Ramaris Vásquez •  Opinión •  11/04/2022

DD.HH. Derecho a la paz: Una necesidad sentida (II)

DD.HH. Derecho a la paz: Una necesidad sentida (II)
La paz, como derecho humano de 3era generación es una necesidad sentida. El conflicto Ucrania-Rusia no es retórica. La conminación a la búsqueda de resoluciones pacíficas debe constituir un enfoque prioritario en la diseminación de información, de manera concienciada. El principio de arreglo de diferencias de los Estados que integran la Comunidad de Naciones, debe constituir una impronta, frente a los peligros nucleares a los que está expuesta la humanidad.
Tal como lo contempla el capítulo IV, artículo 33 de la Carta de Naciones Unidas, numeral I: “Las partes en una controversia cuya continuación sea susceptible de poner en peligro el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales tratarán de buscarle solución, ante todo, mediante la negociación, la investigación, la mediación, la conciliación, el arbitraje, el arreglo judicial, el recurso a organismos o acuerdos regionales u otros medios pacíficos de su elección”. (s/n). (1).
Si usted es un ser humano y vive en el planeta tierra, y sabe lo que son las armas nucleares, tome partido por su derecho elemental a la vida, a la alimentación y en términos generales, a la dignidad humana. (2).
Frente a los actuales conflictos en el mundo, hay que considerar que éstos, al igual que las discriminaciones, aberraciones y abusos contra los seres humanos, nacen primero en la mente de las personas en forma de ideología. Ese combustible ayudó a encender la I guerra mundial e inflamó la II. ¿Busca abrasar una tercera guerra mundial?
Ya el secretario General de la ONU, Antonio Guterres–según ONU Noticias del 16 de enero de  2019- lo había advertido frente al pleno de representantes de los Estados de la Comunidad de Naciones: “Existe la necesidad de dar una “batalla ideológica contra los valores de la ONU”. Ese 2019 advirtió que “hoy, ideas nocivas que recuerdan al pasado están logrando popularizarse y saltar al centro del debate político (…) no olvidemos las lecciones de los años 30. Nunca puede haber sitio para el discurso del odio, para la intolerancia o la xenofobia”. (3).
De acuerdo a esta fuente, Guterres defendió que “Naciones Unidas y los Gobiernos tienen que comprender las ansiedades, los miedos y las preocupaciones de la gente, si quieren defender los valores que defiende la organización”. Es decir, entender, tal como lo plantea  Valencia, C. (2011), en su artículo científico “Del análisis crítico del discurso y las ideologías”, que estos credos “se formulan, adquieren y reproducen por medio del discurso”. (3). (4).
El investigador subraya que la ideología tiene dos significados, uno débil y otro fuerte, que es el que representa un peligro: “el significado fuerte de ideología, en sus variadas vertientes, sostiene que es una creencia falsa. La ideología es algo que deforma la realidad. Por tanto es un engaño para la conciencia de los sujetos y a la vez, está al servicio de la legitimación de relaciones de dominación ejercidas por una clase dominante”. (2011, s/n). (4).
Quizás por ello, Valencia, C., concluye que “es necesario problematizar y poner en evidencia los mecanismos discursivamente estratégicos de los que se vale el exceso de poder para perpetuar situaciones de injusticia, haciendo una lectura del discurso de las élites, del discurso mediático, del discurso institucional y del discurso de campa y propaganda política”. (s/n).(4).
El estudioso recomienda indagar, entre diversos aspectos, algunos tales como: “¿Quiénes hablan o escriben? ¿A quiénes representan para decir lo que dicen? ¿Qué dicen? ¿Qué posición sustentan, si es que la posición se sustenta, a favor de quienes lo hacen o quienes están a su favor? ¿Qué motivos tienen para hablar o escribir? ¿Se pueden hallar argumentos en sus discursos o sus discursos dan argumentos? ¿Cuáles? (…) ¿a quiénes se dirigen estas personas?”. (4).
En el marco de mecanismos de resolución de conflictos, Amado, L. (2015) al citar a Peña (1999) y otros autores, deja claro que el conflicto se comporta como un fenómeno social, caracterizado por generarse, producto de la repetición de un patrón de conducta, de alto nivel de complejidad puesto que subyace dentro de sociedades, personas o fenómenos distintos; y que el modo en que es “gerenciado” puede traer secuelas positivas o negativas”. ¿Qué le conviene a los pueblos? (5)
Finalmente, como reflexionara Cepeda, F. (2003) en el artículo científico “La ONU y la “guerra en Iraq” “enmarcar la política en unos postulados éticos es un ideal que jamás debe relegarse. La guerra es una monstruosidad. Es una falla descomunal de la capacidad del ser humano para resolver sus desacuerdos. Por ello hablar de “guerra justa” es algo que, en principio, choca con los más altos ideales de la humanidad. Pero como en el mundo estamos, esa  expresión parece sintetizar lo que tenemos de racionales e irracionales, de bondad y maldad, humanismo y crueldad”. (s/n). (6).

Referencias
1.    https://www.un.org/es/about-us/un-charter
2.    https://elordenmundial.com/mapas-y-graficos/armas-nucleares-mundo/
3.    https://www.efe.com/efe/america/mundo/guterres-alerta-de-una-batalla-ideologica-contra-los-valores-la-onu/20000012-3869504
4.    https://revistas.uniandes.edu.co › pdf
5.    https://revistas.unal.edu.co/index.php/formayfuncion/article/view/38475
6. Amado, Lucy (2015). “Resolución de Conflictos. Medios alternos para transformar    disputas de manera pacífica”. Autor. Caracas Pp 13-29.

*Ramaris Vásquez, periodista especializada en derechos humanos.

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