Redacción •  Vivienda •  30/07/2021

Amenazan con el desalojo de 33 personas en la calle Manuel Arnau (Valencia) sin alternativa habitacional

El pasado lunes 26, la policía informó a los vecinos de Manuel Arnau 9 y 11 de que debían desalojar sus viviendas en 72 horas por riesgo de derrumbe. En ese momento se pusieron en contacto con el sindicato de barrio Construyendo Malilla. Desde entonces, hemos informado a Servicios Sociales, Ayuntamiento y Consellería (UAD) sobre la situación. Conseguimos que se aplazara el desalojo hasta el próximo lunes 2 de agosto. Sin embargo, las 33 personas distribuidas en 12 núcleos familiares en 8 viviendas, todavía no tienen ninguna alternativa habitacional real.

Amenazan con el desalojo de 33 personas en la calle Manuel Arnau (Valencia) sin alternativa habitacional

«Requerir a la propiedad que en el plazo de tres días proceda a la demolición controlada de la edificación por el peligro real que representa su permanencia en pie». Esta es la notificación que han recibido 50 vecinos del barrio de la Creu Coberta de València por parte del ayuntamiento, en la que se les notifica el desalojo de dos fincas en menos de tres días por amenaza de ruina inminente.

En el escrito se argumenta que se dan «las condiciones objetivas suficientes para estimar que su estado ha rebasado el umbral de seguridad representando un peligro real» por «una absoluta falta de mantenimiento y deterioro». Entre los desperfectos señalados por los técnicos, se encuentra la falta de mantenimiento generalizado en la fachada principal, carencia de canalón de recogida de agua, entrada de agua en el hueco de la escalera y en el interior de las viviendas o vigas partidas en la nave del patio.

Ante esta notificación, el sindicato de barrio Construyendo Malilla ha reclamado este viernes que el Ayuntamiento de València dote de viviendas de alquiler social al medio centenar de personas que el próximo lunes serán desalojadas de sus casas en la zona de la Creu Coberta por riesgo de derrumbe.

«No nos vale con ayudas a la manutención, porque se trata de gente con un nivel de exclusión y de precariedad muy fuerte» que hace «inviable» que puedan acceder a otras viviendas por su cuenta, ha explicado Jesús Cloquell, uno de los portavoces de Construyendo Malilla.

Ante este desalojo inminente, el sindicato realizó una protesta ayer ante las puertas de esta vivienda, que contó también con el apoyo de algunos vecinos de la zona. Algunos residentes y miembros de la asociación creen que detrás de este derrumbe «existe un interés económico». Una de las afectadas recalca que «en todos estos años, no hemos sufrido ningún peligro y ahora creen que en tres días se va a derrumbar el edificio».

El plazo para encontrar una alternativa habitacional concluye hoy. En algún momento del día se impedirá el acceso a las viviendas a los residentes.


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