El diputado autonómico andaluz Ismael Sánchez denuncia la crítica situación del área de Salud Mental del Hospital de Osuna

El diputado autonómico de Unidas Podemos por la provincia de Sevilla denuncia que, desde verano, el número de facultativos con los que contaba el Hospital de la Merced de Osuna en materia de salud mental ha pasado de doce a tres, estando estas bajas motivadas por las pésimas condiciones de trabajo a la que se exponen los profesionales sanitarios.

Dada la importancia de la Salud Mental con una demanda en ascenso motivada por la pandemia, desde Unidas Podemos no entienden que no se haya actuado antes, ya que desde el 30 de noviembre que se cerró la planta de hospitalización de Salud Mental únicamente cuentan con 3 psiquiatras.

El consejero de Salud aseguraba ayer jueves 3 de febrero que la planta de hospitalización de Salud Mental de Osuna está ya abierta, pero Sánchez asegura que esta no podrá abrirse con normalidad ya que “únicamente hay 3 profesionales en activo trabajando por turnos, por lo que no pueden encargarse ellos solos de la apertura de la planta durante los siete días de la semana”. Por esta razón, aseguran que durante el fin de semana la unidad de salud mental de dicho hospital quedará cerrada por la imposibilidad de cubrir dichos turnos por el personal existente, ya que supondría una aún mayor carga de trabajo.

Además, aseguran que el psiquiatra que se quede en su unidad debe dar asistencia en pacientes en el Hospital de Día, las interconsultas que se generan de pacientes de otras patología ingresados en el hospital, las urgencias que no son derivadas a Sevilla, así como al resto de pacientes. Por esto, desde Unidas Podemos aseguran que “esta situación no solo provoca un perjuicio en los trabajadores por sobrecarga en sus funciones, sino que también se les fuerza a asumir funciones que no deberían”.

Por otro lado, denuncian una continuada agresión a la sanidad pública que conlleva la reducción del número de camas, el aumento de la lista de espera, la anulación de citas para consultas, la saturación de las urgencias y demás medidas que afectan a los hospitales comarcales y a la sanidad pública en general.

El diputado cree que se trata de una “cuestión de modelo”, ya que “la Junta está llevando a cabo una política de desmantelamiento de lo público para justificar la privatización de nuestra sanidad”. Además, asegura que “mientras el consejero Aguirre se dedica a inaugurar hospitales privados, el gobierno de la Junta cerraba el año con un superávit de 2.715 millones de euros”.