Equo Madrid denuncia el funcionamiento ilegal del vertedero de Colmenar Viejo y reclama una investigación

Equo Madrid ha denunciado el funcionamiento ilegal del vertedero de Colmenar Viejo, que incumple el obligado tratamiento previo de los residuos para reducir su cantidad y los posibles peligros para la salud derivados de su depósito.

La omisión de este requisito aumenta la contaminación por gas metano, uno de los mayores causantes del efecto invernadero, y reduce la vida útil del complejo, por lo que el partido verde ha solicitado a la Consejería de Medio Ambiente que realice una investigación.

La formación ecologista ha denunciado estas irregularidades en las alegaciones presentadas al proyecto de nuevo vaso que se pretende habilitar en el recinto, cuyo estudio de impacto ambiental señala que ”A partir de la entrada en funcionamiento de las instalaciones de tratamiento del nuevo Complejo Medioambiental del vertedero, previsto para 2023, todos los residuos entrantes recibirán un tratamiento y la fase V funcionará como un depósito para los rechazos que resulten del mismo”.

Según Equo Madrid, “es inaceptable que el actual vertido irregular de la fracción resto de la  basura, sin ningún tipo de tratamiento previo, se pretenda prolongar al menos hasta 2023 o más allá, en el caso de que se retrase la construcción de las infraestructuras para el tratamiento de los residuos municipales”.

En su opinión, esta política continuista y obsoleta, que perpetúa la ineficiente gestión de los residuos municipales, no solo en la Mancomunidad Noroeste, sino en toda la Comunidad de Madrid, «es un lastre para la consecución de los objetivos de reciclaje a los que España está obligada, como miembro de la Unión Europea”.

Además, Equo Madrid subraya las graves consecuencias en la lucha contra el cambio climático de la falta de tratamiento de los residuos, tanto por las emisiones de metano asociadas a este modelo de vertedero, como por las derivadas del transporte por carretera de las basuras de los 76 Ayuntamientos a los que da servicio este complejo, que genera una elevada huella de carbono.

“La alternativa que planteamos es un sistema de gestión de los residuos más descentralizado, con más plantas de tratamiento de tamaño medio y equilibradamente repartidas por el territorio”, explica el partido ecologista. Se da la paradoja de que en este Estudio de Evaluación Ambiental se obvia la obligación recogida en el Estrategia de Residuos de la Comunidad de Madrid 2017-2024,  de que todos los Ayuntamientos deberán tener plenamente implantada la recogida selectiva de la fracción orgánica domiciliaria (el contendor marrón), antes de 31 de diciembre de 2022.

Para ello es imprescindible disponer de las infraestructuras adecuadas para garantizar el tratamiento de los biorresiduos, que en ningún caso pasa por la construcción de macro plantas de tratamiento mecánico biológico, más conocidas como TMB, de elevado coste y muy bajo rendimiento en lo que al reciclaje se refiere.

Por todo ello, Equo presentará mociones en los ayuntamientos en los que gobierna, para que insten a la Comunidad de Madrid a poner en marcha una estrategia de residuos que cambie el ineficaz modelo actual (por ejemplo a través de una Agencia de residuos) e incluya un plan realista de medidas para aumentar los porcentajes actuales de reutilización y reciclaje.