Los dueños de “la granja de los horrores”, como la denomina la Fundación Igualdad Animal, están acusados de 14 delitos de maltrato animal. En 2018, durante la emisión de este reportaje dedicado a la industria cárnica, Évole mostró estremecedoras imágenes de una granja de cerdos llenos de úlceras y malformaciones.
La Fiscalía ha solicitado para los propietarios de la granja 18 meses de prisión por un delito continuado de maltrato animal. Desde Igualdad Animal, como acusación popular, les acusan de 14 delitos de maltrato animal y reclaman para ellos 3 años de prisión, lo máximo que pueden pedir por ley.
Por desgracia, esto sucede más veces de las que pensamos por el consumo de carne, pero nunca sale a la luz, salvo que alguien se infiltre, como fue el caso.
Las grabaciones de Salvados han sido utilizadas como prueba durante el juicio. En el programa, el periodista y miembros de Igualdad Animal se infiltraron en una granja de la Región de Murcia para mostrar las penosas condiciones en las que vivían los animales.
Allí se encontraron con cerdos, agonizando con úlceras y malformaciones. “En menos de un día habrá muerto”, lamentó un miembro de Igualdad Animal al ver uno de esos animales.
En el mismo Lorca, donde han sido juzgados los acusados, también los ganaderos protagonizaron un asalto violento al pleno municipal por los bulos que la derecha y ultraderecha habían extendido.
COMPARECEN VARIOS TESTIGOS
Como parte de la prueba testifical también han declarado inspectores, peritos veterinarios y técnicos de la consejería de Ganadería, que inspeccionaron la granja tras la emisión del programa.
A las puertas del juzgado, activistas de Igualdad Animal han mostrado carteles con las imágenes de esa terrible granja.
El perito judicial que ha comparecido a instancia de la Fiscalía, ha concluido que sí se produjo maltrato animal por omisión ya que las hernias y lesiones que presentan los cerdos tenían la apariencia de llevar semanas sin tratarse:
«Ese tipo de hernias no pueden producirse en horas. Eso cursa en semanas. Muchos de los animales no pueden ni reposar, ni tumbarse debido al tamaño de sus hernias y dicha condición estaba alargando de forma injustificada su sufrimiento»
Por su parte, el inspector veterinario que visitó la granja tras la emisión del programa, ha reconocido que la cantidad de animales muertos en las instalaciones de los hermanos Carrasco era de más del doble de lo habitual en granjas de estas características, siendo de 27.000 kilos de animales muertos al año.
El cámara del equipo de Salvados que grabó las imágenes ha reconocido ante el tribunal que pese a haber grabado muchas otras granjas, nunca antes había visto ni olido algo igual:
«Había cerdos muertos por todas partes, otros en condiciones terribles y con malformaciones. Lo que más me llamó la atención al salir fueron los contenedores llenos de animales muertos, pudriéndose. No he olido nada igual en toda mi vida»
Debido a la gran cantidad de testigos y peritos citados, el juicio no ha concluido y se reanudará el viernes 2 de febrero a las 10:00.
VINCULACIÓN AL POZO
Tal y como ha declarado ante los medios de comunicación Javier Moreno en representación de Igualdad Animal, esa granja servía a la empresa local El Pozo y es «la peor» que ha visto en su vida: «Lo que vimos allí es indescriptible: animales con hernias tan grandes que no podían ni moverse, canibalismo, cerdos muertos, otros con úlceras en las patas…’en condiciones sanitarias deplorables'».
La ha definido como «la granja de los horrores» y se ha mostrado satisfecho de que sus responsables vayan a ser juzgados años después de que las imágenes alcanzaran gran difusión en televisión y redes sociales para desencadenar un importante escándalo internacional.
En los momentos en los que se realizó la grabación, la granja Hermanos Carrasco suministraba sus cerdos a El Pozo, que se negó a participar en el programa. Tras la emisión de las imágenes, cuando salió a la luz el escándalo, no reconoció ninguna responsabilidad, acusando a Salvados y a Igualdad Animal de mentir, pero los que mentían eran ellos.
Las imágenes de animales enfermos y deformes emitidas tuvieron repercusión internacional y varios supermercados belgas retiraron los productos de El Pozo de sus estanterías. Fue entonces cuando, temiendo la misma reacción en otros países, El Pozo emitió un comunicado en el que informaba que había roto relaciones con la granja investigada. Reconociendo así el vínculo que había negado desde el principio.
Unos años más tarde, Greenpeace también mostraba terribles imágenes de una granja vinculada al pozo, reclamando el estado de los animales y el terrible impacto medioambiental que la empresa genera.
