Misión Verdad •  Opinión •  22/01/2021

El ALBA-TCP construye un modelo inédito para enfrentar la pandemia

El ALBA-TCP construye un modelo inédito para enfrentar la pandemia

El pasado martes 19 se reunió el Consejo Social de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) para coordinar esfuerzos que garanticen el acceso masivo y gratuito de la vacuna contra la covid-19 y otros medicamentos a los pueblos de los países miembros.

Encabezada por su nuevo secretario ejecutivo, el boliviano Sacha Llorenti, la reunión respondía a la propuesta de los actuales presidentes de Venezuela y Cuba, Nicolás Maduro Moros y Miguel Díaz-Canel Bermúdez, respectivamente, sobre la creación de un fondo de vacunas para los países del ALBA-TCP.

Este ítem también formó parte de los temas abordados durante la visita a Cuba por parte de la vicepresidenta ejecutiva venezolana, Delcy Rodríguez, quien desarrolló una intensa agenda de trabajo con las autoridades cubanas.

Durante un balance de la situación de la pandemia de covid-19 en Venezuela el domingo pasado, el presidente Maduro insistió en la necesidad de satisfacer las necesidades de medicamentos de las naciones de América Latina y el Caribe, ante la desigualdad existente en el acceso a esos insumos a nivel global.

El mandatario recordó que el proyecto surgió durante la 18ª Cumbre del ALBA-TCP celebrada en diciembre, como una vía para paliar el monopolio, «injusto y desigual», ejercido por un reducido grupo de gobiernos en la adquisición de la mayoría de las dosis de vacunas para atender la emergencia sanitaria en sus respectivos países.

Este bloque de países se originó el 14 de diciembre de 2004 en La Habana cuando los entonces presidentes de Cuba y Venezuela, Fidel Castro y Hugo Chávez, firmaron la Declaración Conjunta para la creación de la Alternativa Bolivariana para las Américas (ALBA) inspirada en las ideas de Bolívar y Martí.

Más allá de un lema: «Unidos contra la covid-19»

Aunque parezca solo un lema cargado de buena vibra, es excepcional el hecho de mantenerse unidos contra el flagelo más importante que ha experimentado el mundo en lo que va de siglo, sobre todo en una región como América Latina, en la que la ola neoliberal que se ha hecho del poder en varios países ha desconfigurado cuanta iniciativa de integración regional se propuso en años anteriores.

Gobiernos como los de Brasil, Perú, Colombia, Chile, Honduras, Paraguay, Ecuador y el golpismo desalojado de Bolivia han dejado en el abandono a sus pueblos frente a una pandemia que devela a diario la fragilidad en la que viven. Las políticas centradas en el mercado que aplican estos gobiernos impulsan las alarmantes cifras que hoy presenta América Latina y el Caribe frente a la covid.

A este respecto, Llorenti hizo un repaso de la situación de la covid-19 en América y el mundo, haciendo énfasis en la letalidad de dicha enfermedad. Destacó que, como promedio, han muerto más de 11 mil 900 personas por día, es decir, un fallecimiento cada 8 segundos.

Resaltó que, aunque instituciones internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS) han alertado que solamente la solidaridad garantizará el éxito de la lucha contra la covid-19, el sistema neoliberal ha pretendido enfrentar la pandemia siguiendo las reglas del mercado.

A tal crítica agregó que esto se ve con particular crudeza en lo relacionado con las vacunas que ya están puestas a disposición de la comunidad internacional. Describió cómo «el 95 por ciento de las vacunas está en manos de diez países en el mundo … Los países ricos están acumulando las vacunas, hasta nueve veces el número de sus ciudadanos. ¿Quién decide a dónde va la vacuna? Es el mercado el que está decidiendo».

Llorenti reseñó los ejemplos de Cuba y Venezuela frente a este modo de obrar de los países partidarios del neoliberalismo, ambos países han apoyado con personal y medios a numerosos pueblos de todas las regiones del mundo.

Otras frases:

  • «Quien paga más se vacuna antes. Se vacunan primero los más ricos. Se vacuna quien puede pagarla», indicó al comentar que eso demuestra cómo funciona el neoliberalismo.
  • «Ni siquiera los más vulnerables, los trabajadores de la salud pueden ser vacunados en primera instancia», opinó al criticar que los servicios básicos sean convertidos en mercancía o privilegio para quien tiene más dinero”.
  • «¿Acaso no son los mismos países que acumulan las vacunas los que atacan a la Organización de la Salud (OMS)?», se preguntó al señalar que el multilateralismo está en crisis y bajo permanente amenaza de destrucción.
  • Por ello aseguró que solo saldrá adelante «un Estado fuerte, un sistema multilateral fortalecido, con servicios públicos entendidos como derechos humanos».
Sacha Llorenti, secretario ejecutivo del ALBA-TCP (Foto: Cancillería venezolana)

Cabe destacar que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) responsabilizó a los gobernantes de un grupo de países ricos de ignorar las necesidades de las naciones menos desarrolladas y competir para comprar lotes de vacunas anti covid-19. «Ahora vemos cómo las vacunas llegan rápidamente a los países ricos y los pobres no reciben ninguna», advirtió su secretario general, António Guterres, quien abogó por la solidaridad y esfuerzos globales conjuntos para superar la pandemia.

