En Marea pasa a formar parte del Grupo Parlamentario Confederal Unidos Podemos – En Comú Podem
Tras la negativa de la mesa del Congreso a conceder grupo parlamentario propio a la confluencia gallega, En Marea ha decidido registrar esta tarde el Grupo Parlamentario Confederal Unidos Podemos - En Comú Podem - En Marea. El acuerdo con Unidos Podemos y En Comú Podem garantizará a En Marea las particularidades propias de un grupo parlamentario.
Tras la negativa de la Mesa del Congreso a concederle el grupo parlamentario solicitado a En Marea, a pesar de reunir las condiciones que establece el Reglamento, la confluencia gallega ha decidido registrar este jueves por la tarde el Grupo Parlamentario Confederal Unidos Podemos – En Comú Podem – En Marea.
Esta alianza fraterna permitirá a En Marea superar el bloqueo político del PP, PSOE y Ciudadanos y dar respuesta a la realidad plurinacional del hemiciclo, además de actuar responsablemente con la voluntad de miles de ciudadanos.
El acuerdo con Unidos Podemos y En Comú Podem garantizará a En Marea las particularidades propias de un grupo parlamentario: presencia en la Junta de portavoces, agenda diferenciada, presencia en todas las comisiones, disciplina de voto autónomo e intervenciones en el pleno. En definitiva, se traducirá en tejer acuerdos en pie de igualdad, funcionando en la práctica como un sujeto político diferenciado con obediencia estrictamente en Galicia.
Como actor político soberano, con agenda y posicionamientos propios, En Marea dispondrá de una portavocía parlamentaria autónoma, de carácter rotatorio para cada período de sesiones (Alexandra Fernández, Antón Gómez-Reino y Yolanda Díaz). También contará con secretaría propia (Ángela Rodríguez), que coordinará la acción parlamentaria de las diputadas y diputados de En Marea y su relación dentro del Grupo Confederal.
En Marea también ha presentado esta tarde un escrito de reconsideración ante la Mesa del Congreso, al entender que el rechazo al grupo parlamentario a En Marea mientras retrasan la resolución sobre Convergencia Democrática de Cataluña -que no reúne los requisitos de grupo-, es una decisión más política que reglamentaria y fruto del inmovilismo que lleva años instalado en las instituciones.
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