Dr. Néstor García Iturbe •  Opinión •  04/11/2016

Uno de los pecados de Trump: no pagar impuestos

Hace pocas semanas, formando parte del barraje de insultos y acusaciones que mutuamente se han realizado los candidatos a la presidencia de Estados Unidos, Hillary Clinton y Donald Trump, la aspirante por el partido demócrata sacó a la luz pública los arreglos realizados por Donald Trump y sus abogados, para no pagar los impuestos que le correspondía.

 

Este problema del pago de los impuestos es de gran sensibilidad en Estados Unidos, sobre todo para el contribuyente individual, el ciudadano que tiene que ganarse el sustento mediante su actividad diaria, que siente la injusticia del sistema cuando de su salario tiene que aportar una cantidad para subvencionar al gobierno y sus gastos, sobre todo porque conoce que el sistema impositivo no es parejo para todos y que los que más dinero ganan, proporcionalmente pagan menos que él.

 

En el caso de Donald Trump, la acusación que realizó Hillary se fundamentaba en que no había pagado impuestos acorde a las ganancias que había obtenido, quizás la mejor respuesta de Trump a esa acusación, hubiera sido “El que se encuentre libre de pecados, que tire la primera piedra-“, incluyendo en esto a la propia familia Clinton.

 

Este señalamiento de Hillary provocó que destinara algún tiempo a la investigación relacionada con el pago de impuestos por parte de las grandes corporaciones estadounidenses, entre otras, aquellas que le han entregado a ella grandes sumas de dinero para la campaña electoral o que han formado los famosos Comités de Acción Política (PAC) para hacer propaganda a su favor-

El resultado obtenido es el siguiente:

 

1.- Exxon Mobil alcanzó 19 000 millones de dólares en ganancias en el 2009 y no pagó ninguno de los impuestos federales sobre estos ingresos.

 

2.- El Bank of América, recibió del Servicio de Rentas Internas (IRS) un reintegro de impuestos ascendentes a 1 900 millones de dólares en 2009. Dicho banco alcanzó ganancias por 4 400 millones de dólares debido a que recibió una exención de la Reserva Federal y de la Secretaría de Hacienda por casi 1 000 millones de dólares.

 

3.- De 2007 al 2011 la General Electric Company alcanzó 26 000 millones de dólares de ganancias en sus operaciones en los Estados Unidos y por las mismas no pagó impuestos.

 

4.- Chevron recibió un reembolso de 19 millones de dólares del Servicio de Rentas Internas (IRS), después de haber alcanzado en 2009 utilidades por un monto de 10 000 millones de dólares.

 

5.- Boeing, que recibió un contrato del Pentágono por 30 000 millones de dólares para construir 179 buques cisternas, obtuvo en 2010 un reembolso de $124 millones del Servicio de Rentas Internas (IRS).

 

6.- Valero Energy, la número 25 entre las compañías más grandes de Estados Unidos, vendió en 2010, 68 000 millones de dólares, recibió un cheque de reintegro por 157 millones de dólares del IRS y de 2009 a 2011 recibió una reducción de impuestos de 134 millones de dólares.

 

7.- GolmanSachs en 2008 sólo pagó impuestos sobre el 1,1 por ciento de sus ingresos, aunque obtuvo una ganancia de 2 300 millones de dólares.

 

8.- Citigroup en 2010 obtuvo más de 4 000 millones de dólares en ganancias, pero no pagó ni un centavo en impuestos federales.

 

9.- Conoco Phillips, la quinta compañía más grande de petróleo en los Estados Unidos, de 2007 al 2009 obtuvo 16 000 millones de dólares de ganancias y obtuvo una exención de impuestos que le permitió librarse de estos.

 

10.- De 2007 a 2011, las líneas de Carnival Cruise hicieron más de 11 000 millones de dólares en ganancias, pero su tasa para el impuesto federal durante esos años fue del 1,1 por ciento.

 

Como puede deducirse de los resultados de la investigación, Donald Trump no es precisamente el que tiene al borde de la crisis la economía estadounidense, ni el único culpable del déficit presupuestario con que opera la nación que provoca la deuda de trillones de dólares, la cual cada cierto tiempo el Congreso autoriza aumente para que el país pueda continuar operando.

 

Esta situación es la que conoce el ciudadano estadounidense de bajos ingresos y lucha porque algún político de vergüenza arregle algún día.

 

Conoce además, que ese político no está entre los dos que se disputan la presidencia en el 2016, por lo tanto, tiene que seguir sufriendo, la deuda aumentando y él, más su familia, tratando de sobrevivir.

 

1 de noviembre del 2016.

 

 
http://www.alainet.org/es/articulo/181370

 


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