Incendios la historia interminable se repite

Desde el gobierno de la Xunta de Galicia se pretende dar a entender que los incendios son algo inevitable, o un acto de un pirómano, o un fenómeno de la naturaleza, pero no es cierto, Galicia arde en gran medida como el resto del Estado español por unos gobiernos irresponsables que han decidido recortar en medios y hacer leyes a medida de especuladores sin escrúpulos.

Los intereses oscuros de algunos se benefician de la aprobación de leyes que permiten recalificar suelo quemado, unas leyes que son mucho más peligrosas para los montes gallegos que todo un año de sequía.

Dice el señor Feijóo que la culpa ahora también es del gobierno de Sánchez, aunque emergencias y los servicios contraincendios dependen de los gobiernos autonómicos, algo que sabe muy bien, como lo sabe Rueda, cuando Feijóo era presidente decía que Galicia ardía porque el suelo estaba muy seco, alguien debería decirle al lumbrera que esto suele pasar en verano, y que las competencias son de Rueda y no de Pedro Sánchez, y que por mucho que la ultraderecha lo niegue todo el mundo sabe que el cambio climático es una realidad.

Feijóo dice semejantes tonterías sin ponerse colorado, al más puro estilo George W. Bush que en sus tiempos como inefable presidente de Estados Unidos defendió públicamente que el mejor modo de evitar incendios era cortar los árboles.

La Xunta de Galicia apuesta en el caso de los brigadistas, como en el caso del servicio de bomberos, por privatizar salvajemente estos servicios básicos para la ciudadanía, entregando la concesión a empresas privadas y desviando fondos que deberían ser investidos en obra pública.

Este modelo de espolio y mercadeo con lo público conlleva entre otras cosas una descoordinación evidente y una operatividad ineficiente, lo lógico sería que este servicio formase parte de un cuerpo único y coordinado a nivel autonómico.

Una ley de suelo irresponsable y temeraria, unida a privatización salvaje de los servicios contra incendios, sumada a la descoordinación, al drástico recorte de plantilla de las brigadas contra incendios, a la falta de medios, al trabajo en precario, son la suma de factores que nos da el resultado de una Galicia en llamas, que arde por sus cuatro costados, no es la sequía la causa de este drama señor Feijóo viene del mal gobierno del Partido Popular de hoy y de siempre.