“Cementerio o EEUU”: Morales revela planes en su contra tras golpe
El expresidente boliviano Evo Morales, ahora ya en Bolivia un año después del golpe de Estado, denuncia los planes de Estados Unidos para su muerte o secuestro.
“Alguien me dijo: ‘Evo, nos has abandonado’; yo le dije: ‘Si me quedaba tenía dos caminos: el cementerio o Estados Unidos”, desveló el lunes Morales, refiriéndose a su renuncia tras un violento “golpe de Estado” de la oposición, que desconoció la reelección del líder indígena en las elecciones presidenciales de 2019.
En su primer discurso ofrecido tras retornar a su patria después de un año de exilio frente a sus seguidores en la sureña ciudad de Villazón, Morales acusó al ya saliente presidente de EE.UU., Donald Trump, de dar un golpe de Estado en Bolivia en 2019.
“El gringo nos dio el golpe [de Estado] el año pasado; ahora nosotros damos el golpe al gringo en Estados Unidos”, agregó, antes de aseverar una vez más que no hubo fraude en las elecciones en el país suramericano.
Tras señalar que el imperialismo busca siempre la división de los pueblos, para dominarlos, Morales advirtió al pueblo boliviano que, una vez sometidos, saquearán recursos naturales del país.
La mejor prueba, precisó, para demostrar que no hubo fraude son las elecciones de este año, en las que Luis Arce, del Movimiento al Socialismo (MAS), ganó con un 55 por ciento de votos. “Este resultado es histórico en el mundo”, enfatizó.
Por otro lado, el exmandatario boliviano arremetió contra la Organización de los Estados Americanos (OEA), que publicó sin pruebas un desacertado informe preliminar de auditoría en el que afirmaba que Morales no había conseguido los votos suficientes, por lo que maquinó un “fraude”.
Además, denunció a la derecha boliviana, acompañada, dirigida y financiada por Washington, por intentar frenar el proceso de cambio en Bolivia. Pese a tales complots, Arce logró una contundente victoria, subrayó.
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