Dossier informativo sobre las Elecciones parlamentarias del próximo 6 de diciembre en Venezuela

Venezuela avanza en democracia

Venezuela sigue avanzando en la consolidación de la democracia participativa y protagónica establecida en la Constitución, basada en su irrenunciable derecho a la independencia, a la libre autodeterminación, a la paz y a su soberanía que reside intransferiblemente en el pueblo, quien la ejerce a través del ejercicio del derecho al voto.

Las elecciones son parte de la normalidad de la vida democrática venezolana. En los últimos 20 años ha sido un ejercicio permanente que ha afianzado la confianza ciudadana en el proceso electoral.

El próximo 6 de diciembre se realizarán las elecciones parlamentarias que corresponden al período 2021-2026, tal como establece la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en su artículo 192 ⁱ¹ que fija en 5 años el período parlamentario.

La nueva Asamblea que resulte de esta elección debe instalarse el 5 de enero del 2021, como mandata la Constitución en el artículo 219 ². Lo que indica que debe ser electa al menos 30 días antes de esa fecha.

Signado por amplias garantías, el proceso registra la participación de 107 partidos políticos nacionales y regionales, con un total de 14 mil postulaciones.

El Consejo Nacional Electoral (CNE), cumpliendo con los principios de democracia, transparencia, celeridad y eficiencia, adquirió un nuevo modelo de máquina de votación, con tecnología de vanguardia, que garantiza un voto automatizado más rápido y confiable, que agilizará los procesos de elección, así como los de auditoría previa y posterior.

La confianza en el sistema electoral venezolano se basa en la existencia de diversas auditorias antes y después de las elecciones con la participación de todos los factores políticos participantes en las elecciones, quienes garantizan y certifican el funcionamiento y comportamiento del sistema automatizado de votación.

Asimismo, ante la situación especial causada por la pandemia del COVID-19, el Poder Electoral, en coordinación con otros órganos del Estado, desarrolla el Plan Estratégico de Bioseguridad, para proteger a la ciudadanía de este importante evento de la democracia venezolana.

Contexto: Bloqueo y boicot electoral

Las elecciones se realizarán en un contexto de país asediado por el criminal bloqueo que impone el gobierno de Estados Unidos, y de amenazas permanentes de intervención por parte de la principal potencia militar del mundo, que pese a sus reiterados fracasos, ha seguido empeñada en ejecutar desde 2002, su doctrina del “cambio de régimen”, apelando a intentos de golpes de Estado, financiación a la oposición terrorista, intentos de magnicidio, imposición de un gobierno paralelo, y más recientemente, el despliegue fallido de una invasión mercenaria.

El compromiso estrecho de actores de la derecha y la ultraderecha venezolana con esta agenda injerencista y golpista diseñada desde EEUU, se ha visto expresado también de manera reiterada en el intento de boicot a los procesos electorales, como única vía para deslegitimar a priori sus resultados.

Esta fórmula opera desde 2005 cuando sectores opositores se negaron a participar en las elecciones parlamentarias, pero su fracaso como estrategia política, ha apuntalado enormes fricciones y el resquebrajamiento de la unidad que una vez exhibiera el bloque opositor de derechas.

Pasados 10 años, van unidos en las elecciones parlamentarias de diciembre de 2015, en las que la oposición obtuvo una mayoría. Estos comicios se realizaron con las mismas normas y protocolos vigentes para este año 2020, y sin la necesidad de observación internacional alguna. Sus resultados fueron de inmediato reconocidos por el presidente de la República, Nicolás Maduro, y las fuerzas políticas que apoyan al Gobierno Bolivariano.

En estas elecciones un numeroso y mayoritario grupo de partidos de oposición se ha revelado contra el intento de sabotaje de las elecciones impulsada por otro sector de la oposición. De este modo se recupera la participación electoral y la gran pluralidad política existente en la sociedad venezolana.

Estas elecciones se constituyen en el verdadero diálogo político entre venezolanos que contribuirá, una vez instalada la Asamblea Nacional, al desarrollo social, político y económico de Venezuela, con la participación de todos los sectores políticos y los Poderes del Estado.

Estas elecciones también permitirán dejar en evidencia y aislados a aquellos sectores que se niegan al ejercicio de la política por las vías democráticas y constitucionales.

El Presidente Nicolás Maduro, ha hecho públicas las invitaciones a este proceso electoral a la Unión Europea, así como a distintos organismos multilaterales y a partidos y gobiernos del mundo para que se integren al acompañamiento internacional, con apego al respeto a la soberanía y a la libre autodeterminación de los pueblos.

