Nora García •  Opinión •  03/03/2018

Cinco miradas para una lucha

Cinco miradas para una lucha

Ayer, en el Centro de Abogados de Atocha, tuvo lugar el primer seminario de Izquierda Unida “Feminismo para un nuevo país” que se enmarca en una serie de debates dentro de su campaña “Paremos a la derecha”.

Con estos actos IU quiere actualizar sus diagnósticos, recoger propuestas para la creación de Nuevo País que luche contra la precariedad y la deriva social a la que nos vemos abocados desde la crisis. Estos debates son necesarios parar para reflexionar sobre las luchas y el contrapoder que se ha ido forjando en este tiempo y ver de qué maneras podemos incidir en las grietas de un sistema que nos oprime.

El acto se divide en dos partes. Una de diagnóstico y otra propositiva. Su objetivo es dar voz a diferentes perfiles que desde el feminismo lucha y encuentra preguntas y respuestas para mejorar la vida de todas y todos.

La primera intervención, a cargo de Sol Sánchez, coportavoz de IU Madrid, incide en la necesidad de cambiar el foco de nuestra economía, pasando de contabilizar sólo lo que se ha denominado ámbito productivo y pasar a poner la vida, el ámbito reproductivo, en el centro, para dar respuesta a un sistema genocida y biocida. Apunta a la necesidad de dinamitar las bases de esta sociedad para poder transformarlo todo, y en esa base está el binomio capitalismo y patriarcado.

Clara Alonso, responsable de Comunicación de IU nos explica que el feminismo nos enseña a tener una mirada multidimensional. Que por lo tanto, es fundamental estudiarlo e incorporarlo en la lucha política con esta perspectiva que es transversal a todos los aspectos de la sociedad.

Laura Casielles, poeta, nos habla de la lucha cultural. De que este sistema “no permite un afuera, lo abarca todo, y que tiene que hacer algo con las otras voces que quieren otra realidad”. Dice que el movimiento feminista ya no puede ser acallado, que todas esas voces ya no sirven para justificar que “la excepción confirma la regla”, porque precisamente “la excepción desmiente la regla, y ya no somos una excepción”. Que tengamos cuidado porque la estrategia del sistema es apropiarse del feminismo para neutralizarlo. “Si todo es feminismo, nada es feminismo”. Y ahora mismo hemos conseguido una quiebra entre lo privado y lo público, llevando el ámbito de la vida a la política.

Además, aporta una reflexión de futuro: Ante esta situación de desborde del feminismo, nuestra estrategia no puede ser marcar nuevos límites y exclusiones, sino un camino de apertura y de mantenernos en la pregunta. Esta etapa no es una de certezas, sino de entender que no es una lucha parcial y que hay que continuar sumando fuerzas en un espacio donde estemos todas.

María Estebaranz, representante de CCOO, pone el acento en la desigualdad laboral. Destacó que no nos han precarizado igual a hombres que a mujeres, y que “la brecha de hoy es la brecha del futuro” La vulneración hacia el futuro de nuestra sociedad, los servicios sociales, están extremadamente feminizados, y el desmantelamiento de lo público, vendiéndolo a manos privadas, precariza a las mujeres, que son quienes nos cuidan (también en forma de empleo remunerado) en las guarderías, colegios, dependencia, escuelas y hospitales. Terminó remarcando que “La devaluación de las condiciones de trabajo ha instalado en nuestras mentes que la precariedad es una realidad inevitable, pero no es así, no hay que normalizarla sino luchar contra ella.”

Carlota Álvarez, de la Comisión 8M de Madrid, comienza diciendo que todo este trabajo hacia la huelga feminista reclama en resumen una vida digna de ser vivida para todas las mujeres. No es un proyecto que viene de la nada, sino que las mujeres a lo largo de la historia nos hemos enseñado las unas a las otras que “si queremos sobrevivir hay que luchar”. Tenemos un hilo conductor de nuestra historia, como las revueltas de las mujeres catalanas de 1898 o la huelga de consumo de 1975 del Movimiento Democrático de Mujeres. “Y ahora hemos decidido ser nosotras las que creamos nuestro propio relato para explicar qué nos pasa” Por lo que a esa pregunta que les hacen al movimiento feminista de ¿Ahora es el momento de hacer una huelga? Ella contesta “Ahora es siempre” Es la lucha de las mujeres.

En este debate tan interesante, se reflexiona precisamente sobre eso que los medios llaman “fenómeno” o “moda” del feminismo, diciendo Laura que el feminismo no es una moda, porque las modas pasan, es un poso. Y Carlota conecta con la reflexión de Laura sobre el sistema, diciendo, que “al igual que no existe un afuera del capitalismo, el feminismo también tiene una vocación de totalidad”.

A la huelga, compañeras.

Nora García Nieves es coordinadora del Área de la Mujer en IU Madrid.


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