Ramaris Vásquez • Opinión • 28/12/2020

Venezuela: De aliado histórico a “amenaza” de EE.UU.

De ser un aliado histórico de EE.UU., ahora Venezuela constituye una “amenaza inusual y extraordinaria” según “orden” Ejecutiva 13692 emitida por Barack Obama y ratificada por Donald Trump, mientras violenta derechos humanos a la población venezolana al obstruir su negocio petrolero –su principal medio de subsistencia-mediante “órdenes” Ejecutivas: 13808,13827, 13835, 13857 y 13884.(1)

La situación es histórica. Galeano (1978), quien cita a Edwin y Lieuwen (Ohio, 1966), en “Las Venas Abiertas de América Latina”, confirma que “esta dependencia, creciente, respecto a los suministros extranjeros, determina una identificación también creciente de los intereses de los capitalistas norteamericanos en América Latina, con la seguridad nacional de los Estados Unidos. La estabilidad interior de la primera potencia del mundo aparece íntimamente ligada a las inversiones norteamericanas al sur del extracción de petróleo y a la explotación de riquezas mineras, «indispensables para la economía de los Estados Unidos tanto en la paz como en la guerra»” (Galeano, 1978, P.112). (2)

Efectivamente, Venezuela ha sido un proveedor y aliado energético confiable y barato para EE.UU, al que, además, le ha dado estabilidad política, por lo que constituye parte de su seguridad. Romero (2006) en su investigación “Las relaciones de seguridad entre Venezuela y Estados Unidos: entre la diplomacia y el conflicto”, expone:

“Desde el comienzo del siglo XX, Venezuela ocupa un lugar relevante en los planes de defensa de la superpotencia. Durante la I Guerra Mundial, el petróleo venezolano fue considerado como el sustituto inmediato del petróleo ruso y del petróleo mexicano, en el momento en que esos países transitaban por una revolución (…) durante la II Guerra Mundial, el petróleo venezolano se constituyó en una pieza clave en el suministro de recursos para la acción bélica de los países aliados. En el período de la Guerra Fría, EEUU definió a Venezuela como un aliado con una alta prioridad para evitar el avance del marxismo en ese país y para promover la defensa continental contra la supuesta injerencia soviética-cubana en la región”. (Romero, 2006, Pág. 10). (3)

No obstante, el estilo de vida en EE.UU. demanda cada vez más recursos. Mielgo, Portero y Estezo (2013) en su investigación “Implicaciones geopolíticas de la Independencia Energética de Estados Unidos”, explican que “desde 2009, año en que fue sobrepasado por China, Estados Unidos es el segundo mayor consumidor de energía del mundo, suponiendo aproximadamente un 20% del consumo mundial anual de energía primaria”. (Pág.2). (4)

Los investigadores ratifican que “por su estructura social y económica, la energía es vital para mantener el actual modo de vida americano, lo que conlleva una alta sensibilidad a su precio y hace que cualquier problema de suministro que suponga una subida de los precios tenga un impacto directo en la economía y bienestar estadounidenses”. (Mielgo, Portero y Estezo, 2013, Págs. 2,3). (4).

Por ello, el cambio de política petrolera planteada por el presidente venezolano Hugo Chávez, quien gobernó Venezuela de 1999 a 2013, le fue inconveniente a EE.UU. El libro “Pensamiento Petrolero del Comandante Hugo Chávez, publicado por PDVSA (2013) recoge la presentación de los Planes Estratégicos de Venezuela, que Chávez expuso públicamente el 18 de agosto de 2005, donde explicó la situación con la explotación de la Faja Petrolífera del Orinoco.

“(…) Esa era la Apertura Petrolera (…) una gente que está sacando petróleo y paga impuestos como si estuviera fabricando corbatas, violando la Constitución y la Ley desde que comenzaron”. (Chávez, 2005, Pág.115). Asimismo, Chávez anunció que haría justicia histórica a la nación venezolana en el uso soberano de sus recursos, apegados a las leyes de la República y al ordenamiento internacional. (5)

“¿Ustedes saben cuánto pagaban de regalía por obra y gracia de la apertura petrolera? 1%. Menos que en tiempos del gobierno del general Juan Vicente Gómez cuando se pagaba 3%. (…) Eso es un atropello. (…) Les estamos aplicando incluso la tasa de la Ley anterior, que era 16.67%. Ahora no. Ahora es 30%. Usted saca un barril de petróleo y me paga de una vez el 30%, ahí mismo a boca de pozo. Porque yo soy el dueño de ese petróleo (…)”. (5)

Surgieron las especulaciones porque Chávez lo dijo en primera persona, pero vamos a ver que era la expresión idiosincrática de un hombre llanero (*) y luego, que él era venezolano y al igual que tod@s l@s venezolan@s, también dueño de ese petróleo.

Más allá de las posiciones políticas, Chávez ejerció el derecho soberano de resguardar el principal medio de subsistencia de tod@s l@s venezolan@s en el marco de la autodeterminación, un derecho humano contemplado en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, documento ratificado por Venezuela y EE.UU, y que establece en su Artículo 1, numerales 1 y 2:

Todos los pueblos tienen el derecho de libre determinación. En virtud de este derecho establecen libremente su condición política y proveen asimismo a su desarrollo económico, social y cultural. 2. Para el logro de sus fines, todos los pueblos pueden disponer libremente de sus riquezas y recursos naturales, sin perjuicio de las obligaciones que derivan de la cooperación económica internacional basada en el principio del beneficio recíproco, así como del derecho internacional. En ningún caso podrá privarse a un pueblo de sus propios medios de subsistencia. (6).

Hoy estos DD.HH de los venezolan@s son violentados por EE.UU. Ya no somos aliados, si no “amenaza”.

*Llanero. Según la RAE, “Habitante de las llanuras”, “natural de los Llanos, región de Colombia y Venezuela”. https://dle.rae.es/llanero

*Ramaris Vásquez, periodista venezolana. Con estudios de especialización en Derechos Humanos, de la Universidad Nacional Abierta (UNA). Venezuela.

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