‘La bestia interior’, 54ª edición del Festival de cine de Sitges
La bestia interior es el leitmotiv de la 54ª edición del Festival Internacional de Cine Fantástico de Catalunya, el Festival de Sitges, que dio comienzo el pasado 7 de Octubre. En base a ello el certamen ha presentado una espectacular imagen alrededor de la idea del hombre lobo en su cartel principal, en el que han optado por no incluir la iglesia de San Bartolomé y Santa Tecla para disgusto de los nostálgicos. Cualquier tiempo pasado fue mejor.
El jurado de la sección oficial de este año está compuesto por el realizador iraní Ali Abbasi, creador de la inolvidable “Border”(2018), el escritor Antonio Trashorras , la actriz y directora María Lidón aka Luna, Alaska y Joaquín Reyes.
Las cerca de 200.000 personas que se dan cita cada año en el certamen podrán disfrutar de 169 películas repartidas en las diversas secciones en las que se divide el festival, y presentadas en 7 espacios de proyección. La capacidad de las salas se reduce al 70% debido a las restricciones COVID todavía presentes. Es curioso que se pueda bailar en las discotecas sin distancia de seguridad, mientras que la cultura todavía debe someterse a restricciones de aforo. Fuera de las salas todo parece volver poco a poco a la antigua normalidad. El Mercat Vell reanuda su actividad, se vuelve a celebrar la famosa Zombie Walk y se despliegan las zonas de restauración con Food Trucks, una mala elección teniendo en cuenta la amplia oferta de hostelería que hay en Sitges.
La presente edición dio comienzo con “Mona Lisa and The Blood Moon” de la estadounidense Ana Lily Amirpour que vino a presentar la película acompañada de su perro Benny. Belén Rueda recibió el Gran Premio Honorífico de la mano de J.A. Bayona, que la catapultó en su día a la cima del fantástico español con la celebrada “El orfanato” (2007). Las dos fueron las encargadas de dar el pistoletazo de salida a la 54ª edición del mejor festival de cine fantástico del mundo.
RUSIA Y CHINA DESEMBARCAN EN SITGES
La primera película que se ve en el festival de Sitges debe ser en el Auditori. Regla no escrita. Cortinilla de entrada y ovación cerrada del respetable mientras aparece King Kong derribando aviones en la costa de Sitges.
El año pasado pudimos comprobar el pulso del cine ruso en torno al género fantástico con la irregular “Sputnik” (Egor Abramenko). Desde allí nos llega en esta edición, “The Execution”, la ópera prima del realizador Lado Kvataniya, experto en publicidad que da el salto a la gran pantalla con este thriller. La película narra la persecución durante 10 años del asesino en serie más famoso de la historia de Rusia, basada en la historia real de “el Carnicero de Rostov”. El film bebe directamente de thrillers similares como “Zodiac” (2007) y de la serie “Mindhunter” (2017), está claro que el director ruso ha estudiado a David Fincher en profundidad, la referencia es inmediata. Atmósfera oscura y absorbente, saltos en el tiempo, y un ritmo un tanto pesado que hace que la película resulte tediosa por momentos. Puede parecer fácil lo que hace Fincher en sus películas, pero es un maestro del ritmo y eso no se puede emular.
29 películas en su haber, realizador de la ceremonia de apertura de los juegos olímpicos de Pekín de 2008, premiado en Cannes y Venecia… Poca presentación necesita el director chino Zhang Yimou que presentó “Cliff Walkers” en el festival. El creador de “La casa de las dagas voladoras” (2004) nos ofrece una película de espionaje que se desarrolla en la china de los años 30, donde cuatro agentes del partido comunista chino que han sido entrenados por los soviéticos deben llevar a cabo una misión de rescate y extracción. Zhang Yimou nos demuestra su absoluto dominio de las coreografías, el suspense y el desarrollo de las escenas de acción. Sin embargo, el film es una sucesión de gags de película de espías sin un nexo de unión claro. Una delicia visual que carece de un guión sólido que soporte el alarde estético.
Para finalizar el día acudimos a la proyección de “Cryptozoo”, producción de animación estadounidense dirigida por Dash Show. Fábula de animación, alegato en defensa de los derechos de los animales. La prosa animada lisérgica y alucinada de “Planeta Salvaje” está muy presente en Cryptozoo, así como al cine de Ralph Banskhi. Algo parecido a un tour de force a lo Jurassic Park pero repleto de ácido, música y estética setenteras con colaboración especial del rey del nuevo underground del cómic, Benjamin Marra, que nació de las idas de olla de Nazario y Spain Rodríguez.
Unas propuestas un tanto atípicas para el cartel habitual, que nos hacen irnos a dormir sedientos de sangre. Mañana más extremo y mejor.
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