Aviso a quienes visiten la Sierra de la Culebra con la finalidad de observar lobo

El interés social surgido por la observación turística de lobo en la Sierra de la Culebra (Zamora), aún ignora bajo qué circunstancias se está desarrollando el fenómeno.

Las empresas dedicadas a ofrecer servicios de observación de lobo, en sus mensajes comerciales, suelen hacer loa de su registro en TURISMO ACTIVO. Es precisamente esta categoría la principal fuente de desconfianza, irregularidad e intrusismo profesional. El Decreto 96/2007 de Turismo Activo de CyL en ninguna de sus disposiciones alude a la actividad ecoturística, dado que la finalidad del mismo es regular las ACTIVIDADES FISICO-DEPORTIVAS EN EL MEDIO NATURAL. En las Cortes Regionales de Asturias se debatió la inconveniencia de este registro para actividades de turismo de naturaleza (1). Es decir, en la actualidad, no se exige titulación específica como la de guía de naturaleza, monitor o educador ambiental, formación superior o de FP especializada, o experiencia profesional en el sector. Es tal el despropósito en su aplicación, que se abandona al criterio arbitrario (cuando no condicionado) del funcionario de turno de los Servicios Territoriales de Cultura y Turismo. He aquí la causa de que operen empresas como AHERCA y ZAMORA NATURAL (Cluster Interior Legendario) que no reúnen los requisitos que si se les debería exigir para realizar esta actividad, y es por ello que no asuman ni se les exija la aplicación de un código ético que les impida por principios o por legalidad usar cebaderos o favorecer la ceba de lobos con fines comerciales, o que les otorgue capacidad profesional para ofrecer un servicio honesto y satisfactorio (2). Por cierto, iniciativa la del Cluster financiada por la Diputación de Zamora, apuesta loable de “calidad” por el desarrollo rural de la provincia.

Como forma de prevenir la estafa y garantizar los derechos de las personas que contraten los servicios de las empresas señaladas, facilitamos un enlace que, por medio de fotografías e indicaciones (3), se muestra el acceso a lugares de observación y puntos de ceba destinados a la atracción de lobo donde operan estas empresas bajo la publicidad falaz de “observar lobo en libertad” y de “turismo responsable o sostenible” (4).

Otra de las excelencias “legales” anunciadas por las empresas intrusistas son los “permisos” concedidos por favor acrítico que expide la Dirección de la Reserva de Caza. Esta figura se rige por la Ley 4/1996 de Caza en CyL y debería estar subordinada (aunque sólo prime la masacre de lobos) a las normas que contienen la regulación de usos y el régimen de autorizaciones acordes con los obligados Planes de Ordenación de Recursos Naturales (PORN). Así sucedería de no llevar más de 24 años sin aprobarse, y que de entrar en vigor, dichas autorizaciones se concederían en condiciones más exigentes (5). Es decir, las autorizaciones actuales no son vinculantes, o dicho de otro modo, NO SON LEGALES y se conceden o se retiran arbitrariamente en función del grado de condescendencia que presente el solicitante (como el acto de no denunciar por ejemplo) con la lamentable gestión ambiental y turística que se aplica en el Espacio, de la cúal, estas empresas intrusistas son las principales responsables.

La queja habitual de los visitantes es la falta de información y señalización del Espacio, necesidad que debería resolverse con una planificación territorial básica, máxime, desde su declaración como Reserva de la Biosfera. Esta carencia, entre otras cuestiones, da lugar al abuso de atribuciones en la limitada autoridad con la que cuenta el personal Celador de Caza de la Reserva de Caza. Este personal laboral de la Administración, que es denunciado habitualmente por hostigar e intimidar al público visitante durante su uso del entorno (6), tiene sus funciones limitadas exclusivamente a las infracciones recogidas en la Ley 4/1996 de Caza en CyL. Para más detalles, informar de que, en caso de que se señalice temporalmente lo contrario, las vías pecuarias, pistas y caminos de concentración son de libre uso público y que sólo los Agentes Medioambientales y la Guardia Civil son la autoridad competente en caso de cometerse alguna infracción. Dada la similitud que estos cuerpos presentan en la indumentaria y en los vehículos, para distinguir al personal Medioambiental del Celador, hay que fijarse que en las pegatinas de las puertas de los vehículos oficiales refleje “Agentes Medioambientales”, y que en el uniforme, en el escudo del brazo, igualmente aparezca “Agente Medioambiental”. Y en el caso de que se produzca la habitual intervención ilegal del personal Celador de Caza, se aconseja interponer denuncia en la Comandancia de la Guardia Civil más cercana (7).

Informar y denunciar es el único recurso de defensa con el que cuenta el ciudadano ante el vilipendio de sus derechos y frente a la extralimitación de unas instituciones inmersas en la inoperancia y el clientelismo. Desde aquí exhortamos al compromiso personal para mejorar colectivamente nuestra sociedad.

Texto pie de foto: La cría y sacrificio de mulas para la ceba de lobos forma parte de la gestión de la Reserva de Caza, así lo constata los múltiples cráneos que se encuentran en los cebaderos. Tambíen forman parte del recurso para la atracción turística de lobos. Foto nocturna. Autor: Carlos Soria.

Referencias:

(1) ”El Principado equipara el avistamiento de la fauna al turismo activo.” La voz de Asturias.

(2) “La situación esperpéntica del lobo en la Sierra de la Culebra”. Actualización petición de firmas en Change.org “Salvar al lobo de los censos oficiales, planes cinegéticos y reservas de caza en CyL”

(3) Carpeta con fotografías: https://www.dropbox.com/sh/rvo4z6h030z49m/AABKuzZ1rEt1PmiylJrwTvuKa?dl=0

(4) “La corresponsabilidad del turismo comercial en la muerte de lobos en la Sierra de la Culebra” El Día de Zamora.

(5) “La Junta revoca la orden para regular los recursos de la Culebra dictada hace 24 años”. La Opinión de Zamora.

(6) “Los turistas critican la muerte de ciervos en la Culebra durante los avistamientos”. La Opinión de Zamora.

(7) “Denuncia ante la Guardia Civil al personal celador de caza de la Reserva de la Culebra”. El Día de Zamora.