Redacción •  Actualidad •  21/11/2019

Urge controlar las emisiones del transporte marítimo en el Mediterráneo

  • En la  4 ª Conferencia de Transporte Marítimo del Mediterráneo, la coalición europea de ONG medioambientales, ha exigido que se apruebe sin más dilación la regulación de un Área de Control de Emisiones en el Mediterráneo (MedECA).
  • La coalición europea de ONG medioambientales urge a los Estados miembro a que apoyen la declaración.
Urge controlar las emisiones del transporte marítimo en el Mediterráneo

La  coalición europea de ONG medioambientales que se creó para impulsar un Área de Control de Emisiones en el Mediterráneo (MedECA), de la que forma parte Ecologistas en Acción, ha desarrollado la 4 ª Conferencia de Transporte Marítimo del Mediterráneo. Dentro de ese marco, las organizaciones participantes han publicado un manifiesto donde se exige a los Estados miembro que tomen medidas contra la contaminación del aire por el transporte marítimo.

La contaminación del aire por emisiones de los barcos representa hasta un 40 % de la contaminación atmosférica de las ciudades costeras del mar Mediterráneo, habitadas por cerca de 325 millones de personas. Un problema que afecta gravemente la salud humana, el clima y el medio ambiente.

Estos altos niveles de contaminación se deben principalmente a la falta de regulación sobre el sector marítimo en esta región, que permite el uso de combustibles con alto contenido en azufre, de hasta 3,5 %, a diferencia de regiones del norte de Europa donde ya existe un Área de Control de Emisiones (ECA), que limita hasta un máximo de 0,1 % de azufre.

La Conferencia, que  ha reunido a personas expertas, responsables políticas, representantes de puertos y entidades ecologistas a nivel europeo, ha insistido en la necesidad de que los países del Mediterráneo no ralenticen aún más el proceso de creación de un ECA en la región. Asimismo, ha puesto de manifiesto que la hoja de ruta para designar un ECA en el mar Mediterráneo trazada en la última reunión del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) es insuficiente en cuanto a su calendario y alcance.

Daniel Rieger, experto de la organización alemana NABU ha explicado que «aunque algunos países como Francia, Italia y España se han mostrado favorables a esta regulación, otros con un fuerte vínculo con la industria del transporte marítimo todavía dudan en unirse a la iniciativa. Sin embargo, no cabe duda de que Grecia, Malta y Chipre le deben a su ciudadanía el derecho a respirar aire limpio”.

Por su parte, George Sgouros, presidente de la organización griega Ornithologiki, ha declarado: «Nuestro Gobierno debe actuar inmediatamente y seguir la iniciativa de otros países europeos. No podemos seguir aceptando que en Europa existan normas diferentes solo para que los armadores puedan quemar el combustible más barato y sucio del planeta. El pueblo griego tiene el mismo derecho a un aire limpio que los habitantes de otros países europeos».

Límites a la emisión de azufre

El Reglamento sobre el azufre de la Organización Marítima Internacional (OMI) que entrará en vigor el 1 de enero de 2020, limitará a 0,5 % de azufre, lo cual ya supondrá un beneficio para el medio ambiente y la salud.

Los estudios encargados por Francia y la Comisión Europea para evaluar elim pacto potencial que tendría declarar un ECA en el mar Mediterráneo, concluyen de forma contundente que los beneficios positivos de esta regulación en relación a la prevención de muertes prematuras y costes económicos, serán del doble si además de limitar las emisiones de azufre (SECA), se incluye el control sobre los óxidos de nitrógeno (NECA).

Por primera vez desde la industria se ha recibido un apoyo a la petición de un ECA. Se trata de PONANT, la compañía francesa de cruceros, que recientemente ha firmado la Declaración de Roma, el manifiesto que impulsa la coalición de ONG europeas para designar al mar Mediterráneo como zona de control de emisiones. Como ejemplo de su compromiso, PONANT ha cesado el uso de combustible pesado de alto contenido de azufre en su flota, además de incorporar tecnologías para reducir drásticamente las emisiones de óxidos de azufre y de nitrógeno.

Para la coalición de ONG europeas es fundamental que en la próxima reunión del Convenio de Barcelona para la protección del mar Mediterráneo contra la contaminación, que tendrá lugar el próximo diciembre en Nápoles (Italia), los Estados miembro tracen una hoja de ruta urgente para que la OMIl declare un ECA a más tardar en 2020. Asimismo, la designación debe cubrir todo el mar Mediterráneo y abordar las emisiones tanto de azufre como de nitrógeno, como recomiendan los estudios citados de la Comisión Europea y Francia.


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