Gema Delgado •  Mundo Obrero •  Opinión •  18/07/2022

Carlos Sánchez Mato: «Demostramos que se puede gobernar de otra forma»

“Hay que democratizar la economía y la educación en economía, y llevarla a los centros donde nos socializamos, desde los bares a las peluquerías”.

Carlos Sánchez Mato: «Demostramos que se puede gobernar de otra forma»

Cuando Carlos Sánchez Mato gestionaba el presupuesto del Ayuntamiento de Madrid desde la Consejería de Hacienda, empezó a descubrir e investigar los contratos opacos y millonarios que habían dejado los anteriores gobiernos municipales del PP. Uno de ellos fue el Open de Tenis: el contrato que Gallardón había hecho con Madrid Trophy Promotion se llevaba el 70% del presupuesto de Deportes. El torneo aun sigue costando a los madrileños 15 millones de euros mientras en otras ciudades, como Roma, se celebra sin coste público. En algunas facturas millonarias con la empresa promotora se repetían los conceptos, en otras faltaba información… Y además, la promotora disfrutaba de la cesión de las instalaciones de manera prácticamente gratuita.

Sánchez Mato, junto a la entonces Consejera de Cultura y Deporte, Celia Mayer, y la presidenta de Madrid Destino, Ana Varela, contrataron dos informes jurídicos (administrativo y penal) a dos despachos para estudiar las vías de acción ante un nuevo pago a realizar a la empresa organizadora del Open de Tenis porque las irregularidades se acumulaban y la Asesoría jurídica del Ayuntamiento no podía asesorar a la empresa pública al no existir convenio. Se hizo todo siguiendo escrupulosamente la ley de contratos del sector público. El coste de los informes fue de 26.000 y 24.000 euros.

Cuando Sánchez Mato y sus compañeras denunciaron las irregularidades a la Fiscalía Anticorrupción, el Partido Popular inició una cacería política contra ellos. El PP y Villarejo les acusaron de prevaricación y malversación de fondos públicos. Pasaron cinco años hasta que la Audiencia Provincial de Madrid, el pasado 18 de mayo, se pronunciara dejando claro que Sánchez Mato, Mayer y Varela actuaron en el ejercicio de sus competencias y responsabilidades, sin otra intención que “proteger y salvaguardar los intereses públicos y las arcas municipales”. Condena, además, al PP a pagar las costas y les acusa de haber actuado de mala fe. La sentencia es ya firme y el PP solamente ha recurrido el pago de las costas judiciales. Respecto al PP y a quienes les financian y protegen, siguen en la misma línea. Aunque en el trasfondo de la sentencia se viene a poner en duda la legalidad de los contratos para el Open Tenis, no se han investigado. Es más, el alcalde Martínez Almeida ha ampliado el contrato hasta 2030.

La nota positiva es que esta vez no ganaron los corruptos y la sentencia establece una línea jurisprudencial por la que se alienta a los servidores públicos a que sean celosos y vigilantes del uso del dinero público y a no vacilar a la hora de documentarse y pedir asesoramientos jurídicos externos cuando la complejidad de los contratos de empresas del sector público así lo requieran, siempre en intereses de la ciudadanía y de evitar perjuicios al erario público, como ha resumido el abogado que se encargó de su defensa, Juan Moreno.

GEMA DELGADO: Os pedían 5 años de cárcel y 24 años de inhabilitación. Los magistrados de la Audiencia Provincial de Madrid no sólo os han absuelto sino que han condenado a costas al PP. Pero el daño ya está hecho. Les ha salido muy barato sacaros del tablero político durante 5 años. Eso es jugar muy sucio.
CARLOS SÁNCHEZ MATO:
 Es un mecanismo que ni ha empezado con las compañeras Ana, Celia y conmigo, ni terminará con nosotros. Son los episodios que ocurren cuando las derechas y élites económicas intentan anular a adversarios políticos porque entienden que les generan problemas cuando llegan a las instituciones. En este caso, hicimos una verdadera lucha denodada contra la corrupción política que reinaba en el Ayuntamiento de Madrid durante las últimas décadas y que tiene un protagonista claro con nombres y apellidos: el Partido Popular. Por eso nos atacaron por tierra, mar y aire, y nos pusieron esta denuncia, absolutamente falsa, para anularnos. Y así se ha demostrado en la sentencia, que es demoledora y resuelve que hubo una estrategia clara por parte del Partido Popular para anularnos políticamente: les han condenado por mala fe y temeridad.
Pero, lamentablemente, el resultado es que aunque hayamos ganado judicialmente, lo hacemos 5 años y un día después de que nos denunciaran, con las consecuencias que durante este tiempo han tenido para nosotras.

