Vecinos y vecinas de Vallecas, Vicálvaro y Pinto demandan a Caixabank

«60 familias de la obra social de la Caixa de las promociones de Vallecas, Vicálvaro y Pinto demandan a la entidad por cláusulas abusivas y por no respetar los derechos de adquisición preferente en la venta de las viviendas a un fondo de inversión«.

Los vecinos y vecinas de las tres promociones de obra social de la Caixa de Madrid -Vallecas, Vicálvaro y Pinto- de la mano de PAH Vallekas y el Sindicato de vivienda de Moratalaz han presentado una demanda contra Caixabank por la inclusión de cláusulas abusivas en sus contratos y por haber especulado con sus viviendas mediante su venta a un fondo de inversión, sin respetar el derecho a la adquisición preferente de las personas inquilinas. Esta acción judicial se enmarca en la campaña “Nos Quedamos” impulsada por los vecinos mes de octubre.

En algunas promociones, los terrenos donde se construyeron estas viviendas fueron vendidos por el Ayuntamiento de Madrid para integrarse en el programa de vivienda asequible promovido por la Obra Social “la Caixa”. Sin embargo, tras la fusión con Bankia, el programa fue cancelado. A partir de entonces, se produjeron subidas abusivas de las rentas, contratos no renovados y numerosos desahucios silenciosos, culminando ahora con la venta de todas las promociones en la Comunidad de Madrid con un claro objetivo lucrativo.

El miércoles también se movilizan nuestras compañeras en Cataluña. Después de 9 meses de huelga de alquileres, con un seguimiento de más de 100 familias y una retención total de más de 300.000 euros han logrado cortocircuitar casi al completo los planes de la Caixa de privatizar sus más de 2000 viviendas públicas, consiguiendo el traspaso a Incasol, la empresa de vivienda pública de Catalunya, aunque siguen movilizándose hasta que la solución incluya a las vecinas de l’Hospitalet Porta Nord.

CONVOCANTES: PAH VALLEKAS. SINDICATO DE VIVIENDA MORATALAZ.

Comunicado

Tras haberse beneficiado de subvenciones públicas y desgravaciones fiscales para desarrollar su obra social, CaixaBank persiste en aumentar sus beneficios mediante la especulación con estas viviendas. Mientras proyecta una imagen de compromiso social a través de su fundación —centrada en la lucha contra la pobreza o la protección de la infancia—, amenaza con el desahucio a cientos de familias, muchas de ellas con menores, personas mayores y con escasos recursos.

Mientras proyecta una imagen de compromiso social a través de su fundación —centrada en la lucha contra la pobreza o la protección de la infancia—, amenaza con el desahucio a cientos de familias, muchas de ellas con menores, personas mayores y con escasos recursos.

Esta situación no es un hecho aislado. Caixabank es el mayor gran-tenedor de vivienda en España y alcanzó beneficios récord de 5.787 millones de euros en 2024, encadenando cinco años consecutivos de máximos tras la fusión con Bankia. Una parte sustancial de este beneficio procede de viviendas obtenidas tras la crisis financiera posteriormente vendidas a fondos de inversión. Esta estrategia supuso la pérdida de vivienda con potencial uso social, reduciendo el parque de alquiler asequible y agravando la exclusión residencial de colectivos vulnerables.

Exigimos también al Estado que asuma su responsabilidad dado que mantiene una participación cercana al 18 % de CaixaBank, lo que lo vincula institucionalmente con las decisiones del grupo. A través de las acciones en la entidad, el Estado ha percibido de media 339 millones por año, alcanzando en 2024 los 1.697 millones de euros. No solo debe interceder para frenar esta operación, sino que podría hacerse cargo de la adquisición de estas viviendas, por ejemplo, a través del SEPES, garantizando su incorporación al parque público.

Obra Social, estafa total. No nos vamos: Nos quedamos.