El manifiesto de Salvemos Trevinca alcanza las 6.000 adhesiones en defensa del techo de Galicia frente a los impactos negativos del parque eólico Prada
El Club de Montañismo «Montañas de Trevinca» lanza una campaña en múltiples frentes para alertar de los planes de la mercantil Desarrollos Renovables Iberia Gamma,, filial del conglomerado noruego Statkraft, que pretende instalar en el macizo de la Serra do Eixe 31 aerogeneradores de 5,5 MW de potencia nominal y 200 metros de vuelo de pala de rotor, además de numerosas infraestructuras complementarias como pistas de acceso y líneas de evacuación eléctrica.
En su campaña «Salvemos Trevinca» y su manifiesto adjunto (www.salvemostrevinca.org), que alcanza ya las 6.000 adhesiones a nivel individual y colectivo, la entidad califica el proyecto eólico de «desmesurado», señalando que «supondría una grave agresión» al patrimonio natural de la montaña gallega, algo que además no tendría «posible solución posterior» y manifiesta que resulta inaceptable el desarrollo de este tipo de iniciativas industriales en zonas sensibles, que acaban suponiendo verdaderos «proyectos de destrucción», una «destrucción insensata del patrimonio natural, tanto en su geodiversidad como en su biodiversidad»
Bajo la terminología de «Señores eólicos», el colectivo hace patente su malestar por la falta interés de la actual Administración autonómica en proteger el medio ambiente, amparando de manera reiterada este tipo de proyectos que van contra el patrimonio natural de Galicia y obviando «todas las razones científicas de expertos y académicos en temas ambientales».
La entidad recuerda además que este supone ya el cuarto intento de instalar un parque eólico en la zona tras los intentos de 2001, 2005 y 2008 contraviniendo el más elemental sentido común y se pregunta en el manifiesto «cuándo las administraciones gallegas protegerán eficazmente nuestro importante y muy valorado patrimonio natural de montaña» frente al «negocio fácil» de las grandes corporaciones del sector, recordando que en ningún caso «esto es una solución para el rural» por la notoria temporalidad laboral que se crea en la instalación de los parques eólicos, un empleo que desaparece tras finalizar su instalación destruyendo a futuro «la posibilidad de poder recuperar los territorios más tarde».
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