Fernando Dorado •  Opinión •  16/03/2021

Sobre la necesidad de repensar los Sujetos Sociales (para el cambio y/o revolucionarios)

Los Sujetos sociales son clases sociales o sectores de clase que adquieren consciencia colectiva de su existencia con base en la identificación de sus intereses. Ellos mismos se auto-construyen en medio de las luchas sociales y políticas.
Algunos amigos todavía identifican a la clase obrera como el «sujeto social del cambio revolucionario y anti-capitalista».
¿Clase obrera? Creo que hay que cambiar de término. La «clase obrera» se asimila a la clase de los trabajadores que vendían su «mano de obra» a los capitalistas. Hoy vendemos más el «cerebro» que las «manos».
Creo que es mejor el término «clase trabajadora» o «proletariado» (aunque este último término se asimila mucho a los los trabajadores industriales), y por ello, muchos utilizamos el término «precariado».
Y dentro de los trabajadores hay que identificar, aquellos que por sus actuales circunstancias pueden jugar un papel de «sujetos sociales revolucionarios», no tanto «históricos» sino de una etapa histórica.
Ejemplo, el proletariado industrial de hoy, es un sector de la clase trabajadora que por su lugar en la producción, su grado de especialización y los ingresos que hoy obtiene, ya no es revolucionario, no desea ningún cambio, incluso es conservador.
Y es pertinente analizar otro aspecto que ahora ha aparecido: el desarrollo de las fuerzas productivas y los cambios en la sociedad actual (sociales, culturales, tecnológicos, etc.) ha hecho que aparezcan nuevos sectores sociales, diferentes a la época del capitalismo clásico, que pueden convertirse, según mi punto de vista, en otro tipo de sujetos sociales revolucionarios.
Para mí, unos de esos nuevos sectores sociales son los «prosumidores colaborativos».
Los PROSUMIDORES COLABORATIVOS son aquellos pequeños y medianos productores (y, a la vez, trabajadores) que producen diversas clases de bienes, consumen una parte de ellos y el resto lo venden al mercado. Pero para hacerlo y por necesidad, construyen redes de colaboración con otros prosumidores para poder enfrentar a los grandes monopolios.
Ya hay prosumidores en el campo de la producción de música, periodismo, software, energía eléctrica, y poco a poco van expandiendo su área de trabajo.
Además, en muchas otras áreas de la vida están apareciendo verdaderas redes de cooperación y colaboración como son las redes de turismo compartido o colaborativo y otras formas de intercambio equivalente.
Muchos de sus productos son colocados en forma gratuita en las redes sociales usando diversas licencias de «Creative Commons» (Creación en Comunidad).
Una de sus principales «medios de producción» es la Red Web o Internet y su acción -si es realmente colaborativa- va socavando las bases del capitalismo aunque se alimenta y progresa dentro de ese modo de producción.
Por ahora los «prosumidores» no son totalmente conscientes de su acción revolucionaria. Pero ya hay avances en ese sentido.
Continuará…

Opinión /