Venezuela quiere paz

El gobierno bolivariano ha tenido como propósito fundamental profundizar el proceso de reconciliación nacional para que los asuntos políticos sean dirimidos por vías pacíficas y democráticas.

En este contexto, en este año de elecciones, el Presidente Nicolás Maduro decretó una Ley de Amnistía que permitió la libertad de 50 presos y el perdón para 60 dirigentes opositores que participaron activamente en los actos de terrorismo político (Guarimbas) que vivió el país entre los años 2014 y 2017, cuando se produjeron más de 40 muertes, incluyendo personas que fueron quemadas vivas en las calles, así como severos daños materiales a instituciones públicas y privadas, y un clima general de zozobra que atentó contra la paz ciudadana.

La oposición ante los procesos electorales

Un sector de la oposición venezolana, que goza de apoyo mediático y político de un grupo de gobiernos extranjeros que sigue la agenda injerencista de EEUU, se mantiene en la línea no democrática, al no participar ni en los procesos de diálogo, -donde sí han intervenido otros actores de oposición-, ni en las elecciones, pues persisten en buscar una fractura institucional con fines desestabilizadores.

Sin embargo, nuevamente se exhibe un resquebrajamiento de la unidad del bloque opositor, al deslindarse diversos partidos políticos que optan por la vía democrática, que rechazan abiertamente el boicot a las elecciones y la agenda de violencia política y de injerencia, que han venido siguiendo a rajatabla partidos como Primero Justicia y Voluntad Popular.

Unidos en el bloque denominado Alianza Democrática, los partidos de la oposición democrática que formaron parte de la Mesa de Diálogo y Paz con el gobierno bolivariano, participarán en estas elecciones. La conforman los históricos partidos Acción Democrática y Copei, además de El Cambio, Cambiemos y Avanzada Progresista.

El clímax de la división opositora se puso en evidencia más recientemente cuando el dirigente opositor Henrique Capriles, ex gobernador de Miranda y militante de Primero Justicia, expresó su deslinde de Juan Guaidó y su agenda abstencionista, al manifestar su intención de participar en las elecciones, apoyado por un grupo de diputados de la actual Asamblea Nacional y diversas agrupaciones civiles, incluida la patronal de empresarios. Más tarde, Capriles se retractó de participar, exigiendo la postergación del proceso para el mes de marzo del 2021, lo cual es imposible constitucionalmente, como se ha explicado antes.

Por su parte la Conferencia Episcopal Venezolana, hasta ahora alineada con la agenda de violencia política de la oposición golpista, también abogó por la participación electoral

Asamblea Nacional, institución clave para la democracia

La elección del 6 de diciembre es la oportunidad constitucional de renovar y restablecer el pleno funcionamiento de uno de los pilares del Estado, como es la Asamblea Nacional, foro político por excelencia, espacio de equilibrio, de pluralidad, diversidad y convivencia política.

El Parlamento es la vida del Estado democrático, social, de derecho y de justicia que mandata la Constitución y que le corresponde al pueblo elegir, confiando en que cumplirá su papel constitucional, como centro del debate político entre las más diversas fuerzas que reflejan la pluralidad del país, teniendo como fundamento la Constitución y el respeto a la soberanía nacional.

La nueva Asamblea Nacional, tendrá la misión estratégica de contribuir a la normalización de la vida institucional del país, a ser parte clave de la estabilidad política y sentar las bases legales para que Venezuela esté en mejores condiciones de enfrentar los grandes desafíos que impone el bloqueo, abriendo las puertas para la recuperación económica y la protección de los derechos del pueblo, vulnerados por la agresión internacional y sus cómplices internos.

Plan Estratégico de Bioseguridad

Las elecciones parlamentarias del próximo 6 de diciembre se llevarán a cabo en un contexto inédito: la pandemia Covid-19 que hasta la fecha ha infectado a más de 30 millones de personas y se ha cobrado más de un millón de vidas en el planeta.

En muchos países del mundo se han aplicado medidas preventivas de confinamiento y distanciamiento social. Sin embargo, esto no ha detenido la realización de muchos procesos electorales desde el inicio de la pandemia. La Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y las autoridades sanitarias de los países involucrados lograron que esos comicios se llevaran a buen término garantizando la salud de los votantes. El diseño y ejecución de planes de bioseguridad han sido fundamentales para conseguirlo.

