Carlos Zabalbide •  Negocios y Ocio •  27/08/2020

Negocios a los que les ha sentado bien el coronavirus

La pandemia del coronavirus se ha instalado en nuestras vidas modificando muchos de nuestros hábitos. Los salones de las casas y apartamentos han pasado a ser oficinas y colegios, y ya no sabemos distinguir muy bien entre la ropa de estar en casa y la de salir a la calle.

Negocios a los que les ha sentado bien el coronavirus

Con todas sus consecuencias, lo cierto es que hay algunos negocios que han aumentado sus ventas, como así nos lo ha confirmado el mayor fabricante de sofás y la más destacada tienda de juguetes sexuales.

Cambios de hábitos en el consumidor

Estar más tiempo en casa no solo nos ha llevado al tan manido «ordenar los armarios». Lo cierto es que una mirada más intimista nos está llevando a querer, por un lado, simplificar nuestros hábitos y, por otro, invertir en bienestar.

Hemos relegado el microondas a un segundo plano y nos hemos puesto a cocinar. Y nos gusta. Estábamos muy hartos de prisas y de desplazamientos innecesarios.

Las sillas de oficina también han subido en ventas, porque trabajar desde casa no implica renunciar a mantener sana nuestra espalda.

Pero quizás el aspecto más llamativo procede del cambio en nuestros hábitos sexuales. De algún modo, parece que buscamos diversidad, ya que los juguetes sexuales han pasado a formar parte de nuestros hábitos de consumo de un modo casi impactante.

¿Por qué compramos más juguetes sexuales?

Como señalan los psicólogos, quedarnos más tiempo en casa ha supuesto una cierta liberación para muchas personas, que se han visto relegadas de la necesidad u obligación de mil y un compromisos.

Disminución del estrés asociado a la prisa

El principal problema de nuestra vida sexual es, no resulta ninguna sorpresa decirlo, el estrés. Casi todas las consultas a sexólogos (psicólogos) se terminan relacionando, de un modo u otro, con una forma de vida que no nos permite conectar del modo adecuado con nuestra sexualidad, ya sea solos o en pareja.

Al llevar una vida más hogareña hemos podido recuperar nuestra parte más auténtica y comenzar a redescubrir o recuperar nuestra relación con nuestro propio cuerpo.

Necesidad de novedad y sorpresa

Otro de los motivos que señalan los expertos, a la hora de explicar nuestro creciente interés por los juguetes eróticos, es la necesidad humana de novedad.

Cuando las parejas llevan juntas un largo tiempo, el sexo puede llegar a convertirse en rutina, máxime cuando se trata de aprovechar el poco tiempo libre del que se dispone y no hay lugar para recrearse. Esto hace que muchas parejas se distancien físicamente.

Recuperar la chispa es mucho más fácil si se introducen elementos nuevos, ya sean complementos, como aceites para masajes, o juguetes sexuales.

En el caso de la masturbación pasa lo mismo. Para muchas personas, ya tengan pene o vagina, la masturbación puede ser algo rutinario, un simple modo de ayudarse a dormir mejor o relajarse. Lo cual no está mal, pero la introducción de elementos distintos puede llevar a sensaciones mucho más placenteras y a una mejora de la autoestima, algo que ha quedado muy patente con la llegada del succionador de clítoris.

En conclusión, parece que un modo de vida más orientado a la intimidad se está instaurando entre nosotros, con algunas connotaciones muy positivas, en lo que se refiere a cuidado personal, confort y bienestar, alimentación y sexualidad, lo cual se ve reflejado en nuestros hábitos de consumo. El aumento de ventas y de número de visitas a los sex shops online así lo confirma.