“El Banco de España no tiene una posición neutral, defiende el orden capitalista neoliberal y los intereses de quienes más tienen”

Seguro que la mayoría de la gente no se ha enterado que nos han absuelto y para ellos seguiré siendo otro corrupto más. Da mucha pena, pero hay que levantar la cabeza y seguir por los que nos precedieron y por las que nos seguirán.

Lanzan infundios para políticamente intentar hacer ver a la gente que todos somos iguales, que la derecha cuando llega a las instituciones roba y que cuando llega la izquierda también malversa. Y eso genera muchos problemas a quienes, cuando de manera puntual llegamos a las instituciones, nos ponemos al servicio de dichas instituciones y de la gente, en lugar de venir a lucrarnos. Y, además, esos infundios hacen que ese odio generado interesadamente por la derecha se convierta en amenazas de muerte, pinchazos de las ruedas del coche y todo ese tipo de cosas que yo y otros muchos compañeros y compañeras hemos vivido. No he sido el único; anda que no tenemos concejales en un montón de lugares más pequeños y con luchas más desconocidas que sufren amenazas y agresiones.

“Las derechas y élites económicas intentan anular a adversarios políticos que les puedan generar problemas cuando llegan a las instituciones”

G.D.: ¿Es así como intentan desalentar a quien pretenda investigar la corrupción del PP?
C.S.M.:
 Esa es la idea, porque si a quien asoma la cabeza se la cortan, lógicamente es una forma de decirles mira lo que te puede pasar. Por eso lo hacen. Son malos pero no tontos. Esta vez no han ganado los corruptos y tienen que saber que a ninguna de las personas que militamos en Izquierda Unida nos quitan ni un gramo de las convicciones que tenemos.

G.D.: Te pusieron muchos palos en las ruedas cuando gestionabas el presupuesto del Ayuntamiento de Madrid. No debió ser nada fácil ¿Cuál es el balance de esos años?
C.S.M.:
 Yo estoy orgullosísimo de que en los años que estuve al frente de las finanzas de la ciudad incrementamos el gasto público y social en más de mil millones de euros haciéndolo compatible con sanear las cuentas públicas de la ciudad: la deuda se redujo en 2.957 millones de euros y tuvimos un superávit de 4.600 millones de euros. Creo que hicimos un buen trabajo político en un momento muy difícil demostrando que se pueden hacer políticas públicas de otra manera. Es decir, se puede gobernar de otra forma. Aunque no le guste a quienes utilizan las instituciones para saquearlas.

“A los accionistas que controlan las grandes cadenas de televisión les interese mostrar que no hay otra forma de hacer economía que la del PP y VOX”

Lo demostramos en el Ayuntamiento de Madrid, igual que ahora lo están demostrando compañeras y compañeros en el gobierno: Alberto Garzón en Consumo; Ione Belarra y Enrique Santiago en Servicios Sociales, demostrando que hay otra forma de abordar las ayudas a la dependencia y de trabajar a largo plazo para implantar la Agenda 2030; Irene Montero en Igualdad siendo vanguardia de las políticas feministas; con Subirats en Universidades; y Yolanda Díaz demostrando que podemos tener un modelo laboral con contratación indefinida como norma general y no como excepción, como ha sido hasta ahora. Nos dijeron que era imposible y demostramos que sí se puede.

Y cuando dicen que la única receta es bajar los impuestos, respondemos que a quien hay que bajárselos es a la gente más vulnerable, de renta más baja, y hay que subírselos a quien tiene mucho dinero y patrimonio. Lo hicimos y salió bien. Bajamos el IBI a más del 40% en los barrios más vulnerables de la ciudad, y se lo subimos al 1% de los mayores contribuyentes… y al final recaudábamos más. Lo hacíamos utilizando herramientas y políticas fiscales de las que hemos hablado muchas veces y que la derecha intenta ridiculizar para que no se pongan en práctica.