El Consejo Nacional Electoral, conjuntamente con autoridades sanitarias del país está desarrollando el Plan Estratégico de Bioseguridad que contiene los parámetros de las herramientas biosanitarias y protocolos para garantizar que sus trabajadores y trabajadoras puedan cumplir con sus funciones en condiciones de seguridad y los electores y electoras tengan garantías plenas durante la participación en los diferentes eventos de este proceso electoral.

Parlamento más plural y representativo

• Más de 100 organizaciones con fines políticos nacionales, regionales y representantes de pueblos y comunidades indígenas son convocadas a participar en las elecciones. En total están participando en este proceso electoral 107 organizaciones con fines políticos, de las cuales 98 son de oposición: 30 organizaciones con fines políticos nacionales; 53 de ámbito regional; 6 organizaciones indígenas nacionales y 18 organizaciones indígenas regionales.

• El Tribunal Supremo de Justicia respondió satisfactoriamente a la demanda introducida por representantes de la oposición en la que solicitaron ampliar la representación proporcional, aumentando el número de cargos a elegir bajo la modalidad de lista, alcanzando una mejor representación de las organizaciones políticas más pequeñas.

• En atención a esa solicitud fue aprobada una fórmula en procura de un mayor equilibrio en el sistema electoral venezolano entre el voto lista y el voto nominal. Esto se traduce en una representación parlamentaria que reflejará un 52% para el sistema proporcional (144 diputados) y un 48% (133 diputados) para el sistema nominal. Se trata de una innovación que fortalece la proporcionalidad y el pluralismo político.

• Otra solicitud hecha por la oposición democrática ante el TSJ fue la de modificar el mecanismo de circunscripción especial mediante el cual se eligen los tres (3) diputados representantes de los pueblos indígenas.

• Se mantienen intactas las 87 circunscripciones electorales aprobadas para las elecciones de 2015 ganadas por la oposición.

• A fin de garantizar condiciones de paridad y alternabilidad de género, para esta elección se aplica la postulación de candidaturas en una fórmula de 50%, de no alcanzarse se optará por una proporción de un máximo de 60%-40%.

• Conforme al Registro Electoral Definitivo, están habilitadas para ejercer el voto un total de 20.710.421 personas. El Registro Electoral cuenta con 251.398 nuevos electores y electoras.

Garantías electorales

El sistema de garantías del proceso electoral venezolano se desarrolla en cuatro ejes:

1.- auditorías;

2.- seguridad del proceso;

3.- observación nacional ;

4.- acompañamiento internacional.

Auditorías

• En Venezuela, cada proceso electoral cuenta con un amplio proceso de auditorías, que se realizan antes, durante y después de cada evento comicial. Participan representantes de todos los partidos políticos. Las auditorías forman parte integral del sistema electoral y constituyen una garantía que brinda a electores y electoras, organizaciones con fines políticos y a la opinión pública nacional e internacional. Para la elección del 6D el cronograma contempla 16 auditorías que ya comenzó en el mes de julio, sigue en pleno desarrollo, hasta enero del 2021.

• Destaca especialmente la auditoría al 54% de las cajas de resguardo de las papeletas para contrastar con el resultado registrado por las máquinas de votación.

Seguridad del proceso: Tecnología Electoral auditable y confiable

El Sistema Automatizado de Votación venezolano está configurado para el efectivo ejercicio del derecho al sufragio y la expresión de la voluntad política de las electoras y los electores. Se afianzan las garantías electorales construidas a lo largo de 20 años, a través de la experiencia acumulada y evolución propia del sistema electoral.

El Poder Electoral, respondiendo a los avances de las nuevas tecnologías, ofrece para este proceso electoral el Sistema de la Máquina de Votación EC21, capaz de hacer del acto de votación una experiencia más sencilla para la electora y el elector.

La Nueva Solución Electoral facilita el cumplimiento de los principios de democracia, transparencia, celeridad y eficiencia, pues el nuevo modelo de Máquina de Votación modelo EC21 posee una Impresora Integrada caracterizada por la rapidez en la impresión del comprobante de voto.

La papeleta electoral o comprobante de voto es el instrumento que permite realizar la verificación ciudadana al finalizar el acto de votación. Esta verificación se realiza para constatar que los votos registrados y totalizados en la máquina electoral se corresponden con el número de comprobantes físicos impresos.

