«Lamentable Arrimadas»

Montar un pollo donde sea, como sea y con quien sea. Esa parece ser la consigna del brazo político naranja del terrorismo financiero de la banda Ibex35.

 

Solo añadiré una cosa mas sobre esta impresentable de nombre Inés Arrimadas:
 

Observen por favor las fotos del incidente,  observen su sonrisa de hiena y compárenla con las, a pesar de todo comprensibles, caras desencajadas de sus compañeros.
 

Probablemente sus compañeros hayan tenido que acatar la orden inapelable de pactar con la ultraderecha homofóba emitida por ella y por el jefe máximo del chiringuito naranja, Don Alberto Carlos Rivera, a la sazón el otro grandísimo impresentable, y me aventuro a decir que  probablemente estos segundones de la dirección de Cs estén sintiendo de verdad tener que tragarse el más que merecido reproche público que, créanme, doy fe de que en privado algunos lo aceptan como merecido.
 

Pero ella…ay ella…ella está felicísima y muy satisfecha de su hazaña de reventar el Orgullo! Queda así más que demostrado que el Orgullo le importa a Arrimadas una verdadera mierda solo superada por lo poco y nada que le importan los derechos de las personas LGTBIQ y menos aun la dignidad de las pioneras del activismo arcoiris en España, a quienes se homenajeaba en la manifestación que esta señora reventó deliberadamente y que fueron víctimas de ese franquismo que Cs jamás de los jamases ha condenado ni condenará y que probablemente para ella, en su barriobajero vocabulario deducido de su barriobajero comportamiento no serán más que piojosos podemitas mugrosos aunque cuando sufrieran cárcel por reivindicar derechos que fueron también para Arriadas, a Podemos le faltara todavía medio siglo para nacer. En el universo imaginario de Inés y Albert todo es posible, al igual que en ese «matrix» al que acusaban de crear a los independentistas catalanes provocando toneladas de vergüenza ajena.
 

Lamentable. Todo esto es muy lamentable. Inés Arrimadas es muy lamentable.