Ramaris Vásquez •  Opinión •  23/01/2022

DD.HH. Niñ@s y adolescentes: Barbarie y silencio Externo

DD.HH. Niñ@s y adolescentes: Barbarie y silencio Externo

El abuso sexual sigue minando la vida de millones de niñ@s y adolescentes, junto a otros tipos de abusos y maltratos, que ya alcanzan a la mitad de la infancia del planeta. Así lo alertó  la Organización Mundial de la Salud  (OMS) en su “Informe sobre la situación mundial de la prevención de la violencia contra los niños 2020”: “1 de cada 2 niños y niñas  de entre 2 y 17 años sufre algún tipo de violencia cada año”. (p. 1). (1).

El referido informe, sostiene que “cerca de 300 millones de niños de dos a cuatro años en el mundo a menudo se ven sometidos a castigos violentos a manos de sus cuidadores” y “120 millones de niñas han tenido algún tipo de contacto sexual contra su voluntad antes de cumplir los 20 años”. (p.1). Es una barbarie sustentada en el silencio y expandida por doquier. (1)

Ahora, ¿qué es maltrato infantil? De acuerdo a la Organización Panamericana de la Salud (OPS)  son “los abusos o la desatención  de que son objeto los menores de 18 años, e incluye todos los tipos de maltrato físico o psicológico, abuso sexual, desatención, negligencia y explotación comercial o de otro tipo que causen o puedan causar un daño a la salud, desarrollo o dignidad del niño, o poner en peligro su supervivencia, en el contexto de una relación de responsabilidad, confianza o poder”. (2)

A esto, la OPS añade como maltrato infantil “la exposición a la violencia de pareja”. Es decir, cuando el niñ@ o adolescente, tiene que presenciar los bochornosos  y angustiantes episodios de discusiones, insultos, golpes, patadas, mordiscos, gritos, agresiones con objetos punzantes y otros horrores que  sus padres, representantes o responsables escenifican en su presencia o en la habitación de al lado, mientras ell@s tiemblan de terror. Si es su caso, busque ayuda.(2)

La multilateral advierte que, los maltratos pueden tener secuelas psicológicas  tales como “problemas conductuales, físicos y mentales”, materializados en: “actos de violencia (como víctima o perpetradores) depresión; consumo de tabaco; obesidad; comportamientos sexuales de alto riesgo; embarazos no deseados; consumo indebido de alcohol y drogas”. Si su hij@ presenta alguna secuela, intente recordar qué pasó. Si no, prevenga: revise qué pasa en su vida.(2)

En el marco de la pandemia por Covid 19, los abusos a la infancia se presentan también en plataformas digitales. De acuerdo al Informe CEPAL – UNICEF – Oficina de la Representante Especial del Secretario General sobre la Violencia contra los Niños (2020), “la violencia en línea no está separada de la que se produce en entornos reales (OMS, 2020a)” y advierte  que “en el caso de la violencia sexual en línea, puede afectar también a niñas, niños y adolescentes que ni siquiera tienen acceso a un dispositivo electrónico”, (p.3) (3).

En este documento, Unicef recuerda que  “hoy en día es común que personas adultas tengan acceso a cámaras digitales, portátiles o celulares que facilitan el registro de actividad sexual con niñas, niños y adolescentes, así como su distribución a través de canales digitales desde sus propios hogares”. (ECPAT Internacional, 2020b). (p.3). (3).

Es decir, si usted es padre, madre, representante o responsable consciente de un@ niñ@ o adolescente, tiene que prepararse y prepararl@s para enfrentar “sexting, grooming, ciberbulling”  y otros ataques a su estabilidad emocional, recibidos a través de las mal llamadas “redes sociales”.
No obstante, la Unicef, en su documento “En mi mente, estado mundial de la Infancia 2021”,  advirtió que  la pandemia por Covid 19, “ha planteado graves preocupaciones sobre la salud mental de los niños y niñas y las familias durante los confinamientos, y ha demostrado con suma claridad que lo que sucede en el resto del mundo puede afectar a nuestro mundo interior”. (p.2). (4).

Finalmente, el trato dado a la infancia calibra el estado moral de la humanidad. Así lo refleja la historia. Durante la industrialización, la mortandad de la mano trabajadora infantil obligó a legislar al respecto. Luego, la mendicidad, la prostitución infantil y explotación de los hij@s, en diferentes formas por parte de los padres, obligó a más medidas. (5)

Y tras la I y la II guerra mundial, sus horrores obligaron a que se considerara la infancia en los Pactos que integran la Carta de Naciones. El siglo pasado hubo un cambio de paradigma al hacer a niñ@s y adolescentes sujetos de derecho, con la Convención Internacional de los Derechos del Niño (1989) -que recoge el compromiso de protegerles- y ha sido ratificado por 196 Estados parte de la Comunidad de Naciones, exceptuando un país (Estados Unidos), según informara ONU Noticias. (5). (6).

Es momento de que ningún Estado “se quede atrás” en reconocer los derechos a niñ@s y adolescentes y crear condiciones para prevenir la violencia contra ellos. Hay que acabar con la barbarie y el silencio. La infancia humana merece dignidad.

Referencias:

1. https://www.who.int/es/teams/social-determinants-of-health/violence-prevention/global-status-report-on-violence-against-children-2020

2. https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/violence-against-children

3. https://www.cepal.org/es/publicaciones/46485-violencia-ninas-ninos-adolescentes-tiempos-covid-19

4. https://www.unicef.org/es/informes/estado-mundial-de-la-infancia-2021

5. https://www.unicef.org/es/convencion-derechos-nino/historia

6. https://news.un.org/es/story/2019/09/1462802


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