Rafael Fenoy Rico •  Opinión •  24/12/2025

El Centro de Mayores la Piñera, con la Iglesia ha topado

Que en la barriada de La Piñera hace años se precisa que funcione un Centro de Mayores, es una realidad. Que se lleva planeando, anunciando, publicitando que se construirá, en el terreno colindante con la parroquia Espíritu Santo, una residencia y un centro de día para Mayores; es un hecho. 

Las hemerotecas sirven para confirmar este extremo: “Algeciras tendrá otro centro de mayores en La Piñera. El Obispado cederá el suelo junto a la iglesia del Espíritu Santo”. Esto se publicaba un 25 de marzo de 2022. La noticia de las declaraciones del alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, se enmarcaba “durante el transcurso de la entrega del título de Hijo Adoptivo al padre Pedro de La Piñera”. Según las declaraciones del alcalde “el Ayuntamiento había alcanzado un acuerdo con el Obispado de Cádiz para la cesión de una parcela junto a la parroquia de la barriada que será destinada a la construcción de un centro de día para mayores.” A cambio el edil se comprometía a la “cesión de una parcela de su propiedad, sin precisar en qué lugar de la ciudad, para la construcción de una iglesia”. Según las declaraciones la Junta de Andalucía estaba al tanto del asunto y daría el “impulso definitivo al proyecto”. Sin embargo la verdad fue otra. El consistorio solicita su cesión gratuita para construir un centro de mayores, pero la diócesis rechaza esta opción y exige una contraprestación. “La falta de acuerdo mantiene bloqueado un proyecto clave para uno de los barrios más vulnerables de la ciudad.” Pasa el tiempo y la Federación de asociaciones de vecinos y ciudadanas de Algeciras (FAPACSA) recuerda en 2024 al obispo Rafael Zornoza el mencionado acuerdo. Ante el silencio del obispo, dirigió escrito al Vaticano. La respuesta recibida era que el asunto había que tratarlo en el obispado de Cádiz. 

Pasan los meses, y el Papa León XIV, aceptando la renuncia presentada por D. Rafael Zornoza, nombró el 22 de noviembre de 2025, como administrador apostólico de la sede de Cádiz a D. Ramón Darío Valdivia Giménez. La federación de movimientos vecinales y ciudadanos, ante el cambio de responsable de la diócesis, volvió a solicitar se concretará lo acordado, en beneficio de las personas mayores no sólo de la Piñera sino de las barriadas colindantes que carecen de ese imprescindible recurso en esa etapa de la vida. 

Se recibe la respuesta, en estos días, que D. Ramón Daría le encomienda a Dña. M. Carmen Lobato Herrero, anteriormente asesora jurídica del Obispado y desde 2020 Ecónoma Diocesana de la Diócesis de Cádiz y Ceuta. La ecónoma dice lamentar “no poder acceder a su solicitud” ¿Por qué?  Porque dice que “el terreno en cuestión es propiedad de la Iglesia Diocesana, forma parte de la Parroquia de Espíritu Santo y por tanto es un bien que conforme al Derecho Canónico tiene la consideración de Bien Eclesiástico.” Hasta aquí eso es conocido. Lo que sigue ya es algo difícil de interpretar. Dice la ecónoma que la parcela esta “sujeta a un régimen jurídico canónico especial”. Sin duda existen reglas sobre cómo se administran, dividen o destinan los bienes de la Iglesia, especialmente en casos de fusión o extinción de entidades. Sigue exponiendo que se “exige el cumplimiento de unos requisitos para la válida enajenación”.  ¿Cuáles son esos requisitos? En el régimen canónico especial, para la válida enajenación de bienes eclesiásticos (bienes inmuebles o bienes muebles de valor considerable), se exige una causa justa (necesidad, utilidad, caridad, etc.), una tasación pericial por escrito y, lo más importante, una licencia o permiso de la autoridad eclesiástica competente (Ordinario del lugar, Santa Sede, etc.) según el valor y la naturaleza del bien, con base en los cánones 1292 y siguientes del Código de Derecho Canónico, para asegurar su permanencia en el patrimonio eclesiástico y evitar un perjuicio a la Iglesia. ¿En qué se perjudica la Iglesia al ceder un terreno baldío, que incluso la parroquia propone se ceda para una obra social de innegable necesidad? ¿Es que ofrecer el terreno (que no fue comprado por la iglesia) para este fin, no es una causa justa? 

La ecónoma traslada que la facultad de consentir en la cesión del terreno la tienen “determinados órganos diocesanos… no habiendo obtenido dicho consentimiento”. Tampoco informa de cuáles son esos órganos ni los motivos para la negativa. Sería muy conveniente que se informara de las deliberaciones de órganos diocesanos, para poder entender los fundamentos de su “no consentimiento”. Es difícil pensar que hayan dictaminado que la causa No es Justa. La clave puede deducirse en cómo finaliza el escrito recordando que “hay otras parcelas, incluso de propiedad municipal, igualmente idóneas para el cumplimiento de la finalidad pretendida, siendo responsabilidad municipal la cesión de suelo para este tipo de proyectos”. Y cómo se supone que el Obispado de Cádiz debe ser el primer interesado en ayudar a las personas mayores de la Piñera ¿Estaría dispuesto a confrontar con el Alcalde de la ciudad, recordándole su “responsabilidad” de ceder suelo y construir el centro de Mayores? 

La ecónoma, no obstante, afirma que los bienes de la Iglesia Católicas, especialmente los Eclesiásticos, están afectos al cumplimiento de los fines propios que son el culto, la pastoral y la actividad caritativa. En esta ocasión podría pensarse que el orden de los factores si altera el producto. ¿Qué hubiera hecho Jesús de Nazaret? El amor lo primero, la caridad. La pastoral, después,  para que todas las personas, tomando ejemplo,  hagan lo mismo. Y por último el culto, para celebrar que se hace real la fraternidad. 

¿Podrían estar confundidos quienes solicitaron al Obispado una acción caritativa hacia las personas mayores de la zona?  Para prestar una  “atención social de los más desfavorecidos”. Las numerosas personas mayores que no cuentan con una residencia y centro de día de Mayores ¿no merecen esa atención? A siete días de la conmemoración del nacimiento de una buena nueva, sería oportuno dar ejemplo y aportar algo de esperanza a estas personas mayores de estas barriadas tan necesitadas. Por sus obras los conoceréis.(Mateo 7:16-20)


Opinión /