Lógicamente no podían dejarnos ir vivos y por eso utilizan las estrategias de lawfare. En este caso les ha servido para destruirme a mí personal y políticamente. Pero resistiremos el embate.

G.D.: A pesar de que a estas alturas deberíamos estar curados de espanto, nos volvimos a llevar las manos a las cabeza con los últimas audios de Villarejo y Esperanza Aguirre. También intentaron pastelear con vosotros para que mirarais a otro lado. ¿Qué pasó?
C.S.M.:
 No sólo presentó acusación contra nosotros el PP. Es que también lo hizo el comisario Villarejo a través de su asociación Transparencia y Justicia; la misma con la que pasteleaba en esos audios tristemente famosos de Esperanza Aguirre y el ínclito comisario. En nuestro caso también fue así. Villarejo se personó. Yo no hablé con él en mi vida, pero el abogado que le representaba sabía que aunque no habíamos cometido ningún delito, Izquierda Unida y Podemos estábamos personados en la Operación Tandem; esto ocurría en 2017, cuando no se sabía gran parte de las cosas que cinco años después conocemos y damos por sabidas. Nos dijeron que si nos retirábamos del caso Tandem ellos retiraban la querella contra nosotros. Formas de actuar mafiosas y actitudes deplorables que demuestran que tenemos una democracia bastante limitadita. Le dije que yo no chalaneaba con cloacas. Imagino que si hubiéramos acordado algo saldría en los audios, pero como les mandé a la mierda, pues no.

“Lo triste es que el milagro económico sea Rodrígo Rato, y ya sabemos todos lo que hizo y lo que se llevó”

G.D.: Hoy te condenan en los telediarios antes de llegar a los juzgados. Manejan la agenda y el lenguaje; acaban consiguiendo que la gente reniegue de los impuestos y que no se hable de políticas fiscales, recursos, redistribución y del común.
C.S.M.:
 Es lógico. Los medios de comunicación son herramientas en manos de los grandes propietarios patrimoniales de este país y siempre van a intentar llevarse el agua a su molino, en este caso, la pasta a su bolsillo. Y tampoco nos puede sorprender que a los accionistas que controlan las grandes cadenas de televisión les interese mostrar que no hay otra forma de hacer economía que la que propone el Partido Popular, Vox o Ciudadanos. Es normal que estas cadenas lancen infundios que no tienen sentido desde el punto de vista del análisis económico. Y ni falta que les hace.

Cuando llegamos al Ayuntamiento, lo primero que hicimos fue anular los contratos con las Agencias de Calificación de Riesgo. Somos contrarios a esas agencias, por lo que han hecho y por cómo han actuado en contra de gobiernos en todos los lugares del mundo. Pero, además, porque nuestras actuación política pasa por financiar políticas públicas con impuestos, cobrando más a quienes más tienen. En el momento en que cancelamos esos contratos, me dedicaron titulares en El Mundo, ABC… y, por supuesto, en las cadenas de televisión: el mensaje era que íbamos a arruinar la ciudad. Hasta mi madre me llamó y me dijo “hijo, ¿qué estás haciendo con Madrid?». Dos años después demostramos que no sólo no habíamos arruinado la ciudad sino que habíamos reducido los intereses que pagábamos por la deuda. Pero ningún medio rectificó. Yo seguía arruinando la ciudad aunque pagáramos 300 millones menos de intereses al año. Nadie nos reconoció lo que hicimos; ni lo esperábamos. Lo triste es que el milagro económico sea Rodrígo Rato, y ya sabemos todos lo que hizo y lo que se llevó.

G.D.: ¿Cómo aprender a interpretar críticamente la información sobre economía?
C.S.M.:
 Lo primero, hay que poner un filtro a los medios de comunicación y buscar fuentes alternativas: por supuesto los que tienen posición política más clara, como M.O., o los medios más pequeños que no dependen de la publicidad de Iberdrola, del Banco de Santander, o de las grandes empresas. Quien sólo escuche y lea los grandes medios pensará que lo que hicimos con la deuda de Madrid es justo lo contrario de lo que en realidad hicimos. Lanzan una imagen falsa intencionadamente, como cuando nos sacaban como locos y desequilibrados al lado de Manuela Carmena. Formaba parte de la estrategia para decir que éramos un gobierno incapaz.

