Agencias •  Internacional •  30/08/2020

El navío de rescate Louise Michel traslada a todos sus pasajeros al Sea Watch 4 alemán

  • El navío de rescate financiado por el artista callejero Bansky había emitido una señal de socorro, inmovilizado por problemas de sobrecarga en su cubierta tras rescatar una embarcación hinchable con 130 refugiados a bordo.
El navío de rescate Louise Michel traslada a todos sus pasajeros al Sea Watch 4 alemán

El Louise Michel, el barco de rescata en el Mediterráneo financiado por el artista callejero Bansky, ha trasladado a 200 personas a otro barco de salvamento, el Sea Watch 4 alemán, tras sufrir problemas de sobrecarga en su cubierta. La embarcación había realizado una llamada de auxilio ante su situación, tras rescatar a cientos de personas en las últimas 48 horas. Tras una intervención de la Guardia Costiera italiana, que se llevó a 49 personas, la mayoría mujeres y menores de edad, el barco continuó unas horas inmovilizado hasta la llegada de la embarcación de rescate alemana.

«Acabamos de transferir a todos nuestros invitados al ‘Sea-Watch 4’, que ahora lleva a 350 personas a bordo», explicaba la tripulación en la cuenta oficial en Twitter del Louise Michel. El Sea Watch 4, que ya transportaba a otros

A pesar de haber esquivado la situación crítica, la embarcación ha informado de que aún continúan los problemas para los 350 refugiados, ya que ninguno de los dos barcos ha obtenido permiso para atracar en un puerto seguro.

El ‘Louise Michel’ avistó el pasado viernes en la zona marítima de responsabilidad maltesa, un bote de goma que transportaba a unos 130 migrantes que decidió trasladar a bordo, y que se sumaron a varios que estaba trasladando. Dado el peso en cubierta y al empeoramiento previsto de las condiciones meteorológicas marinas en la zona, el ‘Louise Michel’ se puso en contacto con el centro nacional de auxilio de la Guardia Costera de Roma, solicitando la intervención de activos navales para brindar asistencia.

La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y el Alto Comisionado para los Refugiados de Naciones Unidas (ACNUR) exigieron el desembarco inmediato de los más de 400 refugiados tanto en el Louis Michel como en el Sea Watch 4.

«El imperativo humanitario de salvar vidas no debe ser penalizado ni estigmatizado, especialmente en ausencia de esfuerzos dedicados dirigidos por el Estado», planteaban ambas entidades de Naciones Unidas a través de un comunicado. «La falta de acuerdo sobre un mecanismo de desembarco regional, solicitado durante mucho tiempo por la OIM y ACNUR, no es una excusa para negarle a las personas vulnerables un puerto seguro y la asistencia que necesitan, como lo exige el derecho Internacional», añadían.


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