Maneras de ayudar a los niños a aprender los mapas

Los mapas brindan la oportunidad al niño de abrir su percepción del mundo, de agrandarlo y a su vez de situarlo como parte de cierta nación o comunidad. Además, las cartografías resultan ser herramientas muy útiles para aprender datos geográficos -saber la ubicación de ciertos países, mares o montañas- mientras se divierte. Te dejamos algunas recomendaciones para ayudar a los niños en su aprendizaje de los mapas.

1. Elegir un mapa del interés del niño

Existen no menos de 10 tipos diferentes de mapa mundi, organizados por temáticas muy variadas y que pueden resultar bastante útiles dependiendo del interés que se tenga para aprender tal o cual asunto. Digamos que tu hija le suele llamar la atención todo lo referente al mundo marino, las costas y los nombres de los mares y ríos. Lo ideal para ella en ese caso sería un mapamundi de aguas subterráneas, ya que en él pueden observarse todas las reservas de agua del planeta, con diferentes colores que ayudan a distinguir los océanos, los diferentes lagos y ríos.

O si por otro lado, notas en tu niño cierto asombro por la historia, se han elaborado mapas mundi antiguos que muestran una distribución social, cultural y política del mundo desde sus inicios. Estos incluyen territorios y naciones que en la actualidad ya no existen y he ahí un punto interesante de dónde empezar un estudio: haciendo comparativas con un mapa moderno.

En este caso, es un asunto de escucha y apertura no solo hacia las necesidades de aprendizaje que exigen las instituciones escolares, sino del lugar donde se encuentra la curiosidad del infante.

Decoración con mapas

La geografía como asignatura es algo que trasciende el hecho académico. En los tiempos en los cuales vivimos tener algunos conocimientos en este campo se hace indispensable tanto para saber de la ubicación propia, como para forjar una cosmovisión en relación a lo que es lejano y/o diferente a nuestro entorno. Estudios de hecho han revelado que entre más pronto un niño conozca del ambiente que los rodea, mejores relaciones podrá tener con el medio ambiente y su cultura.

La idea de decorar con un mapa algún espacio en el hogar que ocupen con cierta frecuencia los niños es enriquecedor, en tanto les ayudara a entender de manera clara dónde están ubicados los países y la forma que tienen, la relación o cercanía de estos con otros territorios, y por supuesto se abre de forma bastante ilustrativa la conversación sobre la amplia diversidad cultural en nuestro mundo.

Dependiendo de la edad de los niños, podría elegirse entre uno en el que ellos mismos puedan colorear y delinear países, o simplemente uno que identifique continentes y países con animales, comida, vestimenta entre otros elementos distintivos de cada nación. Lo importante será colocarlo en un lugar visible y que más que un objeto exclusivamente decorativo, resulte una invitación a observar y/o participar.

Mapas interactivos

Como hemos mencionado, hay muchos tipos de mapas que pueden ser del agrado de tu hijo, pero otro factor fundamental es que existen en el mercado estilos muy variados de presentar dichos mapas.

Pensando precisamente en las etapas del desarrollo neural de los niños hay mapas con diseños que permiten interactuar con ellos y hacer de la experiencia de aprender algo realmente muy divertido. Estos, sin duda alguna, se presentan como una excelente opción para los niños, ya que los involucran activamente en el rol de reconocimiento de áreas.

Mapas que se completan con imanes que el niño debe colocar, mapas donde se pueden colocar piezas distintivas luego de haberlos completado en su estudio, mapas en forma de rompecabezas que el pequeño deberá completar para poder tener una visión total del mundo, son algunas de las múltiples opciones disponibles hoy en día.

Sobre los mapas que pueden ser coloreados, cabe aquí hacer una especial mención ya que, en el acto de pintar, la creatividad que se localiza en el hemisferio izquierdo se activa para desarrollar la lógica del pensamiento en el cerebro de los niños. Hablamos de que la imaginación se asocia al pensamiento lógico en el desarrollo al asignar colores para diferentes partes del mapa.

¡Enseñemos a los niños los mapas! indiscutiblemente ayudan a nuestros pequeños en su crecimiento y su relación con el mundo.