Así afectó la pandemia al poker en España

A continuación hablaremos de uno de los juegos más populares en nuestro país. Se trata del poker. En concreto, profundizaremos en los numerosos cambios que se introdujeron a raíz del COVID-19, una pandemia que lo cambió todo en España no solo en lo referente a los juegos, sino también en muchos otros sentidos.

Así era el poker en el territorio español antes de que estallase el Coronavirus

En el año 2019 y principios de 2020 el poker era uno de los juegos más exitosos de los casinos. Mensualmente se organizaban torneos en varios puntos de España, lo cual también podemos decir del resto de Europa y, sobre todo, de América del Norte. Aunque no triunfa tanto como en los Estados Unidos, a muchos españoles les gustaba poner dinero en juego en forma de fichas en unas instalaciones físicas.

El índice de actividad que registraban estos casinos era bastante elevado, pero todo cambió en marzo del año 2020.

El COVID-19 pasó una grave factura al poker

Cuando en China empezó a propagarse el Coronavirus, la situación parecía muy lejana para los españoles. Sin embargo, el escenario cambió cuando traspasó la frontera europea y llegó a Italia. Poco después acabó penetrando en España y millones de personas se infectaron.

Retomando lo referente a estas instalaciones físicas, durante muchos meses el acceso a ellas estuvo restringido. De hecho, los ciudadanos del país ibérico no pudieron salir de sus respectivos domicilios a lo largo de un período de tiempo que se hizo eterno.

Es comprensible que no se permitiera jugar al poker en un casino u otras instalaciones similares. Y es que hablamos de espacios sin ventilación natural, completamente cerrados, en los que no solo se compartía el aire respirado por todos los jugadores.

Por si fuera poco, los usuarios tocaban fichas y cartas -así como el croupier-. Conviene destacar que el virus también se propagaba al tocar superficies que hubieran entrado en contacto con alguien que estuviera infectado. Así pues, por desgracia el poker acabó convirtiéndose en un foco de contagios que convenió limitar al máximo.

A medida en que se inició la desescalada, los casinos abrieron sus puertas, aunque con importantes limitaciones en lo referente al aforo.

Al principio algunas de estas instalaciones estaban limitadas al 30 por ciento respecto a su capacidad total. Es decir, si en un casino cabían unas 300 personas, tan solo 90 podían disfrutar del ocio en dicho espacio.

Por supuesto, el uso de las mascarillas era obligatorio, así como el del gel hidroalcohólico. Había dispensadores de esta sustancia no solo en la entrada, sino también en otros puntos estratégicos, incluyendo las propias mesas en las que tenían lugar las partidas.

Es innegable que la experiencia no era tan satisfactoria como antaño, puesto que algunos jugadores estaban más pendientes de no contagiarse que de aplicar una buena estrategia para ganar las partidas y los torneos.

Los cambios del poker y la evolución tecnológica

Aunque ahora la situación es mucho mejor en términos sanitarios, en algunos ámbitos ha habido cambios que parece que se mantendrán mucho tiempo e incluso perpetuamente. Un claro ejemplo es el del uso de mascarillas en centros de salud, desde farmacias hasta hospitales y clínicas en general.

En lo referente al poker, algunos casinos han optado por mantener las medidas de higiene como la de colocar dispensadores de gel hidroalcohólico y obligar a los jugadores a hacer uso de él. Así las manos están desinfectadas cuando entran en contacto con las fichas y las cartas.

Aunque esto no impide disfrutar del poker al cien por cien, la pandemia dio pie a que muchísimas personas se animasen a probar la alternativa online. Portales especializados como GGpoker.com experimentaron un auge sin precedentes.

Hoy en día este tipo de páginas web siguen siendo muy visitadas. A diario registran una enorme actividad por parte de usuarios mayores de edad que quieren pasárselo en grande e incluso obtener beneficios si acaban siendo los ganadores de las partidas y los torneos.

Siendo conscientes de que el COVID-19 había aumentado al máximo su popularidad -así como los beneficios económicos-, no dudaron en invertir una parte de ellos con tal de mejorar sus plataformas. Las páginas web y las aplicaciones poco tienen que ver con las de antes. Hoy en día son mucho mejores, sobre todo en lo referente a la intuitividad.

Estamos ante unos portales en línea que son fáciles de utilizar y se adaptan a todo tipo de dispositivos. Ordenadores, teléfonos móviles y tablets son utilizados a diario para disfrutar del poker tanto gratis como de pago, una tendencia que irá a más, tal como sucede con el comercio electrónico que poco a poco va relegando a un segundo plano a las tiendas físicas.