Ecologistas reprochan a Suárez- Quiñones sus declaraciones contra la protección total del lobo
Instan a la protección de la especie y a la toma de medidas para la coexistencia con el mundo rural.
Exigen una actuación acorde con las demandas de la sociedad, aunque entienden que las medidas no son de fácil aplicación.
La asociación conservacionista La Manada ha remitido esta semana una carta dirigida al consejero de Fomento y Medioambiente de la Junta de Castilla y León, Juan Carlos Suárez Quiñones, reprochando al representante regional las opiniones vertidas en los medios de comunicación tendentes a desacreditar la PNL para la protección del lobo en todo el territorio nacional, aprobada recientemente por el Congreso de los Diputados con el apoyo de todos los grupos exceptuando el PP.
Los miembros del colectivo La Manada quieren hacer llegar al consejero su “preocupación por las declaraciones y las posturas anti lobo”, aunque entienden que “la gestión del lobo es sin duda compleja debido a los daños que genera en las explotaciones ganaderas”. No obstante a ello, La Manada reitera que “Convertir al lobo en especie protegida en todo el territorio nacional no implica ponerse en contra de la ganadería y el sector rural”, puesto que estos también se verán beneficiados por la existencia de la especie, siempre y cuando se apliquen también las medidas necesarias para la coexistencia en el mundo rural, medidas incluidas en la PNL.
“Nuestra asociación entiende y valora la importancia que tiene el sector ganadero, y comprende que sea un colectivo al que la clase política tenga en consideración. Igualmente la clase política debería entender que el sector conservacionista no es un colectivo menor sino que está en claro crecimiento en respuesta al continuo deterioro de nuestro patrimonio natural, es un colectivo que vela porque no dejemos como legado a nuestros hijos un país desprovisto de unos ecosistemas que formaron parte de su grandeza y de su idiosincrasia, y es un colectivo que trata de evitar que las nuevas generaciones se avergüencen de las anteriores y de sus dirigentes”, apostillan en el escrito.
En los 26 años de diferencia entre los dos censos realizados por la Administración, la situación del lobo se mantiene igual, ocupando sólo un 20% del territorio que ocupaba hace cien años, y en contra de las voces que afirman que es una plaga en expansión.
El lobo está catalogado por la UE como especie de “interés comunitario”, y goza actualmente de protección legal, tanto por el Convenio de Berna como por las Directivas Europeas, a pesar de no aplicarse de forma precisa.
Por estos motivos, concluyen, “animamos y solicitamos a la Junta de Castilla y León que afronte la protección del lobo, tarea no exenta de dificultad, pero que debe tener en cuenta la gran demanda social que lo exige, sin que ello suponga perjudicar al sector rural. La clase política trabaja para la ciudadanía, y por ello debe tener en cuenta a todos los sectores implicados, siendo deseable y necesario que estos a su vez ofrezcan su colaboración”.
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