Trump no lucha contra el narcotráfico, lo usa como disculpa para atacar a Venezuela

Trump dice que su falsa guerra contra el narcotráfico puede usarse contra cualquiera, ahora la usan contra Venezuela, pero no faltan las amenazas a Mexico y Colombia, o las acusaciones contra China por el tráfico de FENTANILO, no conocen el sentido del ridículo, tampoco el sentido común en el gobierno norteamericano.

Los argumentos de Donald Trump son una burla y un insulto a la inteligencia, como si los EEUU no fuesen fabricantes de FENTANILO y de otras drogas sintéticas, además de ser el mayor mercado de la droga y los mayores consumidores del planeta de todo tipo de sustancias.

Según el cuento inventado por Trump y Marco Rubio el FENTANILO iría de China a Venezuela, allí subirían la droga a lanchas para llevarlo a los EEUU, ¿se creen que todos somos imbéciles?, ¿con que motivo el FENTANILO llegaría de China a Venezuela?, ¿cuantas veces tendría que repostar combustible una de esas lanchas para llegar a los EEUU desde Venezuela?.

El cártel de los Soles no existe, es un invento, otra mentira como las armas de destrucción masiva en Iraq. Donald Trump quiere acabar con Maduro, pero no porque sea un terrorista o un narcotraficante, sino por defender la independencia y la soberanía de Venezuela. 

Trump apoya a un lugarteniente de Osama Bim Laden en Siria, ha hecho presidente a un terrorista de Al Qaeda que tenía un precio puesto por su cabeza por los EEUU, apoya a un expresidente hondureño que estaba condenado en EEUU por narcotráfico, lo ha indultado mientras acusa al presidente de Venezuela de narcotráfico, Trump apoya también a Álvaro Uribe el expresidente colombiano de los paramilitares y los falsos positivos en el que fue durante su mandato el narcoestado colombiano donde los EEUU tienen varias bases militares.

Cuantas más preguntas nos hagamos menos respuestas tendremos, y más estúpida e hipócrita suena la historia de la falsa lucha contra el tráfico de drogas del gobierno Trump, usada para poder intervenir en otros países saltándose la legalidad internacional con la excusa de combatir el tráfico de drogas.

EEUU no solo está ejecutando extrajudicialmente a inocentes en el Caribe, también los remata en caso de que sobrevivan al ataque, lo último que quieren es que puedan dar su versión o contar la verdad, los muertos no hablan.

La legalidad internacional es algo que no han respetado nunca, tampoco a Trump le interesan los derechos humanos, no tiene capacidad de empatía y como buen psicópata no da valor a la vida humana.

Tanto el pueblo norteamericano como sus élites y su clase política han normalizado el consumo de drogas, el FENTANILO es la droga del pobre y la cocaína la droga del rico, la hipocresía del gobierno de Donald Trump no conoce límites, como su desvergüenza.

Cuando los EEUU controlaban Afganistán aumentaron las plantaciones de amapolas para la fabricación de opio, la DEA, la CIA, los distintos gobiernos norteamericanos no luchaban contra la droga, el de Trump tampoco, simplemente la gestionan y controlan el mercado, es su gran negocio y en estos momentos su disculpa para tratar de quedarse con el petróleo de Venezuela

a cualquier precio.

En Ucrania los EEUU estaban dispuestos a luchar hasta el último ucraniano para ahora repartirse el pastel con Rusia, y ahora en Venezuela están dispuestos a luchar hasta el último venezolano. 

Lo que tendrían que tener en cuenta los vendepatrias que piden la intervención norteamericana es que lo que se dice de las bombas inteligentes es un falso eufemismo. Ninguna bomba, ningún misil, ninguna bala sabrá diferenciar entre chavistas y opositores, tampoco creo que a Trump eso le importe, pero a quien tenga familia o amigos en Venezuela debería importarle.