Adelante Andalucía califica de “expolio de la jerarquía eclesiástica” la venta del convento del Espíritu Santo en Jerez

La parlamentaria de Adelante Andalucía, Ángela Aguilera ha lamentado la puesta en venta del convento del Espíritu Santo de Jerez en un portal de internet por 2,2 millones de euros, calificando este hecho como “un ejemplo más del vergonzoso expolio que está realizando la jerarquía eclesiástica contra el patrimonio en el estado español y en Andalucía”. Para Aguilera, “esto es una consecuencia directa de la dejación de responsabilidades y de funciones por parte de la Administración pública que mira para otro lado, ante lo que es un robo flagrante de un patrimonio que es de propiedad de todos los andaluces y andaluzas”.

En concreto, se ha referido a la negativa por parte de la Mesa del Parlamento andaluz de facilitar un listado de todos los bienes inmatriculados por la Iglesia Católica en Andalucía, que Adelante Andalucía solicitó hace unos meses. Según el último registro publicado por el Gobierno de la Nación, Andalucía cuenta con 4.222 bienes inmuebles inmatriculados por la Iglesia Católica, pero “nos tenemos que son muchos más”. Es por ello que Adelante Andalucía reclamó que se hiciera un registro exhaustivo ante el Colegio de Registradores desde la Ley Hipotecaria de 1946 hasta la actualidad.

“Nos parece absolutamente lamentable que el Gobierno Moreno Bonilla se niegue a realizar el listado de bienes inmatriculados, muchos de ellos ilegalmente, y que forman parte del patrimonio, cultural, histórico y público de los andaluces y las andaluzas”. Aguilera ha insistido en el “deber estatutario del Gobierno andaluz para investigar y proteger el patrimonio andaluz” y que, otras comunidades, como Cataluña, Generalitat Valenciana o Navarra, sí lo han hecho. “No nos parece de recibo que en Andalucía se esté produciendo este agravio comparativo y que nuestro Gobierno mire para otra parte”.

Paralelamente, la responsable andaluza ha pedido responsabilidades al Ayuntamiento de Jerez por “su falta de diligencia para promover la catalogación de ese inmueble como Bien de Interés Cultural y complicara, al menos, que pudiera ser objeto de un movimiento especulativo como ha sido”.

Finalmente, ha lamentado que “ningún Gobierno en democracia haya plantado cara a esta cuestión, otorgando incluso una amnistía a la Iglesia como hizo el Gobierno de Aznar y manteniendo la Ley Hipotecaria de 1946 que permitía que un obispo fuera un notario”. “Esto es una vergüenza democrática y desde Adelante Andalucía vamos a seguir insistiendo en exigir la protección del patrimonio andaluz y en denunciar estos robos por parte de la jerarquía eclesiástica”.