Redacción •  Actualidad •  30/11/2021

Una Extremadura digna responde al Sr Vara, presidente de la Junta

La producción de energía renovable les proporciona a estas multinacionales eléctricas unas ganancias superiores, dado que el precio final de mercado sigue el criterio de los valores marginales, sin tener en cuenta si el coste de la producción es mayor o menor.

Una Extremadura digna responde al Sr Vara, presidente de la Junta

EXTREMADURA DIGNA: respondiendo al Sr Vara.

En relación a las declaraciones realizadas por el máximo dirigente políticos extremeño, presidente de la Junta de Extremadura, que no se cansa de ensalzar a todo lo que supone la instalación de placas solares en la región por lo que supone para la creación de empleo por parte de las empresas, los ingresos que van a recibir los ayuntamientos y el papel tan importante de Extremadura por su contribución en todo el proceso de planificación energética nacional.

El fetichismo aparece en toda su magnitud. Como bien claro se pone de manifiesto en las afirmaciones de este alto dirigente que no renuncia a mostrarnos lo que aparece en la superficie de una realidad que se oculta e interpreta del modo que interesa al capital (a las grandes empresas eléctricas) con el objetivo de alienarnos y alejarnos de su verdadera sustantividad.

La “masiva” instalación de placas solares en los campos de Extremadura sólo beneficia a las grandes empresas eléctricas, a las que los poderes políticos regionales y estatales favorecen con sus normas, sus subvenciones y ayudas económicas.

Lo que se quiere encubrir es que estas empresas eléctricas se apropian de bienes comunales, de unos recursos naturales como el aire, el sol, el agua y la tierra para engordar sus cuentas de resultados; en muchos casos arrancando de la tierra plantaciones de olivos y viñas que proporcionan un empleo más estable que el de la instalación de placas solares.

La producción de energía eléctrica no tiene ningún beneficio especial para nuestra comunidad en cuanto a precios se refiere, ya que nos la venden a los mismos precios que al resto del país. En todo caso, la producción de energía renovable les proporciona a estas multinacionales eléctricas unas ganancias superiores, dado que el precio final de mercado sigue el criterio de los valores marginales, sin tener en cuenta si el coste de la producción es mayor o menor. Por tanto, a menor coste mayor beneficio; pues como hemos señalado el precio de mercado es el de la fuente que lo produce más cara.

Tampoco, se hace referencia en las elocuentes y solemnes declaraciones de los dirigentes políticos regionales a la explotación salarial que sufren los trabajadores y trabajadoras a sueldo de estas empresas que funcionan por subcontratas, en muchos casos múltiples, sin conocer el trabajador o la trabajadora quién es el verdadero patrón. No hay que profundizar mucho para apreciar que de este modo se abarata la fuerza de trabajo y los consiguientes costes salariales; los trabajos eventuales en la inmensa mayoría de los casos, son trabajos sin futuro, con cuasi permanente movilidad de un lado para otro, y con enormes dificultades para establecer un proyecto de futuro familiar. Tampoco podemos dejar de lado que en muchos de los casos los convenios colectivos son ignorados.

Consideramos que el territorio extremeño debiera ser objeto de una planificación por parte de las diferentes administraciones públicas para asegurar un futuro en el que los jóvenes y menos jóvenes tengan una estabilidad en el empleo y no tengan que marcharse de sus pueblos.

Necesitamos inversiones industriales de otras características, centradas en la atención y promoción de nuestros recursos naturales que tengan por objeto el aprovechamiento industrial de la agricultura y la ganadería.

Desde la PLATAFORMA POLÍTICA defendemos una REFORMA AGRARIA en el territorio extremeño como única forma de garantizar el futuro progreso de nuestras gentes, de jóvenes y mayores, el desarrollo de la agricultura y la ganadería, de las industrias relacionadas con nuestros recursos naturales, el control de las grandes multinacionales que suministran la semilla, las insecticidas y las maquinarias con las que extraen la riqueza de nuestros agricultores.


Una Extremadura digna /