Los nuevos equipos electorales que serán utilizados el próximo 6D tienen una Batería Integrada de larga duración que permite mayor operatividad de la Máquina de Votación EC21 durante toda la jornada electoral.

Veeduría nacional e internacional: afianzando la confianza

• La confianza se basa en la posibilidad de auditar el funcionamiento y comportamiento del sistema automatizado de votación venezolano.

• Los partidos políticos cuentan con testigos en cada mesa de votación, quienes son acreditados para tal fin de manera automatizada, lo cual facilita a las Organizaciones con Fines Políticos hacer la inscripción de sus testigos sin ningún condicionamiento y participan en el proceso de auditoría previo y posterior al acto de votación.

• Veeduría nacional e internacional, existe como norma aprobada por el Consejo Nacional Electoral, basada en los principios de la soberanía y la autodeterminación y tiene como propósito el fortalecimiento de las cooperaciones internacionales, bien sean regionales o mundiales, que tengan como premisa el respeto a la democracia y la autodeterminación de los pueblos.

Para este proceso electoral, como para los anteriores, las distintas Organizaciones con Fines Políticos han sido consultadas con el objeto de cursar invitaciones a misiones técnicas, personalidades, instituciones y organizaciones no gubernamentales para la veeduría internacional, construyendo cada uno de los eslabones de la cadena de confianza cuando acreditan a sus testigos en cada uno de los centros de votación.

• Observadores nacionales y acompañantes internacionales: En atención a las competencias constitucionales del Poder Electoral, el CNE estableció desde el año 2004 un proceso de participación de organizaciones nacionales e internacionales con el fin de que acompañen los procesos eleccionarios, conozcan la dinámica, particularidades y características del sistema venezolano y aporten a su perfeccionamiento, en el marco constitucional, de respeto a la soberanía e independencia de la República Bolivariana de Venezuela. Se trata de los Programas de Acompañamiento Internacional Electoral y de Observación Nacional Electoral.

Así, el CNE ha incorporado al programa de acompañamiento internacional a un conjunto de organismos y mecanismos de integración y concertación, como lo son la Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), el Mercado Común del Sur (Mercosur), el Consejo de Expertos Electorales Latinoamericanos (CEELA), la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), la Alianza Bolivariana para los pueblos de nuestra América (ALBA) y el Parlamento del MERCOSUR (PARLASUR).

Convenios de cooperación: el programa de acompañamiento internacional ha contado con la participación de autoridades y técnicos de los países que han suscrito con el Poder Electoral venezolano convenios de cooperación e intercambio en materia de desarrollo tecnológico-electoral como lo son la Federación Rusa, India, Filipinas, la República de Mali y la República de Corea del Sur, así como de organismos electorales con intención de firmar convenios, como los países miembros de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEEAO) y la Unión Africana.

• En los últimos procesos electorales, se ha acreditado un promedio de 3 mil observadores nacionales, además del acompañamiento internacional.

• Acompañamiento de España: Cabe recordar que el ex presidente del gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero, fue acompañante internacional en las elecciones parlamentarias de diciembre de 2015, que ganó la oposición. En las presidenciales de abril de 2013 hubo también una importante delegación española, presidida por el expresidente del Congreso, José Bono, el catedrático y ex embajador español en Venezuela, Raúl Morodo, y los parlamentarios Daniel Serrano (PP), Antonio Trevín (PSOE) Antoni Picó (CiU), Enrique López (IU) y Aitor Esteban (PNV). Esta delegación suscribió una declaración conjunta ratificando la limpieza del proceso electoral y la fiabilidad de sus resultados.

• Los sectores opositores que apuestan por el boicot, la imposición de sanciones internacionales y las vías no democráticas, desde procesos electorales anteriores, han pedido expresamente a organismos multilaterales, como la ONU, a bloques regionales como la Unión Europea, que no participen de la observación internacional.

Antecedentes y Cronograma electoral en marcha

(3) Así ha ocurrido en otras ocasiones. En 2014, por ejemplo, ante el incumplimiento por parte de la Asamblea Nacional, el TSJ designó a la directiva del CNE que organizó las elecciones parlamentarias de 2015 en las que la oposición obtuvo amplia mayoría.

Fuentes recomendadas:

Consejo Nacional Electoral

http://www.cne.gob.ve/web/index.php

Ley Orgánica de Procesos Electorales

http://www4.cne.gob.ve/onpc/web/documentos/Leyes/Ley_Organica_de_los_Procesos_Electorales.pdf