Podemos solicita la paralización cautelar de las obras del proyecto gasístico de Gas Natural en Doñana

Ante el inicio de las obras del proyecto de almacén y extracción de gas en el entorno del Parque Nacional de Doñana, Podemos solicita al Gobierno central y a la Junta de Andalucía la paralización cautelar de las obras del proyecto Marismas Occidental hasta que no se evalúen los impactos ambientales acumulativos del proyecto Marismas en su conjunto.

Petroleum Oil & Gas, con la connivencia del Gobierno Central, en funciones, troceó el proyecto en cuatro subproyectos para obtener las Declaraciones de Impacto Ambiental positivas; Saladillo y Marismas Oriental, dentro del espacio natural de Doñana, Marismas Occidental a pocos metros del espacio protegido.

El troceado del proyecto, artimaña administrativa de la empresa y permitido por las administraciones, permitió un resultado positivo de las Declaraciones de Impacto Ambiental concedido por la Junta de Andalucía. Sin embargo, ha impedido la evaluación ambiental del conjunto del proyecto y de las sinergias acumulativas del mismo. Por lo tanto, solicitamos la evaluación de impacto ambiental en conjunto de los cuatro subproyectos (Marismas Orienta, Marismas Occidental, Aznalcázar y Saladillo) como marca la Directiva Europea de evaluación de las repercusiones de proyectos sobre el medioambiente.

«Solicitamos su paralización cautelar hasta que la Comisión Europea resuelva el expediente o proyecto piloto abierto a España por el proyecto de Gas Natural en Doñana. Hemos conocido que durante el mes de junio la comisión Europea ha solicitado información adicional; solicitado saber si se han realizado los estudios geológicos adicionales que la Declaración de Impacto Ambiental exigía o si han sido evaluados los efectos acumulativos del proyecto sobre la RED 2000», explicó la diputada andaluza de Podemos, Mercedes Barranco.

Barranco también explicó que Podemos considera que «el proyecto de extracción y almacenamiento de gas en el entorno de Doñana es incompatible con la máxima conservación y protección del espacio natural y su entorno, favorece el cambio climático y contraviene la política de fomento de las energías renovables y el cambio de modelo energético que este planeta necesita».

El proyecto cuenta con la clara oposición de organismos como la Unesco, la UICN o la Convención de Ramsar, además de numerosas organizaciones conservacionistas y personas con conciencia ambiental, social o política.

Por otra parte, el proyecto no ofrece todas las garantías para la seguridad de las personas, ni del medioambiente. Las razones para paralizar el proyecto inmediatamente siguiendo el principio de prevención que la legislación ambiental establece son numerosas y de peso.

Por todo ello, Podemos solicita la paralización cautelar del inicio de las obras y así se hará saber en el pleno del Parlamento Andaluz, que se celebrara el próximo 7 de septiembre.