Miles de despidos

Nos encontramos ante un nuevo ataque a la sanidad pública madrileña. Durante años la CAM ha aprovechado cualquier situación para disminuir los servicios públicos y, nuevamente, vuelve a hacerlo.

A finales de este mes se hará efectivo el cese del 100% de los contratos covid, se nos informa que se va a proceder a la ampliación de plantilla orgánica generándose plazas de nueva creación. Aun así, la plantilla de los centros sanitarios se verá reducida.

Una disminución que no nos podemos permitir. Ya, en época precovid, nos encontrábamos bajo mínimos, con ratios de personal / pacientes por debajo de las recomendaciones, repercutiendo directamente en la calidad de atención de nuestros pacientes y en la salud física y psicológica de los profesionales.

Ahora, tras dos años de pandemia, los datos del propio portal de trasparencia de la comunidad de Madrid revelan cifras escalofriantes sobre la situación actual de la sanidad.

Datos en enero de 2022:

• 90.813 pacientes pendientes de algún tipo de intervención quirúrgica.

• 163.472 pacientes pendientes de una prueba diagnóstica.

• 523.763 pacientes pendientes de ser vistos por el médico especialista.

• Esperas para citas con médico de familia y pediatras de hasta 20 días.

• 37 SUAP cerrados que atendían unas 800.000 consultas al año.

Todo esto incide directamente en la salud de los ciudadanos madrileños, en todos aquellos que pagamos nuestros impuestos para tener unos servicios públicos con la calidad que el trato al paciente exige.

Además, resulta llamativo que en estos momentos coincida una ampliación de la plantilla orgánica, algo que se lleva reclamando muchos años, con el cese de estos contratos. Nos suena más bien a intento de engaño hacia los trabajadores. Estos nuevos interinos, con los traslados y la resolución de las OPES del 2018, serán los primeros en cesar nuevamente. Nos dejan claro que el objetivo de la nueva Reforma Laboral de acabar con la temporalidad no rige para la sanidad pública madrileña.

Otro punto a tener en cuenta son las pocas plazas que se crean para el personal no sanitario (celadoras, auxiliares administrativos, servicios de limpieza, pinches, etc.) en concreto en el Hospital 12 de Octubre no se ha creado ninguna. Servicios totalmente necesarios para una correcta asistencia sanitaria, y que están condenados a extinguirse como puestos públicos, en el afán privatizador de la consejería.

Es por esto, que desde el MATS pedimos a los trabajadores y usuarios que levanten la voz, ya que no está solo en juego unos puestos de trabajo, sino un derecho fundamental de los ciudadanos: la salud.

Y, además, exigimos a la consejería que se reconviertan el 100% de los contratos en plantilla estructural, utilizando las bolsas oficiales para la asignación de estos  nuevos contratos.