Manos visibles de la solidaridad: Experiencias, logros y retos

A continuación los países miembros compartieron sus experiencias, logros y retos entre los que resaltaron las estrategias de gestión y control sanitario centradas en la participación comunitaria, los avances tecnológicos enfocados en los derechos socioeconómicos de la población, el envío de brigadas internacionales a países que lo han solicitado para apoyar el combate a la pandemia y los mecanismos de cooperación internacional en los que ha prevalecido una visión multipolar.

El Gobierno venezolano, en voz de su ministro para la Salud, Carlos Alvarado, compartió cómo la atención temprana, las medidas drásticas y rápidas (confinamiento, uso de la mascarilla), los protocolos de bioseguridad y la creación de hospitales centinelas han definido el éxito que se refleja en las bajas cifras de contagio y mortalidad. Manifestó que «Es importante vencer el bloqueo, Venezuela tiene más de 30 mil millones de dólares en la banca internacional el cual no podemos usar ni siquiera para el acceso a la vacuna», haciendo referencia a las medidas coercitivas unilaterales que Estados Unidos y la Unión Europea mantienen contra Venezuela y que fueron ampliadas durante los primeros nueve meses de pandemia. Alvarado concluyó diciendo que el ALBA-TCP «debe ser ejemplo de cómo se debe enfrentar una amenaza en común».

Por su parte las autoridades sanitarias de Cuba expusieron su voluntad de integración declarando: «No hemos renunciado al principio de solidaridad, 56 brigadas Henry Reeve se han desplegado en el mundo; a pesar del bloqueo nos comprometemos a llevar salud a los pueblos». Asimismo, destacaron la vigilancia en los puntos de entrada la país, cumplimiento de los protocolos sanitarios establecidos por la OMS, centros y puestos de salud preparados para la detección y atención de casos de covid-19.

La representación de Nicaragua señaló que su modelo se ha basado en el protagonismo de la familia y de la comunidad organizada mientras que la de Bolivia aseguró estar trabajando arduamente para la adquisición de medicamentos, equipos y vacunas para la atención de pacientes contra una enfermedad tan contagiosa.

Raúl Li Causi, presidente del Banco del Alba, reconoció y felicitó las decisiones que han tomado los gobiernos de la región que han permitido mantener bajo control la pandemia, a la vez que anunció que la entidad financiera apoyará a los Estados miembros para la compra de vacunas. Agregó que «Desde el Banco del Alba en coordinación con la línea aérea venezolana Conviasa ofrecemos un puente aéreo para el traslado de vacunas o tratamientos».

El canciller Jorge Arreaza estuvo presente en la reunión del Consejo Social del ALBA-TCP (Foto: Cancillería venezolana)

De esta manera el bloque busca activamente la manera de poner herramientas a disposición de los pueblos para superar el escollo que una pandemia que ha agudizado contradicciones y mitos como la «mano invisible del mercado».

Acuerdos que son pasos estratégicos

Los acuerdos alcanzados durante esta reunión especial no solo son decisiones para abordar la coyuntura de la pandemia global, sino que son pasos estratégicos para avanzar de manera sólida en contracorriente a un orden mundial impuesto por la plutocracia. Se trata de un esfuerzo para evitar el desplome de los estados fuertes en la región, lo que le ha sido útil a las élites globales para intensificar el saqueo y el despojo y les permite reflotar un sistema decadente.

Como decisión clave se determinó la creación un Fondo Humanitario, financiado con dos millones de dólares inicialmente, para conformar un Banco de Medicinas y Vacunas que contribuya a mejorar el acceso a insumos médicos, pruebas rápidas y pruebas PCR, elementos vitales para la batalla contra la pandemia. Esta movilización de recursos estaría orientada especialmente a los países del Caribe Oriental.

Otros acuerdos:

  • Agilizar el intercambio de buenas prácticas para el combate de la covid-19, que permita compartir experiencias de acuerdo a las medidas y tratamientos implementados por los sistemas de salud de los países miembros.
  • Reforzar la participación de los países del ALBA-TCP en los procesos de negociación ya existentes para el desarrollo de un dispositivo más eficaz y efectivo para las compras conjuntas de vacunas y medicamentos contra la enfermedad.
  • Impulsar la procura de mayores recursos financieros y humanos para la lucha contra la pandemia, así como de promover la transferencia de tecnología y la difusión de información científica y técnica entre de los países del ALBA-TCP.
  • Afianzar la coordinación entre Salud y Educación Superior para la gestión de Programas de Formación de profesionales en diversas campos de la clínica y la salud pública.
  • Fortalecer la capacidad de respuesta de los servicios hospitalarios (…) con la rehabilitación de la infraestructura de las redes hospitalarias, con la reorganización y extensión de los servicios vinculados a la covid-19.
  • Avanzar en la cobertura universal e integral de servicios de atención de casos con la covid-19, centrados en la detección temprana, diagnóstico rápido, aislamiento inmediato y tratamiento oportuno.
  • Asegurar mecanismos de financiamiento y de asignación de recursos para llevar a cabo los planes y proyectos relacionados con la situación pandémica, bajo principios del intercambio justo, la complementariedad, la integración y la solidaridad.

