La Atención Primaria es la base del sistema sanitario público ya que en ella se resuelven en la actualidad más del 80% de los problemas de salud de la ciudadanía. Pero para que la Atención Primaria sea eficaz no solo debe tener recursos para atender adecuadamente a la población sino que debe tener también recursos para realizar actividades de promoción de la Salud, y de prevención de la enfermedad. Prevención y promoción que son fundamentales cuando sabemos que más del 80% de las enfermedades crónicas más comunes son evitables con los hábitos de vida saludables y el control de los factores de riesgo. No hay mejor medicina que la prevención y eso es lo que se hacía y se debería volver a hacer en Atención Primaria.

Pero como se puede hacer prevención en centros de salud como el de Abrantes donde una cita con el médico de familia puede hacerse esperar un mes y medio según denunciaba, la semana pasada, un vecino a las puertas de ese consultorio.

La situación especialmente sangrante del centro de salud Abrantes -tiene ahora menos del 55% de médicas/os de familia que hace tres años-, simboliza el efecto de los recortes en la sanidad madirleña. Este consultorio es uno de los cerca de 20 ambulatorios calificados como de “difícil cobertura”, centro “con dificultades” o centro “caídos”. Diferentes nombres para reflejar una misma realidad: centros de salud de Atención Primaria en los que faltan más de un 20% de médicos de familia y de pediatras y en los que, según el principal sindicato de médicos y médicas de Madrid la “situación es crítica por la grave falta” de profesionales sanitarios. Todos ellos están en barrios y localidades de clases trabajadoras y populares del sur de la Comunidad de Madrid.

En el distrito de Carabanchel se localizan tres de estos centros “caídos”: el de Abrantes, el de Carabanchel Alto y el de Nuestra Señora de Fátima.

Queremos recordar como empezaron las protestas ante el centro de salud de Abrantes, en el carabanchelero barrio del mismo nombre y uno de los diez barrios con renta media más baja de Madrid. El CS Abrantes, atiende un área con una población de 30.000 personas y tenía en febrero de 2020, justo antes del inicio de la pandemia, 16 facultativos de familia (8 en el turno de mañana y 8 en el de tarde). En septiembre 2020 en la puerta de este ambulatorio apareció un cartel escrito a mano que indicaba “No hay médicos ni de mañana ni de tarde”, y de un plumazo miles de personas nos quedamos durante días sin atención médica en nuestro centro sanitario de referencia. Desde entonces, salvo algún paréntesis -como en Navidad o el periodo más caluroso del verano-, cada jueves cientos de vecinos y vecinas nos hemos movilizado para exigir que hubiera personal suficiente y en defensa de una sanidad pública. Y aunque gracias a estas constantes protestas ha recuperado algunas profesionales, el CS Abrantes, que atiende un barrio con una importante población envejecida y dependiente, está en una situación muy difícil: actualmente tiene 8 médicos de familia cuando sobre el papel debería tener 17. Y dos pediatras cuando debería tener cuatro. Y no hay consultas regulares de facultativos ni de pediatra en el turno de tarde.

Sin embargo hay que destacar que la situación de la Sanidad Pública y sobre todo de la Atención Primaria no es la misma según el barrio y la localidad de la región: de la veintena de centros de salud “caídos” todos están en barrios y localidades de clases trabajadoras y populares, y ninguno está en la almendra central de la capital.

Este brutal agravio explica la persistencia de las protestas ante centros de salud en barrios y localidades del sur de la Comunidad. Como por ejemplo las protagonizadas por el vecindario ante su ambulatorio, que desde hace ya tres años y 8 meses recorren los jueves por la tarde las calles del barrio de Abrantes, en el madrileño distrito de Carabanchel.

Luchemos por una sanidad pública, universal y de calidad, no sólo para el barrio, sino para toda la Comunidad de Madrid. Estamos hablando de una cuestión de derechos y de salud. ¡No nos mires y únete! ¡Por ti, por el barrio!