Prensa Latina •  Internacional •  11/07/2016

Dictarán sentencia a campesinos paraguayos por caso Curuguaty

Dilaciones, suspensiones y testimonios contradictorios caracterizaron el juicio seguido aquí a 12 campesinos paraguayos por los violentos sucesos de Curuguaty, cuya sentencia será dictada hoy.

Dictarán sentencia a campesinos paraguayos por caso Curuguaty

El proceso oral y público, calificado de irregular por diversas fuentes, fue por los sucesos acaecidos en junio de 2012 en esa localidad rural, a 240 kilómetros al noreste de Asunción, durante los cuales murieron por disparos 11 labriegos y seis policías.

Pero en este juicio solo fueron encausados los campesinos imputados por el deceso de los agentes, pues ninguna autoridad involucrada fue investigada como tampoco las circunstancias de la caída de los labriegos, en clara acción amañada según los detractores.

De los acusados, nueve tienen cargos por tentativa de homicidio doloso, invasión de inmueble ajeno y asociación criminal, un par de ellos por esos dos últimos supuestos delitos y otro por frustración a la persecución penal.

En mayo de 2012, la finca Campos Morombi de la localidad de Curuguaty fue ocupada por un centenar de campesinos para protestar por la escasez de tierras agrícolas en el centroriental departamento de Canindeyú.

Tres semanas después el Ministerio del Interior ordenó el desalojo por la fuerza de la propiedad y envió un amplio contingente policial, lo cual provocó enfrentamientos violentos entre ocupantes y la fuerza pública con aquel saldo trágico.

El 21 de junio, la Cámara de Diputados dominada por el Partido Colorado aprobó la realización de un juicio político en contra del entonces presidente paraguayo, Fernando Lugo, con la alegación de un mal desempeño en sus funciones.

Un día después el mandatario, quien se había negado a renunciar, fue destituido.

Dicho desenlace fue denunciado en múltiples instancias del país y fuera de él por quienes lo calificaron de golpe de Estado parlamentario.

Lugo asumió la Presidencia de la República el 15 de agosto de 2008 al ganar las elecciones del 20 de abril anterior, con lo cual terminó el continuismo colorado de más de 60 años y emprendió una campaña por el cambio.

Este proceso penal contra los 12 labriegos, aún cuando estuvo estancado por dos años, tuvo amplia repercusión en la opinión pública, tanto a nivel nacional como internacional.

Diversos sectores reclaman la absolución de los imputados, incluso desde antes de comenzar el juicio, pues alegan para ellos la total inocencia.

Ejemplo de ello es que desde el pasado miércoles decenas de personas se instalaron frente al Palacio de Justicia en campamentos, en señal de apoyo a los encartados.

Entre múltiples denuncias, la Coordinadora Latinoamericana de Organizaciones del Campo aseguró que el caso Curuguaty fue un claro montaje judicial.

lam/jf


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