Redacción •  Internacional •  26/09/2022

La Marcha a Bruselas denunciará las muertes en las fronteras y reivindicará derechos para las personas migrantes

  • Saldrá el lunes 26 de Bilbao y culminará el sábado 1 de octubre en Bruselas con una protesta frente al Parlamento Europeo.
  • Paralelamente, el viernes 30 y el sábado 1 la capital belga acogerá la Cumbre de los Pueblos en la que se darán cita más de 130 organizaciones.
La Marcha a Bruselas denunciará las muertes en las fronteras y reivindicará derechos para las personas migrantes

Más de 130 organizaciones europeas y de los países de origen de las personas migrantes organizan una Marcha a Bruselas bajo el lema «¡Derechos, no muertes!» en demanda del cumplimiento del derecho internacional de los derechos humanos en las fronteras y la regularización administrativa de las personas que viven y trabajan en Europa.

Más de 50.000 personas han perdido la vida desde 1993. Las fronteras europeas están provocando muerte como consecuencia de las políticas migratorias que llevan a cabo la Unión Europea y los gobiernos europeos. La ausencia de vías legales y seguras, los acuerdos de externalización y la progresiva militarización de las fronteras causan víctimas. La reciente muerte de una joven subsahariana, tiroteada por la gendarmería marroquí cuando se disponía a viajar en patera hacia las islas Canarias desde la playa de Akhfennir en Tarfaya, y las, al menos, 37 personas que murieron aplastadas y asfixiadas hace apenas dos meses en la valla de Melilla debido a la violencia con la que fueron reprimidas, son dramáticos ejemplos de ello.

La desprotección institucional y la falta de un marco que atienda a la dimensión transnacional ocasiona vulneraciones de derechos esenciales que afectan a la dignidad humana, los derechos post mortem de quienes han fallecido y el derecho a conocer la verdad que ampara a las familias. Esta inacción y opacidad es una forma de castigo o tortura hacia las familias y de deshumanización hacia las personas que deciden, o no tienen más remedio que, emprender un proceso migratorio.

Al mismo tiempo, las personas que logran atravesar estas fronteras trabajan y viven durante muchos años sin papeles, sin derechos. La situación de irregularidad comporta una condena a explotación laboral, invisibilidad frente a las instituciones, desprotección legal o exclusión de servicios públicos como la educación y la sanidad.

Junto a ello, la Unión Europea también participa de la responsabilidad en los desplazamientos forzados. Los tratados de comercio e inversiones con los gobiernos de origen, la fabricación y el comercio de armas y la desregulación de las prácticas extractivistas y neocoloniales de las empresas transnacionales son causa de que miles de personas sean expulsadas de sus modos de vida y sus comunidades de origen.

Marcha, protesta y Cumbre

Ante esta situación de destrucción de los derechos humanos, cientos de organizaciones de la sociedad civil convocan una acción el sábado 1 de octubre, a las 15:00 horas, en la plaza de Luxemburgo de Bruselas, frente al Parlamento Europeo, para pedir a las instituciones y a los gobiernos europeos medidas concretas que garanticen los derechos humanos de las personas migrantes. Durante el fin de semana, una delegación se reunirá con un grupo de europarlamentarias y europarlamentarios para trasladarles sus reivindicaciones.

El programa de acciones incluye un encuentro con asociaciones y colectivos de personas sin papeles y apoyo a personas migrantes de Bélgica, quienes el año pasado mantuvieron una dura huelga de hambre para reivindicar la regularización.

Por último, en articulación con la movilización de la Marcha a Bruselas, se desarrollará la Cumbre de los Pueblos como un espacio de intercambio entre diversos movimientos y organizaciones comprometidas con los derechos de las personas exiliadas, con el fin de construir colectivamente propuestas concretas de incidencia y movilizaciones a escala transnacional.


migraciones /