Redacción •  Memoria Histórica •  20/10/2021

CEAQUA considera que el procesamiento de Martín Villa es un paso más contra el fin de la impunidad del franquismo

CGT, integrante de la Querella Argentina, reprocha al Estado español que sea la Justicia argentina la que investigue crímenes cometidos por quienes, amparándose en una “democracia” que no quisieron, eluden sus responsabilidades.

CEAQUA considera que el procesamiento de Martín Villa es un paso más contra el fin de la impunidad del franquismo

La Coordinadora Estatal de Apoyo a la Querella Argentina contra los crímenes del franquismo (CEAQUA) ha valorado positivamente la noticia del auto de procesamiento de Rodolfo Martín Villa por crímenes contra la humanidad y que hace poco más de 48 horas dictaba la jueza María Servini en el proceso penal abierto en Argentina que investiga los crímenes cometidos en el Estado español durante el franquismo y la transición hacia la democracia.

CEAQUA ha manifestado su satisfacción tras largos años de lucha intentando conseguir justicia para miles de personas víctimas de un régimen que lejos de desaparecer con la muerte de Franco en 1975 continuó ejerciendo su poder sobre la ciudadanía disidente que pugnaba contra los poderes franquistas por instaurar un régimen democrático tras 40 años de dictadura. Cabe recordar que la Querella Argentina ha cumplido 10 años de vida desde que comenzara a buscar justicia en el Estado español. A lo largo de todos estos años se han ido incorporando muchas más personas, víctimas y/o familiares, logrando recopilar numerosas pruebas e interponiendo más de 80 querellas en los juzgados de todo el Estado. En este sentido, desde CEAQUA también manifestaban que a pesar del trabajo que han realizado no ha sido precisamente en España donde la Justicia ha querido escuchar a las víctimas y repararles el daño de tantos años de sufrimiento. Los querellantes tuvieron que acudir hasta Argentina para ser escuchados y para que, por fin, una jueza empezara a trabajar en la causa.

Desde CEAQUA consideran que este es el camino que hay que continuar haciendo en relación a la batalla contra la impunidad del franquismo y a pesar de tener en contra a la judicatura española, que amparándose en la una Ley de Amnistía injusta mantiene protegidos a los responsables de miles de crímenes de lesa humanidad.

En la rueda de prensa, las personas integrantes de CEAQUA no han querido olvidar a quienes por desgracia no han podido conocer esta última noticia, como Carlos Slepoy y Chato Galante, y que sin duda dieron un importante impulso a la querella.

Por su parte, la CGT ha vuelto a incidir en la vergonzosa actitud de los Gobiernos “democráticos” del Estado español durante décadas, más preocupados en proteger a los verdugos que de reparar el daño y el dolor de las víctimas. CGT también ha exigido que se cumplan las resoluciones emitidas por la ONU respecto a las víctimas del franquismo y la derogación de la Ley de Amnistía. No obstante, la organización anarcosindicalista destaca como un paso adelante el procesamiento del exministro.

CEAQUA: Valoración del procesamiento de Martín Villa

Desde Ceaqua queremos compartir con todas vosotras nuestra gran alegría. Creemos que este auto significa un paso adelante importante en nuestra lucha por el derecho a la verdad, la justicia y la reparación de las personas que sufrimos graves violaciones de derechos humanos durante la dictadura franquista.  

Acudimos hace algo más de 10 años a la Justicia Argentina, en busca de esos derechos que el estado español nos negaba y que parecían más que inalcanzables según la sentencia del tribunal Supremo de 2012. Acudimos convencidas de que nos amparaba la Justicia Universal, sabiendo que estábamos denunciando crímenes de lesa humanidad, como han calificado distintas instancias internacionales de derechos humanos.

Durante los años transcurridos se han incorporado a la Causa Argentina decenas de querellas y de denuncias de víctimas de los crímenes franquistas de todas las categorías: desparecidos, personas torturadas, victimas del trabajo esclavo, expropiados, bebes robados, mujeres víctimas de violencia específica, y de todo el franquismo, desde el golpe de estado con el que llegaron al poder, hasta la transición en la que buena parte del aparato del estado de la dictadura se mantuvo.

Queremos recordar que, en 2014, como consecuencia de esas querellas, la jueza Maria Servini imputó a 20 responsables de distintos crímenes, entre ellos figuraba Martín Villa, junto a otros exministros y altos cargos, expolicías, jueces y un médico ginecólogo acusado del robo de bebes.

Entre 2014 y 2018 el Consejo de Ministros rechazó la solicitud de extradición de los acusados, la Audiencia Nacional, distintos juzgados y la Fiscalía General pusieron todas las trabas posibles a la investigación abierta en la Querella Argentina.

Por nuestra parte, no cejamos, pese a las negativas reiteradas de la justicia y las autoridades españolas a colaborar con la causa argentina, hemos continuado, presentado más querellas, acumulando pruebas en el caso contra Martin Villa. También hemos acudido a los tribunales españoles en busca de justicia. Son más de 80 las querellas presentadas, individuales, colectivas y algunas refrendadas por distintas instituciones. La respuesta sistemática ha sido la destimación. Se nos está negando sistemáticamente el derecho a la tutela judicial. Se está negado sistemáticamente que los crímenes de lesa humanidad ni prescriben ni pueden amnistiarse.

En el auto dictado por la Jueza Servini, queda meridianamente claro que a la luz de la Justicia Universal se pueden juzgar los crímenes franquistas como CRÍMENES CONTRA LA HUMANIDAD, esto nos reafirma en el camino que iniciamos junto a algunas personas que hoy también compartirían nuestra alegría como Carlos Slepoy y Chato Galante.

Seguiremos trabajando para que se juzguen los crímenes del franquismo, para quebrar el actual modelo de impunidad que protege en nuestro país a los perpetradores, un modelo inadmisible en un Estado de Derecho, que socava e infringe los derechos más elementales que asisten a quienes sufrieron crímenes franquistas.


Martín Villa /