Garzón muestra su absoluto rechazo al techo del gasto pactado por el Gobierno y C`s, y lo tacha de “negativo, muy injusto y muy incoherente”

El coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ha ratificado hoy su absoluto rechazo al límite de gasto no financiero -más conocido popularmente como ‘techo del gasto’- aprobado por el Gobierno del PP y que “como primera piedra para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado de 2018” se debatirá y votará mañana en el Congreso. Garzón destacó que “tras el acuerdo al que el Gobierno llegó con Ciudadanos el resultado es negativo, muy injusto y muy incoherente”.

Garzón recordó en la rueda de prensa ofrecida en la sede federal de IU en Madrid que el techo que la derecha plantea para las cuentas públicas “está aún 60.000 millones de euros por debajo de las cifras que había en 2010”. Tradujo esta situación y señaló que “estamos hablando de recortes. En modo alguno se recupera lo recortado desde 2010 y es así porque ni el PP ni Ciudadanos tienen el menor interés por recuperarlo”.

A juicio del máximo responsable de IU, que también es portavoz de Hacienda del Grupo Confederal de Unidos Podemos, “queda aún un largo camino por recorrer para solucionar los perjuicios brutales que se soportan desde el estallido de la crisis”.

Al tiempo, Alberto Garzón lanzó una clara denuncia apoyada en cifras sobre la hipocresía política del Gobierno de Mariano Rajoy entre la realidad de su oferta económica y los datos reales. “Esta corta subida del 1,3% del techo del gasto -indicó- es muy inferior al crecimiento de la economía” del que presume el PP. Por tanto, “si es cierto el crecimiento del PIB que cuenta el Gobierno, comparado con el techo del gasto, lo que estamos es ante el mantenimiento de las políticas de recortes y de austeridad” que tanto daño han hecho en la última década a las clases más desfavorecidas de nuestro país.

El coordinador federal de IU tachó también de “mala noticia” la “tramposa reforma fiscal pactada por PP y Ciudadanos que rebaja en cerca de 2.000 millones de euros la recaudación del IRPF”.

Utilizó el mismo lenguaje empleado por estos partidos de la derecha al explicar que “si bien es cierto que una minoría de contribuyentes tendrán ‘más dinero en sus bolsillos’, lo que pasa en realidad es que habrá menos dinero para financiar la educación pública, la sanidad pública o la dependencia de la que se benefician precisamente los más desfavorecidos. Lo pasa es que el dinero que a algunos les meten en el bolsillo derecho se lo quitan del izquierdo”.

Alberto Garzón denunció con vehemencia que “esta bajada de un impuesto directo mientras se mantienen los indirectos, como el IVA, convierte aún en más regresivo y más injusto el sistema fiscal de nuestro país”. Por ello, anunció que “mañana defenderemos en el Congreso una reforma fiscal más justa”. Esto incluye subir el IRPF a las clases que más ganan, así como modificar el reparto que hay entre impuestos directos e indirectos”.

Concluyó sus explicaciones ratificando el “voto en contra mañana en el debate en el Pleno del Congreso” del Grupo Parlamentario Confederal de Unidos Podemos-En Comú Podem-En Marea.