Concentración en Parla por la reapertura de las Urgencias del SUAP de Isabel
CCOO apoya la convocatoria junto a UGT, Asociaciones de Salud, Plataformas y otras entidades ciudadanas de Parla bajo el lema «¡SOS Sanidad Pública! ¡Por la apertura de las Urgencias de Isabel II.
Este miércoles, 7 de septiembre, a las 20:30 horas, se ha convocado una concentración ante el Centro de Salud Isabel II, en Parla, para reivindicar la reapertura del servicio de Urgencias de Atención Primaria (SUAP), cerrado desde marzo de 2020 tras el inicio de la pandemia de Covid-19.
La ciudadanía parleña está convocada a volver a llenar las calles de la ciudad para exigir una atención de calidad que cuide de su salud y evite el colapso que sufren vecinos, vecinas y personal sanitario en el Hospital de Parla, con largas colas de espera en las Urgencias y citas para especialistas que sobrepasan los doce meses. Según informan desde el propio Hospital, actualmente no hay personal suficiente, y la sobrecarga de trabajo ha desmotivado por completo a la plantilla.
Parte de esta problemática, que se ha convertido en crónica, se podría evitar reabriendo el SUAP de Isabel II. Parla cuenta con una elevada población, lo que justifica la necesidad de acceder al menos a dos puntos de urgencias en la ciudad, por el bienestar tanto de vecinos y vecinas como de profesionales.
Para CCOO, la Atención Primaria es el eje fundamental de la atención sanitaria y resuelve más del 80% de los problemas de salud de la población, por eso su mantenimiento y potenciación es clave para el buen funcionamiento de los sistemas sanitarios públicos.
El sur es víctima de una política de abandono por parte de la Administración regional, cuyas políticas intencionadas de recortes en los servicios públicos, más la bajada de impuestos a los más ricos, fomenta el desequilibrio entre el norte y el sur de Madrid, para que quienes puedan pagarse coberturas privadas abandonen el marco de lo público y así desmantelarlo. Estas políticas han costado vidas en Parla durante los primeros meses de la pandemia del covid-19, dejando a su suerte tanto a pacientes y al personal del hospital y de centros de salud, como a ancianos y personal de las residencias.
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