Redacción •  Internacional •  17/04/2019

Enrique Santiago rechaza que el PP cuestione el ‘no es no’ de las mujeres para disponer de su sexualidad y señala que “da la medida del machismo como factor sustancial de la derecha”

El candidato de Izquierda Unida y nº 3 al Congreso por Madrid de Unidas Podemos celebra que finalmente haya un debate en la televisión pública entre los principales candidatos y señala cómo en la campaña se demuestra que la derecha “solo sabe crispar y embarrar”, mientras que el PSOE evidencia que “tiembla ante los poderosos”.

Enrique Santiago rechaza que el PP cuestione el ‘no es no’ de las mujeres para disponer de su sexualidad y señala que “da la medida del machismo como factor sustancial de la derecha”

El candidato de Izquierda Unida y nº 3 al Congreso por Madrid de Unidas Podemos, Enrique Santiago, ha rechazado hoy de forma tajante que el PP cuestione el ‘no es no’ de las mujeres a la hora de rechazar relaciones sexuales que no consiente, como se pudo comprobar ayer en un debate televisado. A su juicio, declaraciones de esta naturaleza “dan la medida del machismo como factor sustancial de la derecha, que quiere convertir a las mujeres en máquinas de procrear, mantenerlas trabajando en casa y sin respetar sus derechos afectivos ni las relaciones amorosas y sexuales libremente consentidas”.

Santiago ha participado esta mañana en una mesa informativa electoral en el distrito madrileño de Latina junto al también candidato al Congreso de Unidas Podemos Mariano Muniesa. En declaraciones a los medios, destacó que “tenemos una propuesta clarísima de reforma del Código Penal para que solo se entienda como consentimiento para mantener relaciones sexuales un ‘sí’, propuesta que desgraciadamente no apoyó el PSOE”, además de que fue “bloqueada” en la Mesa del Congreso por  PP y Ciudadanos.

En el mismo sentido, Muniesa valoró que “existe un machismo latente en nuestra sociedad tras muchos años de educación así. Tenemos que acabar con él y no cabe ningún tipo de componenda, hay que erradicarlo”.

 

 

 

 

Por otra parte, en relación a la polémica suscitada por los sucesivos cambios de formato y de cadena del debate electoral entre los principales candidatos previsto para la próxima semana, Enrique Santiago ha celebrado que finalmente se celebre en la televisión pública, tras rechazar la Junta Electoral el que pretendía organizar un grupo televisivo privado con el consentimiento del PSOE y la presencia de Vox.

“Ha sido sorprendente -ha advertido Santiago- que el presidente del Gobierno no quisiera hacer el debate en el medio público, pretendiendo potenciar a un grupo privado que, como sabemos, actúan en función de los intereses de sus dueños, que son bancos y los grandes grupos económicos”. De ahí que mostrara su satisfacción tras corregirse lo que consideró un “error gravísimo”.

Sin dejar el tema de los debates, Enrique Santiago ha defendido también que “solo Unidas Podemos tiene propuestas claras para solucionar los problemas de la gente”, como demostró la candidata de esta coalición Irene Montero en el debate ‘a seis’ de anoche TVE. Reprochó a la derecha su demostración de que “solo sabe crispar y embarrar”, mientras que el PSOE dio una muestra más de que “tiembla ante los poderosos” y cómo ha sido “incapaz de cumplir los acuerdos del pacto para los Presupuestos Generales del Estado”.

El candidato nº 3 por Madrid al Congreso enumeró algunos incumplimientos de Pedro Sánchez del citado acuerdo que cerró con el anterior grupo parlamentario de Unidas Podemos. Entre ellos está su negativa a controlar por ley el precio de los alquileres, “algo que, por ejemplo, sí ha hecho el Gobierno conservador de Macron” o a garantizar la revalorización de las pensiones según el IPC.

Para Santiago, esto último es tan importante que “debe tener como mínimo rango de ley y a ser posible con garantía constitucional; no puede ser graciable por el gobierno de turno”.

Aunque recordó que se logró “arrancar” al Gobierno del PSOE “con mucho esfuerzo” una sustancial subida del salario mínimo (SMI), también enfatizó que “no hubo una subida de los impuestos a la banca o a los grandes grupos económicos. Mientras cualquier trabajador o trabajadora paga el 20% de IRPF, la banca no paga ni el 6%, cuando tiene beneficios elevados”.


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