Impressões de um Informático •  24/05/2011

Los “gurús” de las nuevas tecnologías pretenden dirigir el movimiento 15M

Los “gurús” de las nuevas tecnologías pretenden dirigir el movimiento 15M

Según Enrique Dans, las últimas decisiones de las asambleas de las acampadas siguen una dinámica que “falla”. Claro, falla según sus propias intereses en el movimiento. En su artículo, ignora que aunque las asambleas y acampadas parten de una convocatoria de Democracia Real YA, éstas ya no representan a ésta plataforma ni pretenden representar a nadie salvo a quienes allí participan.

Enrique Dans considera que los acampados han elaborado una serie de propuestas solo porque se lo preguntaban los medios de comunicación. Nada más lejos de la realidad. Se han elaborado propuestas porque así lo deseaba la mayoría de los allí presentes, que creen en una Democracia Participativa, una Democracia Real. Es decir, simplemente han ido desarrollando parte del Manifiesto que se había elaborado en DRY. Son ciudadanos libres, no sujetos a la disciplina de ningún partido o sindicato, y por supuesto tampoco a la de la plataforma original de Democracia Real YA.

Los presentes en la asamblea sí representan a alguien, se representan a sí mismos en una capacidad admirable de autogestión y auto-organización, y cada día que pasa, lejos de perder apoyo, lo ganan. No pretenden contentar a nadie sino liberarse a sí mismos de la dictadura partitocrática en la que vivimos (manifiesto de DRY). No creen en la separación entre ciudadanos y políticos, para ellos, los ciudadanos deben decidir.

Además, es curioso cómo Enrique Dans acusa a las asambleas de dividir el movimiento, afirmando que “mucha gente” dejará de acudir a las plazas, pero lo cierto es que eso es realmente lo que está intentando hacer este señor, cargándose la iniciativa de unos ciudadanos libres que han decidido organizarse libremente y construir una sociedad mejor.

Este señor, a quien nadie ha dado el papel de representante de nadie, llega a decir que las reivindicaciones de Acampada Sol “no sirven para nada”, solo porque él no dirige el movimiento y no puede dictar las bases que a él le gustarían. Compara la democracia ciudadana de base con un debate a la hora del café. Sin embargo, las asambleas ciudadanas ya se están extendiendo por todos los barrios de Madrid y por varias ciudadades del Estado Español, a la par que continúan las movilizaciones por el 15M en otros países.

Pero quiero volver a insistir en que la mayor calumnia que este señor hace es la de acusar a los acampados de querer arrogarse la representación de decenas de miles de personas. ¿Cuándo los de Sol han pretendido representar a alguien? Además, reconoce que él no está dispuesto a hacer acampadas y asambleas pero que quienes las organizan merecen todos sus respetos. Sin embargo, hace un llamamiento a acallar (utiliza este término) a las asambleas y a negar su legitimidad.

Me parece un artículo, por lo general, que pretende dividir, lastrar, censurar y acabar con el movimiento 15M, de alguien que no ha movido un dedo ni para organizar las protestas ni para organizar las asambleas. Quiere este “gurú” de las nuevas tecnologías, al igual que Ricado Galli, quien llegó a grabarse en vídeo para publicar su crítica al movimiento 15M, que los demás les organicemos una manifestación, recibamos los porrazos de la policía, organicemos un campamento… y luego nos mantengamos en sus directrices que nos darán en vídeos de Youtube o en Tweets.

Pues no, señores. Agua que no corre, terminará podrida, y nosotros no queremos que esto se pare. No nos vamos, y el sábado 28 de mayo estaremos todos en las asambleas de barrio para organizar la resistencia a este modelo político y económico podrido que queremos cambiar.


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Soy programador informático y activista a favor del software libre. Simpatizo con diversas causas como puede ser la libertad de la información, el socialismo, la coexistencia pacífica, el feminismo, el derecho de autodeterminación de los pueblos, el ateísmo, la libertad lingüistica, la autogestión obrera, la unión de la clase trabajadora, la solidaridad y cooperación entre los pueblos o el antifascismo.