Estrepitoso fracaso del Gobierno de Feijóo en plena celebración del Xacobeo: La UNESCO tumba la candidatura de la Ribeira Sacra a Patrimonio de la Humanidad
El Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (ICOMOS), dependiente de la organización internacional asesta un durísimo varapalo al Ejecutivo autonómico del PP afirmando que aunque el lugar está nominado como muestra de un «paisaje cultural sagrado» y un estilo de vida tradicional en territorio gallego este paisaje «ha cambiado significativamente» tras el desarrollo «a gran escala» de infraestructuras que han transformado «el entorno físico», lo que a juicio del organismo dificulta la valoración del supuesto «Valor Universal Excepcional» propuesto por la Dirección Xeral de Patrimonio Cultural de la Xunta, dependiente de la Consellería de Cultura, Educación e Universidade dirigida por Román Rodríguez González.
Si bien la UNESCO «agradece los detalles complementarios» aportados en el expediente alerta del impacto de «numerosas presas», canteras y parques eólicos en el entorno, elementos «que han modificado el paisaje ribereño» y que no guardan relación alguna con la histórica vertiente religiosa y monacal de la Ribeira Sacra, acechado además por la «despoblación, modernización y los consiguientes desafíos a la forma de vida tradicional». Por estos motivos, la organización recomienda que la Ribeira Sacra no sea incluída en la lista de Patrimonio Mundial.
El ICOMOS señala que «parece haber una tensión inherente entre la preservación del carácter sagrado del territorio y el acomodo de las necesidades contemporáneas de las comunidades e infraestructura moderna«, dos vertientes de las que el organismo «no está convencido de que las dos puedan reconciliarse de la manera sugerida» dado que «las presas y otras intervenciones similares» no pueden considerarse «un desarrollo lógico de un paisaje tradicional».
Además, alerta de que la gestión del territorio a nivel forestal -incluyendo la protección contra los incendios- e industrial está provocando «una continua despoblación», y que la presencia de «parques eólicos intrusivos» también es un factor a tener muy en cuenta.
De hecho, el ICOMOS manifiesta en su informe, al que ha podido acceder Tercera Información, que «observa con cierta preocupación el impacto visual de las turbinas eólicas» sobre la propuesta de Valor Universal Excepcional impulsada por la Xunta, dado que un parque eólico está ubicado en la zona de amortiguamiento propuesta y otros tres más «también son visibles».
UNA SITUACIÓN YA ADVERTIDA POR EL PORTAVOZ NACIONAL DE ANOVA ANTÓN SÁNCHEZ
La situación que ahora refleja la UNESCO ya fue advertida en sede parlamentaria por el portavoz nacional de Anova Antón Sánchez, que en ocubre de 2019 llevó a la Cámara gallega una Proposición No de Ley (PNL) instando a la paralización de los parques eólicos del gigante energético Endesa en el entorno de la Ribeira Sacra en la localidad lucense de Paradela.
Antón Sánchez en una visita a la población afectada por los parques eólicos de Paradela / Anova
Durante su intervención en la Comisión 2ª de Ordenación Territorial, Obras Públicas, Medio Ambiente e Servizos, el responsable político hizo referencia al «modelo de expolio con cierto aire colonial» del Ejecutivo de la Xunta, beneficiando a las grandes empresas a costa del bien común para luego terminar sus responsables políticos en puestos directivos de eléctricas como Endesa.
Sánchez recordó entonces que «como ya es norma» en el modelo eólico impulsado a nivel gallego el Gobierno de Alberto Núñez Feijóo «tuvo poca consideración» con los impactos ambientales, patrimoniales y sociales de estos parques eólicos y que el Ejecutivo autonómico «parece olvidar que la incapacidad de presentar argumentos convincentes que justifiquen el posible Valor Universal Excepcional es uno de los principales motivos de fracaso de las propuestas de las candidaturas a Patrimonio de la Humanidad», preguntándose «cómo es posible defender el valor de la Ribeira Sacra por parte de la Xunta autorizando el deterioro significativo de sus paisajes e imponiendo aerogeneradores a unos cientos de metros de las viviendas más próximas«.
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