Pablo Hasel •  Opinión •  14/08/2020

Borbones, opresión «progresista» y República popular

Borbones, opresión «progresista» y República popular
Para colmo, los dirigentes del negocio podemita se hacen los ofendidos con la huida del emérito como si no tuvieran nada que ver.

 A estas alturas sólo los más manipuladores pueden negar la evidencia de que con gobierno de PP-VOX e idéntica gestión del coronavirus, monarquía y otros asuntos relevantes, la reacción hubiera sido de muchísima más indignación y protestas. Por eso oligarcas como Ana Botín aplaudían este gobierno cuando se formó, conscientes de que no sólo no van a tocar sus privilegios, sino que van a imponer las mismas políticas en prácticamente todo pero con menos resistencia en las calles. Menudo chollo para quienes las verían arder si hiciera lo mismo el llamado “trifachito” (como si PSOE y UP no perpetuaran el mismo modelo de Estado). Lo corrobora que varios actos de VOX hayan sido boicoteados pero los del partido de gobierno con todo lo que hacen, no. Otra victoria (efímera) del régimen y sus medios que pintan a VOX como el único problema a combatir y así blanquean al resto de partidos que se ponen de acuerdo con ellos en cosas tan importantes como la negación de derechos y libertades. ¿Acaso el gobierno no niega como ellos tener garantizado un trabajo en condiciones y una vivienda digna? ¿Acaso ya no hay represión? ¿Acaso han apoyado el derecho a la autodeterminación? Y así podríamos seguir horas si atendemos a los hechos y no a los discursos donde aparentan tener más diferencias. Lo triste es que algunos movimientos sociales piquen en la trampa y dejen tan tranquilo al gobierno señalando sólo a quienes dicten los medios dirigidos precisamente por las Ana Botín para perpetuar su dominación.

Hace mucho tiempo que los líderes de UP alaban al rey Felipe y se pliegan a sus exigencias, como se pliegan a las del PSOE sin tumbar la reforma laboral, la ley mordaza, aceptando la impunidad por los GAL, subiendo el sueldo a los cuerpos represivos (esto ya lo apoyaba Podemos antes de tocar gobierno), etc. ¿Recordamos que hace pocos años decían que no formarían parte de un gobierno que permitiera esto? Ya no queda nada de aquel Iglesias o aquella Montero que antes de Podemos deseaban la guillotina a la familia real o apoyaban tomar la Zarzuela cual Palacio de Invierno contra los zares. Incluso tras estallar todos los escándalos de corrupción que también implican a Felipe como señalan medios extranjeros a los que los tribunales fascistas españoles desearían condenar a prisión como a nosotros por contarlo, Iglesias calificó al rey de “sensato”. Desde luego que calmando las calles con semejantes mercenarios podemitas, ha sido sensato, sin su gran ayuda tendría muchas más dificultades para conservar el trono y el putrefacto Estado que lo ampara. Otra cosa que silencian los cada vez menos votantes que les quedan por eso de que si no “hacemos el juego a la ultraderecha”, como si esta no facilitara la misma impunidad. Han aprendido de su querido PSOE el “y tú más” con el que tantas críticas han evitado desviando la atención señalando al PP. Cuando se entra en la decadencia de justificar lo injustificable una y otra vez, ya todo vale.

Así, quienes llamaban a tomar el cielo por asalto, están sosteniendo un gobierno que ha organizado junto al resto del Estado la huida del emérito a un hotel de los Emiratos Árabes cuya estancia un día nos cuesta 12.000 euros sin sumar los elevados gastos de la numerosa escolta que también le ha facilitado el gobierno como ha reconocido sin vergüenza alguna el ministro de Interior Marlaska. Si se referían a que el cielo lo tome la monarquía, hay que reconocerles que lo han conseguido con creces. Esos gastos diarios, superan lo que la inmensa mayoría ganamos en un año. Un régimen con semejantes condiciones está condenado a ser derribado tarde o temprano, pero hay que denunciar a quienes retrasan su derrumbe y por tanto la conciencia. Se recuerda poco y tiene importancia porqué resume todo esto, que Iglesias encargó para su programa La Tuerka la canción contra los Borbones por la que Valtonyc llevaría dos años en prisión si no se hubiera exiliado, dejándolo sin solidaridad alguna cuando fue juzgado y condenado. Igual que en tantos casos más como el mío. Otra cosa en la que son clavados con el resto de partidos del sistema.

Para colmo, los dirigentes del negocio podemita (en el que no pocos enchufados o aspirantes a esbirros defienden lo que hacen por las redes) se hacen los ofendidos con la huida del emérito como si no tuvieran nada que ver. Lo hacen, como Echenique, portando la bandera rojigualda monárquica. ¿Se pueden tener menos escrúpulos? A estas alturas ya no queda nadie con un mínimo de honestidad ahí, los que tenían algo se fueron hace tiempo y otros cayeron en la pelea de poltronas. Además no sólo no han apoyado las manifestaciones contra la monarquía y por la República Popular, su gobierno las ha reprimido llegando a golpear y detener a un señor que ha pasado 14 horas en el calabozo sin poder ver a su abogado y con graves problemas de salud. Pero no se quejen, que son porrazos progresistas. Yo también bajo a la calle muy contento sabiendo que pueden detenerme y encarcelarme en cualquier momento, seguro que me tratarán igual que al emérito porqué son muy de izquierdas y antifascistas.

Cualquier revolucionario vemos en esta crisis de régimen cada día más agudizada, una excelente oportunidad para restarles apoyo popular y avanzar en la organización que les haga frente de verdad. Sólo quienes como UP viven muy bien a costa de sostenerlo, en vez de denunciarlo alto y claro oponiendo resistencia, optan por restar importancia a la gravedad de los hechos. Las risas de Iglesias con Iván Espinosa de los Monteros de VOX que quedaron retratadas en el Congreso, sirven de banda sonora para tan asqueroso e intolerable espectáculo. Es imprescindible, pero no basta con señalar a los culpables mal disfrazados, hay que construir la solución. Recordando que no necesitamos un referéndum sobre la monarquía como pregona alguna “izquierda” domesticada, sería como decir que pueden salir impunes y que son legítimos si ganan. La monarquía debe ser juzgada y condenada, no hay más. Como tampoco necesitamos una república en la que todo siga igual sin corona, nos urge una República Popular en la que el poder lo tomemos la clase trabajadora para garantizar todos los derechos y libertades para nuestra clase, así como el derecho a la autodeterminación para las naciones oprimidas.

No es descartable que cuando las cosas se le pongan más feas al régimen en las calles, se ventilen a la monarquía para vender que ha cambiado algo como en la farsa de la “transición”, asegurando su impunidad con un retiro de oro a nuestra costa. Ahora ni siquiera necesitan eso con la “operación salvar a Felipe”, el gobierno apagafuegos y las luchas tan débiles. Pero pueden prescindir de la monarquía en un contexto determinado y ya hay voces de peso entre defensores de este Estado, que abogan por esa salida como han manifestado en varias declaraciones. Tendremos que estar atentos a esa sucia maniobra que encima los mismos UP de turno que ahora ayudan a perpetuar la monarquía, nos venderían que hay que celebrar el gran cambio igual que ya hacen desde su llegada al gobierno “que no va a dejar a nadie atrás” mientras la pobreza aumenta.

Fuente: La Haine


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