G.D.: Seis de los diez grandes think tank de este país son económicos. Cuando la información y los informes vienen de instituciones a las que se les atribuye credibilidad y respetabilidad como el Banco de España, FUNCAS y otras fundaciones de las entidades bancarias, ¿cómo debemos leerlo?
C.S.M.:
 Todas estas instituciones tienen sesgo, como lo tienen los medios de comunicación ligados a intereses económicos y políticos. El Banco de España no tiene una posición neutral, defiende el orden capitalista neoliberal y los intereses de quienes más tienen. Se intenta hacer ver que esas instituciones son neutrales; que los demás tenemos ideología mientras ellos se sitúan por encima del bien y del mal. Eso es radicalmente falso, pero opera a la hora de que la gente se forme su opinión. Soy profesor en la universidad y siempre digo que todos los que enseñamos tenemos ideología, y nuestra obligación es enseñar sin que esa ideología tape la parte de ciencia. Lo que pasa es que el profesor neoliberal de economía dice que él no tiene ideología, que el que la tiene soy yo. Yo digo que los dos, tanto él como yo, tenemos ideología.

“Poner la economía al servicio de la gente es algo que no nos van a dejar hacer por las buenas; vamos a tener que poner algo más que buena voluntad”

Intentan extender el pensamiento único de una forma sibilina. Y ese pensamiento único se extiende ahora a que sin la OTAN no podríamos vivir. Intentan hacer sentir incómoda a la gente que llevamos toda la vida defendiendo la paz. Da igual que haya experiencias históricas que demuestren que quienes no votaron los créditos de guerra en la I Guerra Mundial estaban en lo cierto. ¿Quién se acuerda de aquello?

G.D.: Las sanciones son un boomerang que se vuelve en contra de nosotros. ¿Para que están sirviendo las sanciones contra Rusia… o a quién están sirviendo?
C.S.M.:
 Las sanciones contra Rusia llevan imponiéndose desde 2014. Por ejemplo, si para combatir una enfermedad estás medicándote durante años, es porque no está funcionando. Si realmente se hubiera querido castigar el ansia imperialista de Putin, las sanciones tendrían que haber incluido el elemento fundamental que le ha hecho obtener divisas durante todo estos años, que es el gas natural. Pero claro, eso ya supone que tengamos que plantearnos otra forma de desarrollo en la Unión Europea. Y sobre eso tendría que haber reflexionado la Unión Europea y otras instituciones y países. Pero eso no se hace porque tocaría los intereses de las grandes compañías energéticas. Ya avisamos en el mes de febrero que por el tipo de país y por la limitación de las sanciones, no se iban a conseguir los objetivos que se pretendían; y que, por el contrario, se iba a deteriorar la economía del conjunto de la Unión Europea. Pero como en este pensamiento único del que hablábamos antes hay que ser simplemente seguidistas del «amigo americano» así nos va…

Sin embargo, a Estados Unidos le está viniendo fenomenal que haya una guerra limitada en Europa y que su industria armamentística esté creciendo a doble dígito todos los meses. Entre tanto, Europa hace de perrito faldero mientras ve deteriorarse su economía. En este tipo de situaciones puedes encontrarte con una guerra más generalizada y un verdadero drama a nivel planetario. Hay que ser muy insensatos para defender ese tipo de situaciones. La Unión Europea y todos los países deberíamos presentar un frente único en la lucha por las salidas negociadas y por acabar con el imperialismo, por supuesto el de Rusia pero también el de Estados Unidos; y, por si fuera poco, gente que tendría que estar planteando soluciones diplomáticas, como Josep Borrell, mantiene posiciones beligerantes.

Dentro de poco va a haber dirigentes mundiales planteando que la seguridad se consigue duplicando el gasto militar y yo creo que la mayor seguridad para la gente de este país y del conjunto del planeta es tener más escuelas, tener más hospitales y más atención a los mayores. Esa es la seguridad. Y de dónde crees que van a sacar el dinero para el gasto militar, evidentemente a costa de deteriorar las inversiones públicas.

G.D.: Como asesor en asuntos presupuestarios en el Ministerio de Igualdad, ¿cuáles son las prioridades en la partida presupuestaria del Ministerio?
C.S.M.:
 Las actuaciones en políticas de igualdad son el mecanismo de prevención de las violencias en general. La actuación preventiva es lo que puede aminorar esa violencia.

