Manifestación en defensa del Centro de Salud de Abrantes (Carabanchel, Madrid)

El nuevo año nos ha traído una buena noticia frente tantas adversidades que estamos viviendo: la vacuna ya está en el Estrado español y ya se está suministrando al personal sanitario, personas ancianas y al personal de las residencias. La luz al final del túnel está cada vez más cerca, y es motivo de alivio que la vacuna ya esté aquí.

Sin embargo, a pesar de esa alegría y esa buena noticia, nos encontramos con la «sorpresa» de que Ayuso no está administrando al mismo nivel ni con la misma rapidez que otras autonomías. Asturias ha conseguido suministrar el 100% de las vacunas que se les había entregado, mientras que la Comunidad de Madrid, hace solo un par de semanas, no llegaba ni al 50% de las vacunas suministradas. Estamos hablando de la salud de muchísimos trabajadores y trabajadoras del sector sanitario y de personas de la tercera edad, aun cuando se exige rapidez para el suministro de la segunda vacuna necesaria para alcanzar la inmunidad. El gobierno del PP madrileño, no contento con desvalijar nuestra sanidad pública, no administra las vacunas como debería ser, aun cuando otras regiones cuyos gobiernos también son del PP lo están haciendo.

Por desgracia, no es lo único que ha tenido que sufrir Madrid en las últimas semanas. Hace dos semanas hemos vivido una nevada histórica que, si bien ha dejado bonitas estampas de los parque, de nuestra ciudad y nuestro barrio, también ha traído muchísimos problemas: calles congeladas y resbaladizas, acumulaciones de nieve, árboles caídos, acumulación de la suciedad, ratas… No hablamos de simples problemas de movilidad, que también son graves, sino de problemas que juegan con nuestra salud e integridad, y en algunos casos podía suponer la muerte. No estábamos preparados para la nevada, era obvio, pero desde el gobierno no se ha intentado nada por mitigar los efectos de la nevada. Hoy por hoy, aún siguen acumulaciones de nieve, la basura se amontona y no se han recogido muchas ramas y árboles caídos. El Madrid obrero y trabajador ha sido, una vez más, abandonado por el gobierno del PP.

Y todos esos problemas que ha traído Filomena ha hecho que, debido a los accidentes, nuestros centros de salud se hayan llenado de pacientes con heridas, contusiones y huesos rotos. Esto solo consigue que se sature aún más nuestra sanidad, que está hasta arriba de pacientes debido a la tercera ola de la pandemia, la cual no está siendo mitigada por el gobierno, cuyas acciones son mínimas, por no decir inexistentes. Si se hubiera invertido en sanidad, si no se hubiera desvalijado nuestra sanidad durante años y años de gobierno liberal, no se habría llegado a esta situación tan grave.

Los problemas en el Centro de Salud de Abrantes aún continúan, y se han agravado con Filomena. Seguimos con tres personas para atender a una población de 30,000 personas, y solo están por la mañana. A su vez, tienen que contestar al teléfono y gestionar las citas. Una auténtica explotación que afecta también a los pacientes, ya que en estas circunstancias no pueden ser atendidos como debería ser.

No sabemos hasta cuándo podremos seguir así. No sabemos cuándo se cumplirá con los objetivos de la vacunación. No sabemos qué pasará si esta situación no mejora. Por ello, llamamos a todo el vecindario de Carabanchel a que se una en esta concentración que terminará con una manifestación por las calles del barrio, como apoyo a nuestros vecinos y vecinas. La solidaridad entre trabajador@s es la base de toda lucha, ya que solo el pueblo salva al pueblo.

Luchamos por una sanidad pública universal, gratuita y de calidad, no sólo para el barrio, sino para toda la Comunidad de Madrid. ¡No nos mires y únete! ¡Por ti, por el barrio!