El tercer «viernes negro de TVE» en palabras de Rosa María Calaf: «nunca pensé que en pleno siglo XXI tendríamos que salir de nuevo a defender la libertad de expresión, el derecho a la información y la igualdad de género, pero aquí estamos»

A finales de abril, la presidenta del Congreso impuso una votación separada para cada una de las mesas del Parlamento, Congreso y Senado, tras la falta de acuerdo entre el PP y el resto de partidos sobre el método de votación que deben adoptar las Mesas del Congreso y el Senado para desbloquear la elección de la cúpula de la radio y televisión públicas por concurso público, tal y como se decidió por mayoría en 2017. El PP se encuentra en minoría en la Mesa del Congreso, pero gracias a la desmesurada desproporción del sistema electoral, cuenta con mayoría absoluta en la Mesa del Senado, y en esta última pidió dos informes a sus servicios jurídicos, uno sobre la viabilidad del procedimiento de concurso público propuesto por la oposición y otro sobre la fórmula de votación que habría que aplicar en la decisión final de Mesas conjuntas, lo que dilata una vez más el nombramiento de nuevo presidente de RTVE y del Consejo del ente público. Los tres Consejos de Informativos de RTVE manifestaron su «indignación y rechazo» a lo que consideraban «maniobras dilatorias para retrasar y terminar por paralizar la renovación de los máximos órganos de la Corporación RTVE», pero no quedó todo en una protesta formal. Los trabajadores del ente público exteriorizan su protesta todos los viernes visibilizándola con ropa negra e impulsando campañas informativas en las redes sociales que trascienden a otros medios de comunicación.

El mandato legal de Presidente y Consejo de informativos caduca a finales de junio. De los 9 consejeros, 6 fueron elegidos a dedo por el PP, 1 por un partido que ya no existe, CiU, 1 por PSOE y 1 por IU, y si no se permite la elección por el nuevo sistema aprobado, por concurso público, en la práctica estaríamos ante un presidente y consejo en funciones que seguirá comandando una RTVE denunciada reiteradamente por numerosos capítulos de manipulación y silencios desinformativos: «corremos el riesgo de seguir ofreciendo a los ciudadanos que pagan con sus impuestos la radiotelevisión pública y que por lo tanto tienen derecho a recibir un servicio de calidad, unos informativos dependientes del gobierno, parciales y totalmente faltos de la pluralidad que exigen las leyes españolas y europeas», mantiene desde el Cnsejo de Informativos de TVE.

La situación de bloqueo es tal, que el Consejo de Informativos (CdI) ya ha anunciado que denunciará la manipulación de TVE en Bruselas ante la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo un resumen de quinientos casos recopilados de “manipulación” en los Servicios Informativos el próximo 16 de mayo. El CdI comparecerá unos cinco minutos para exponer ante los eurodiputados para presentar, mediante videos, un resumen de los casi quinientos casos de “manipulación” que viene recopilado desde que José Antonio Álvarez Gundín está al frente de los Servicios Informativos del canal. El objetivo es transmitir a los europarlamentarios que en TVE “se está pisoteando el derecho a la información de los ciudadanos y la libertad de prensa”.

Mientras tanto, cada día nuevos casos de manipulación están mostrados en las redes sociales por los periodistas de la cadena bajo la etiqueta #AsíSeManipula, estos profesionales exponen sus testimonios personales de las presiones que han recibido en el momento de elaborar esas informaciones.

El hastag #ViernesNegro3 es hoy TT en la red social twitter, donde personajes públicos de todos los ámbitos muestran su apoyo a los trabajadores de RTVE a la par que denuncian el bloqueo del Gobierno Rajoy. En esta denuncia, las mujeres de RTVE (@MujeresRtve) ejercen esta denuncia en defensa de la libertad de expresión como punta de lanza de un movimiento creciente en defensa de una información veraz, contrastada y de calidad. Veteranas del prestigio de Rosa María Calaf se unen a la campaña resumiendo un sentir general con estas palabras:»Nunca pensé que en pleno siglo XXI tendríamos que salir de nuevo a defender la libertad de expresión, el derecho a la información, la igualdad de género, pero aquí estamos. Realmente es triste que sea así, pero también es magnífico el ver como muchas mujeres y algunos hombres están saliendo a la calle, y está muy claro que es en beneficio de toda la sociedad».