se recogía en la legislación militar como un delito o falta disciplinaria específicamente, sino que se encuadraban dentro de otros delitos o faltas disciplinarias genéricos como el abuso de autoridad o la extralimitación en el ejercicio del mando’.
‘Dicha situación -prosigue- cambió con la promulgación de la Ley Orgánica 8/2014, de 4 de diciembre, de Régimen Disciplinario de las Fuerzas Armadas-FAS (entró en vigor el 5 de marzo de 2015) y la Ley Orgánica 14/2015, de 14 de octubre, del Código Penal Militar (entró en vigor el 15 de enero de 2016), que recogen de forma específica los delitos y faltas disciplinarias muy graves de acoso en sus diferentes modalidades (sexual, por razón de sexo y profesional)’.
En cuanto a la situación concreta de los distintos procedimientos abiertos se especifica que, en 2016, de las 16 denuncias de ámbito penal hay ‘7 procedimientos finalizados (1 sobreseído, 1 archivado, 3 remitidos a la autoridad disciplinaria y 2 absueltos) y 9 están en trámite’.
De las 4 denuncias en el ámbito disciplinario también de 2016 hay ‘4 procedimientos finalizados (3 archivos y 1 sanción por falta grave)’.
Respecto a 2017, de las 16 denuncias penales hay ‘1 procedimiento finalizado (sobreseído) y 15 en trámite’.
De las 26 denuncias en el ámbito disciplinario en ese mismo año hay ‘11 procedimientos finalizados (9 archivos y 2 sanciones disciplinarias) y 15 están en trámite’.
En relación a estos últimos datos el diputado Miguel Ángel Bustamante advierte de que “además del notable aunque explicable crecimiento en las denuncias a IU nos preocupa especialmente -con la salvedad de que la mayoría de procedimientos de 2016 y 2017 están sin concluir- el bajo porcentaje de ellos que acaba con una decisión condenatoria, tanto penal como disciplinaria”.
“No sólo nos preocupan los datos porcentuales -avisa-, sino el hecho de que esta situación de mayoría de archivos y sobreseimientos retraiga aún más a las víctimas para dar el difícil paso de denunciar cualquier situación de acoso en un ámbito tan cerrado y tan poco propicio para ello como es el castrense”.
Izquierda Unida denunció ya el pasado mes de mayo, en este caso a través de su diputada Eva García Sempere, que de las ya mencionadas 174 denuncias relacionadas con acoso contabilizadas por el Tribunal Militar Central entre 2004 y 2015 sólo 22 “concluyeron con sentencia condenatoria”, es decir, apenas el 13% del total.
En el último informe facilitado ahora el Gobierno detalla también que ‘el 69% de las denuncias que se presentan ante el jefe de unidad o autoridad disciplinaria y el 31% ante las Unidades de Protección frente al Acoso (UPAs). Entre los años 2016 y 2017 se tramitaron 17 denuncias a través de las UPAs’.