Irak renunciará a armas de EEUU y buscará aliados en Rusia y China

El presidente de la Comisión de Defensa y Seguridad del Parlamento de Irak, Muhamad Reza, declaró al rotativo estatal Al-Sabah que existe una tendencia a diversificar las fuentes de equipos militares y armar al Ejército con armas rusas, chinas, japonesas y surcoreanas.

El objetivo es que “el armamento no proceda de un particular Estado” y que se reduzca la dependencia de las armas estadounidenses, agregó el parlamentario iraquí, citado el jueves por el portal de noticias Middle East Monitor.

“En la actualidad, armar al Ejército iraquí tiende a depender del lado estadounidenses en lugar de Rusia, a pesar de que las armas de esta última son más adecuadas para el soldado iraquí, además de haber la posibilidad de un pago más conveniente”, acentuó Muhamad Reza.

En los últimos años, las autoridades iraquíes han reprobado una y otra vez la demora de Washington en enviar armas y equipos a las tropas iraquíes, sobre todo durante la guerra contra el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) entre 2014 y 2017.

Ayer jueves, una fuente gubernamental iraquí reconoció que la actual Administración estadounidense, presidida por Donald Trump, está empujando a Bagdad hacia Moscú con sus polémicas políticas.

El funcionario, que hablaba bajo condición de anonimato, adelantó el plan del premier iraquí, Adel Abdul-Mahdi, de viajar en breve a Rusia, un “fuerte” aliado internacional del país árabe, de donde Irak puede “beneficiarse mucho más de lo que podría beneficiarse de EE.UU. con respecto a la seguridad, los armamentos y la economía”.

Bagdad y Moscú han suscrito varios contratos armamentísticos pese a las presiones de EE.UU. En abril, el comandante de la 9.ª División Acorazada del Ejército iraquí, el general de brigada Walid Jalifa, informó de la llegada al país y recepción por el Ministerio de Defensa del cuarto lote de tanques de batalla rusos T-90S.

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