LA INDUSTRIA CÁRNICA Y SU PODER
La industria cárnica es muy poderosa y oculta toda la miserable realidad y las condiciones en las que los animales permanecen hasta ser llevados al matadero, pero también ocultan su responsabilidad en la crisis climática o el hambre en el mundo por criar masivamente a millones de animales más que humanos destinando indecentes recursos vegetales a su alimentación a pesar de que no criando a estos animales para explotar habría recursos para alimentar diez veces a la población, pues los recursos pueden destinarse a alternativas vegetales con el mismo sabor y textura.
A todo esto se suma que los expertos piden como mínimo reducir todo lo posible el consumo de carne, pues también tiene impacto negativo en nuestra salud, especialmente la carne roja.
Las imágenes emitidas en el programa de salvados generaron gran indignación, pero cada vez que hay una infiltración en una granja salen escalofriantes imágenes y lógicamente también en las certificadas con el perverso sello de bienestar animal, un engaño para aliviar malas conciencias cuando esos animales han vivido también una vida completamente miserable y angustiosa.
Para criar en la industria cárnica animales para consumo humano, hay que separar familias, manipularlos genéticamente, criarlos masivamente, hacinarlos y condenarlos a todo tipo de prácticas anacrónicas hasta el terrible viaje al sangriento, apartado y oscuro matadero.
¿Serías capaz por un momento de ponerte en la piel de ese animal que solamente ha venido al mundo a ser maltratado y abusado por la demanda de carne?
TÚ PUEDES EVITAR MUCHA MISERIA
Cada vez que vas al supermercado, tienda o restaurante tienes la posibilidad de poner un cuchillo en el cuello de un animal o no hacerlo (así de sencillo).
A la carne hay muchas alternativas, pues la soja texturizada se encuentra por todos los lados, sustituyendo perfectamente la carne picada y siendo económica, nutritiva y deliciosa, además de que si lo pones a remojo unos minutos antes, se hincha y, por lo tanto, te dura bastante el paquete.
Otras alternativas son el seitán que también lo tienes por todos lados y está delicioso o también tienes hamburguesas, embutidos o todo tipo de alternativas con el mismo sabor y textura evitando toda la miserable realidad. En este caso, yo recomiendo que para que ahorres y consumas un producto más natural busques recetas para hacer en casa.
Cualquier receta de toda la vida la puedes veganizar, pues otras industrias como la láctea, del huevo o de la pesca, entre muchas otras, conllevan la misma miserable realidad para las víctimas, realidad muy sencilla de evitar.
En ocasiones, ponernos ante el espejo que nos muestra aquello que hacemos, puede ser doloroso, pero necesario…
CONCLUSIONES: SEGURAMENTE LOS RESPONSABLES NO PISARÁN LA CÁRCEL Y SOMOS LOS ÚNICOS QUE PODEMOS AYUDAR A LOS ANIMALES
Me da que los acusados probablemente ni siquiera pisarán la cárcel, pues maltratar animales hoy en día es prácticamente gratuito y por eso el mundo está como está (los maltratadores en otros aspectos de la vida han empezado maltratando a los animales y después a mujeres o niños).
El especismo, según la RAE, es la discriminación por especie, un aspecto que se le inculca a la infancia manipulándola para que no sepan la terrible realidad de dónde viene su trozo de carne, pues es en la niñez cuando más adoran a los animales sin distinguir entre especies y si supieran todo esto, son los primeros que no querrían contribuir.
Hasta septiembre tengo contrato en una empresa limpiando patios de colegio y concretamente en dos colegios que hago a la hora de comer coincide con que están los niños en el patio y tanto en uno como en otro he observado la empatía que tienen con los animales, pues inocentemente no tienen maldad y jamás verían con buenos ojos pagar a la industria cárnica u otras si se les informara desde la realidad y no normalizando la mentira, manipulación y que mientras se hacen adultos se acostumbren sin saberlo a que los animales son algo que utilizar a nuestro antojo (comida, vestimenta, entretenimiento, experimentos de sadismo contra los animales…).
Partiendo de la base de que tenemos que inculcar el antiespecismo en todas las etapas de la vida, cada vez que haces la compra puedes evitar la angustia de los animales y una de las mayores causas de la crisis climática, problemas de salud y hambre en el mundo.
En cambio a todo esto, en los santuarios de animales todas las especies son alguien, pues en estos lugares tienen todos los cuidados, dignidad y felicidad que merecen.
Recuerda que los veganos no comemos lechuga, pues las alternativas a cualquier producto son deliciosas y nutritivas (tortillas de patata, tartas, embutidos, productos «del mar», yogures y todo lo que quieras hacer).
Lo dicho, espero que en este juicio prospere la petición de Igualdad Animal para que los responsables de esas imágenes entren a prisión, pero recuerda que la industria cárnica y todas las demás están ocultas, masacrando víctimas cada segundo y condenándolas a una vida miserable que solo puedes evitar tú desde la responsabilidad individual, respeto y empatía.
También es un aspecto a tener en cuenta el comportamiento que la empresa el pozo ha mantenido desde que le pillaron «con el carrito de los helados».