El Captor •  Opinión •  05/07/2019

“La tarea de los periodistas es garantizar que los dominados acepten su dominio” y 9 reflexiones más de Diego Fusaro, el intelectual de moda en Europa

La reciente entrevista realizada en El Confidencial a Diego Fusaro ha hecho que este filósofo y pensador del sur de Europa nacido en Italia haya pasado de ser un perfecto desconocido en la izquierda a ser un perfecto sospechoso para la izquierda. ¿Las razones? Algunos de sus detractores le tildan de fascista y/o simpatizante de ideologías conservadoras. Sin embargo, las razones para la existencia de esta repentina controversia apenas se sustentan. El discurso de Fusaro sobrepasa -de largo- las aspiraciones de intelectualidad que la gran mayoría de los supuestos puristas de izquierdas englobados en el punto 6 de este extracto podrían llegar a albergar jamás desde sus privilegiadas -pero lisiadas- tribunas mediáticas. Para dejar constancia, aquí van diez de los extractos clave de lo que podríamos denominar: la entrevista de… ¿la envidia?

1- Trato de poner de manifiesto cuáles son las contradicciones de este presente en el que todo el mundo calcula y nadie piensa. En el que la razón económica y técnica, técnico-científica, se ha impuesto como la única razón válida, y pretende reemplazar a todas las demás.

2- Al fin y al cabo, el globalismo no es más que el nacionalismo estadounidense que se ha hecho mundo y, por lo tanto, es una forma de nacionalismo llevado a su máximo desarrollo. 

3- Hoy el Estado puede representar el único vector de una revolución opositora contra el capital mundialista, tal y como demuestran perfectamente los acontecimientos de los países bolivarianos, como Bolivia, Venezuela o Ecuador que, a pesar de sus límites estructurales, están creando formas de populismo soberanista, socialista, patriótico, anti-globalista e identitario.

4- Hoy quien reafirma la necesidad de controlar políticamente la economía y, por lo tanto, reintroducir la soberanía contra la apertura cosmopolita, es vilipendiado y tachado inmediatamente de ‘fascista’, ‘rojipardo’ y ‘estalinista.

5- El verdadero rostro del fascismo actual es el de la sociedad de mercado: el totalitarismo de los mercados y de las bolsas de valores especulativas.

6- La tarea de la clase intelectual, académica y periodística es garantizar que los dominados acepten el dominio de la clase dominante en lugar de rebelarse.

7- Estamos asistiendo a un proceso mediante el cual el capital nos quita los derechos sociales, que son derechos vinculados al trabajo, a la vida comunitaria en la polis; anula estos derechos y, en cambio, aumenta los derechos del consumidor -véanse los vientres de alquiler-, siempre vinculados a un consumo que se lleva a cabo de manera individual, sin cuestionar nunca el orden de la producción y que, de hecho, terminan fortaleciendo el sistema capitalista en lugar de debilitarlo.

8- El capital deja que las personas salgan a la calle por el orgullo gay, por los animales y por todo, pero ¡qué no se atrevan a echarse a las calles para luchar contra la esclavitud de los salarios, contra la precariedad o contra la economía capitalista! De ser así, ahí está la represión, como sucedió en Francia con los chalecos amarillos.

9- El capitalismo actual quiere ver en todas partes al individuo sin identidad y sin vínculos, al consumidor que entabla relaciones desechables basadas en el consumo para reducir a la sociedad a un único mercado global.

10- La reivindicación de la lengua nacional es una batalla cultural de resistencia a la globalización, de resistencia a ese ‘genocidio cultural’, como lo llamaba Pasolini, que la globalización está llevando a cabo destruyendo las culturas en nombre del único modelo permitido: el consumidor de mercancías, apátrida, posidentitario, que habla el inglés anónimo de los mercados financieros apátridas.

Fuente: http://www.elcaptor.com/economia/tarea-periodistas-reflexiones-diego-fusaro


Opinión /