También se reiteró la necesidad del imperativo apoyo de la OMS para que los Estados miembros del ALBA-TPC tengan un acceso equitativo a la vacuna y se destacó la relevancia de construir un inventario con la información de los laboratorios públicos y productores biológicos de América Latina y el Caribe para conocer las capacidades técnicas para la investigación y producción de vacunas.

Pasos estratégicos que son claves para lo multipolar

El ministro para las Relaciones Exteriores de Venezuela, Jorge Arreaza aseguró que se establecerá una negociación conjunta con los países miembros del bloque puntualizando que «Hay que recordar que nuestra alianza se fundamenta en la solidaridad, que se fundamenta en los principios de unión más sensibles que puedan existir» y destacando la necesidad de crear «un Gobierno multilateral que le brinde la mayor suma de felicidad a nuestros pueblos. Esperamos ver los resultados de esta reunión en muy poco tiempo».

El diplomático continuó haciendo un llamado al sector privado para que se sume al puente aéreo que se establecerá con Conviasa para el traslado de vacunas, tratamientos, pacientes y otros insumos. Además, insistió en impulsar la búsqueda de mayores recursos financieros y humanos para la lucha contra la pandemia, resaltando la urgencia de promover tanto la transferencia de tecnología como información científica y técnica entre los países del ALBA-TCP.

El intercambio de experiencias permitiría, como indica el Instituto Samuel Robinson para el Pensamiento Original, la proyección del bloque regional como la única organización internacional con un modelo propio de contención del virus, impulsado por la exitosa fórmula venezolana de flexibilización controlada, atención primaria y detección de casos empleando herramientas de Big Data (Sistema Patria), así como por el avance de los cuatro candidatos vacunales de Cuba.

Cabe recordar que este bloque fue parcialmente destruido por la derecha global cuando sus gobiernos desmantelaron la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) basados en artificios ideológicos. En 2018, Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Perú y Paraguay decidieron retirarse del grupo, al igual que Ecuador en 2019 y Uruguay en 2020, impulsados por las presiones plutocráticas.

La Unasur es un organismo de integración suramericano fundado en 2008 para «construir una identidad y ciudadanía suramericana y desarrollar un espacio regional integrado”, pero ha mantenido su participación suspendida desde abril de 2018 por la sumisión de los gobiernos de algunos de sus países miembros ante la diplomacia extremista de la extinta administración Trump. Actualmente solo cuatro países se mantienen como miembros.

En su concepción interna, la Unasur comprendía diferentes estructuras como el Instituto Suramericano de Gobierno en Salud (ISAGS), que buscaba consensuar posiciones, realizar investigaciones y asesorar permanentemente a las autoridades sanitarias de los doce países miembros.

Al alba de la otra geopolítica posible

El ALBA-TCP reúne a los países con mejor desempeño en la contención de la pandemia a escala hemisférica, consolidando paso a paso un modelo de trabajo conjunto con resonancia global, indica también el Instituto Samuel Robinson. Ello contrasta con el desempeño de otros gobiernos de América Latina que comenzaron a tomar medidas de forma asincrónica y heterogénea en cada territorio, cada uno basado en sus propias experiencias epidemiológicas, en investigaciones provenientes otros continentes o, simplemente, aplicando medidas de manera improvisada.

El resultado está a la vista: Brasil se ha convertido en el segundo país del mundo con más contagios (tras Estados Unidos), con más de tres millones de casos de la enfermedad. La bloqueada Venezuela extendió su apoyo ante una crisis sanitaria ocasionada en la ciudad de Manaos por la falta de oxígeno en la red hospitalaria, lo que provocó el sarcasmo iracundo del presidente brasileño, Jair Bolsonaro.

Camiones con oxígeno de Venezuela cruzan la frontera hacia Manaos (Brasil) (Foto: AFP)

Además, Colombia, Ecuador, Chile, Perú y Bolivia viven escenas dramáticas ante sistemas públicos de salud precarizados y servicios sanitarios privados que aprovechan la enfermedad para lucrarse con la vida de los más vulnerables.

Una reunión como la del Consejo Social también fortalece el espíritu de actuación en bloque con el que nació el ALBA-TCP en 2004, cuyo fundamento radica en fortalecer las capacidades de poder y negociación de la región frente al reordenamiento geopolítico de las potencias occidentales, donde, justo ahora, el tema de vacuna se ha transformado en un campo de batalla estratégico, concluye la instancia de pensamiento venezolano.

Fuente: Misión Verdad


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