El Instituto Europeo de Igualdad, dependiente de la UE, muestra el coste brutal que supone no actuar contra las violencias machistas: 30.500 millones de euros en bajas médicas, atención psicológica, gastos en procesos judiciales… todo esto son costes económicos para la sociedad, por no hablar de los asesinatos.

También quiero decir que no han aumentado el número de mujeres asesinadas con respecto al año pasado, estamos ligeramente por debajo, lo que ocurre es que el interés de la ultraderecha, y no me refiero sólo a VOX, considero que Feijoo es un actor más de esa ofensiva, les interesa vender la inutilidad de las políticas públicas, cuando basta con preguntar a las personas afectadas, a sus hijas e hijos, si prefieren que las Administraciones Públicas se pongan de perfil o que actúen, y que actúen con recursos.

Según la Comisión Europea, cuesta 107 veces más la violencia machista que el presupuesto total del Ministerio de Igualdad. Así que habría que desarrollar muchas más políticas de igualdad y políticas transversales en todas las administraciones públicas para proteger a las mujeres de las violencias machistas, que tienen un amplio abanico de efectos, que van desde el asesinato a un crecimiento más sano y más justo e igualitario de la propia economía. Las mujeres tenéis dos horas al día menos de ocio que las que tenemos nosotros, y eso influye en las pautas de consumo y la creación de puestos de trabajo. El que haya una brecha de género en las pensiones que cobráis como resultado de que no tenéis la misma facilidad para trabajar en las mismas condiciones que nosotros, tiene un impacto en la economía. Las estrategias europeas dicen que hay que caminar en sentido contrario y que para eso hay que invertir recursos públicos y, por supuesto, cambiar muchas mentalidades, además de mantener alejada de las instituciones a esa ultraderecha ultramontana que aspira a gobernar.

G.D.: Hoy, en los institutos y colegios se enseña al alumnado cómo aprender a invertir en bolsa, pero no cómo funciona la economía que afecta a la factura de la luz, a nuestra compra, a nuestras vidas y a la de nuestras familias.
C.S.M.:
 Está claro que hay elementos que fallan en los currículos educativos porque lógicamente se siembra con una intención muy clara a la hora de modelar conciencias. Yo soy muy Sampredrista, de José Luis Sampedro, que decía que había dos tipos de economistas: los que intentaban hacer más ricos a los ricos y los que intentábamos que hubiéramos menos pobres. Un enorme avance en la educación pasaría porque esa ciencia tan extraordinaria y bonita no perdiera ese espíritu sampedrista de trabajar para conseguir vidas dignas y adecuadas al conjunto de la población; y ese es el objetivo, no hacer más millonarios a quienes ya están podridos de dinero, no contribuir a más acumulación de capital en menos manos sino a una distribución mejor del mismo.

Y, lógicamente, poner la economía al servicio de la gente es algo que no nos van a dejar hacer por las buenas; vamos a tener que poner algo más que buena voluntad. Por lo tanto, es una cuestión que hay que abordar desde las escuelas y los institutos, pero no puede quedar sólo en las academias y en las aulas, hay que intentar llevarlo a los medios de comunicación, a los centros donde socializamos, desde los bares a las peluquerías; y todo eso también forma parte de las obligaciones que tiene cualquier militante comunista que quiera cambiar la realidad.

Una de las frases que más suelo escuchar es «yo es que no entiendo de economía». Mira, a veces no se quiere que se entienda la economía, pero cualquier persona puede hacerlo independientemente de la formación previa que tenga; se trata de acercarlas de modo que todo el mundo no sólo opine sobre economía sino que participe en ella. Si dejamos la economía sólo en manos de quienes la hacen, y la mayoría de ellos son neoliberales capitalistas, pues vamos a tener lo que tenemos. Por lo tanto hay que democratizar la economía y la educación en economía. Y eso pasa por dar un paso adelante por parte de toda la gente.

Y si te aburre la economía que te cuenta un lacayo del capital, pues busca otras personas, que las hay, que son capaces de acercarnos la economía de José Luis Sampedro.


Publicado en el Nº 356 de la edición impresa de Mundo Obrero junio 2022
Fuente: Mundo Obrero

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