Alberto Garzón subraya la “necesidad” de llegar a un acuerdo de gobierno con el PSOE pero advierte de que la dirección socialista no ha hecho “esfuerzos relevantes” para lograr el apoyo

Lunes, 24 de junio 2019.

El coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ha subrayado esta mañana la “necesidad de llegar a un acuerdo” de gobierno con el PSOE de Pedro Sánchez, aunque ha advertido con rotundidad que los máximos responsables socialistas no han hecho “esfuerzos relevantes” para conseguir el apoyo del grupo de Unidas Podemos en la sesión de investidura.

Para el máximo responsable de IU lo importante no está en “cuántos ni qué ministerios” pueden ser gestionados por personas de Unidas Podemos, sino en “qué tipo de acuerdos se quieren y cómo se pueden llevar a cabo”.

“Necesitamos los mecanismos -dijo- para garantizar que se cumpla lo acordado y es legítimo pensar que estar en el gobierno es de los mejores mecanismos” para conseguir que se cumpla algo que para Izquierda Unida siempre ha sido fundamental, como es conseguir un entendimiento en base a contenidos y al “programa, programa, programa”.

Garzón ha asegurado también durante una entrevista en el programa ‘Los Desayunos de TVE’ que sería un “error” que el PSOE pueda “vetar de alguna forma a Pablo Iglesias” a la hora de entrar en un futuro ejecutivo aunque, en cualquier caso, “creo que eso no está encima de la mesa”.

En respuesta a los mensajes que se lanzan desde la órbita socialista en medio de las negociaciones en marcha, entre ellos el de una supuesta oferta concreta desde el Gobierno en funciones del PSOE, Garzón aseguró que “discrepo de que haya habido esa oferta de gobierno de cooperación o secretarías de estado”.

Alberto Garzón incidió en que hay quien “tiene que aceptar que las mayorías absolutas son política agotada”, tal y como se puede ver estos días en las múltiples negociaciones para formar gobiernos de coalición en diferentes comunidades autónomas. Por eso, indicó que “no entiendo por qué el PSOE tiene tanta resistencia a aceptar el resultado de las urnas; el PSOE ha ganado, pero Unidas Podemos tiene más de tres millones de votantes”.

No obstante, desarrolló la idea defendida durante toda la campaña electoral y en los casi dos meses que han pasado ya desde el 28A y criticó que el PSOE siga pidiéndole el voto a PP y a Ciudadanos. “Probablemente -detalló- eso explique por qué nuestra negociación no esté lo suficientemente avanzada”, pese a que “cualquier cosa es negociable” y no hay “ninguna línea roja”.

Garzón aseguró que es “absolutamente inverosímil” que se pueda dar un escenario de repetición de elecciones e instó a Pedro Sánchez a llegar a un acuerdo de gobierno porque “las circunstancias lo exigen”, por lo que el PSOE “debe dar una vuelta y aceptar de una vez que Ciudadanos no les va a apoyar”.

Valoró que “la gran anomalía es que el PSOE debería tener claro qué es lo que quiere hacer cuando gobierne”, porque “no se trata solo de la investidura, sino de los próximos años, qué políticas se van a llevar a cabo y con qué apoyos” e insistió en que no se puede plantear unas nuevas elecciones porque, entre otras cosas, “pueden llevarse a Sánchez de la Presidencia del Gobierno y eso no le interesa ni a él ni a nosotros”.

Garzón señala que las últimas valoraciones de dirigentes de Vox están “fuera de lugar” y solo buscan “incrementar la polémica para ser objeto de atención”

El coordinador federal de Izquierda Unida ha considerado que las últimas valoraciones e insultos lanzados por dirigentes del ultraderechista partido Vox a raíz de la sentencia del Tribunal Supremo sobre la violación cometida por los integrantes de La Manada solo buscan “incrementar la polémica para ser objeto de atención”. No obstante, opinó que este tipo de ideas están “fuera de lugar en una sociedad democrática” que persigue imponerse a “las peores formas de la violencia machista”.

Durante la entrevista de esta mañana en el programa ‘Los Desayunos de TVE’ valoró que actuaciones de este tipo “no deben sorprendernos”, ya que tienen mucho que ver con el espacio de la ultraderecha procedente del “franquismo que estaba inserto en la estructura del PP” ocupado ahora por el partido de Santiago Abascal, tras “emanciparse” y operar sin tapujos.

Garzón opinó que la postura adoptada a través de sus valoraciones por el portavoz de Vox en Andalucía, Francisco Serrano, -una persona que procede de la judicatura y ahora se mete a político tras una polémica carrera- es “muy singular”, como otras parecidas de dirigentes del mismo partido, que encajan en una posición “patriarcal y machista”.

No obstante, se mostró más preocupado por lo que tachó de “señales de alarma”, en relación a que el Tribunal Supremo haya interpretado el Código Penal de forma “muy diferente” a como lo hizo la mayoría del tribunal sentenciador del Tribunal Superior de Justicia de Navarra, uno de cuyos magistrados integrantes llegó a decir en su voto particular que hubo ‘jolgorio’ en lo que nunca consideró como una violación.

Para Alberto Garzón, los jueces también “son personas” y éstas “tienen ideología”, por lo que la neutralidad absoluta “no existe”. Esto lleva a que sí haya miembros de la judicatura que tratan de ser “lo más objetivos posible”, mientras otros muchos “no lo son y se dejan llevar por sus demonios interiores”.